Ana P.O.V.
Me desperté por el sonido de la puta alarma, abrí los ojos de golpe y enseguida los tuve que volver a cerrar, la luz que entraba por mi ventana me dejaba ciega, parpadee varias veces para adaptarme a la luz y me levante de la cama para dirigirme al baño.
Salí de la ducha después de haber estado meditando sobre si debería de decirles a Hugo, Marcus y Thomas que no quería ir a ese viaje o ir, y poner en peligro la vida que he hecho aquí y que los rusos se enteren de que estoy viva de nuevo y quieran matarme.
Como soy así de masoquista me voy a arriesgar a ir, estoy segura de que me lo pasaré bien.
‘’O no’’
O sí.
‘’O no’’
O sí.
‘’Sabes tú que no, cuando veas a Alejandro vas a volver a recordar todo lo que pasasteis juntos y te vas a tirar a sus brazos’’
Lo primero, no me voy a tirar a sus brazos, porque Alejandro es agua pasada y lo segundo es que tengo una nueva vida que me gusta y no la voy a cambiar por alguien que en un pasado no me quiso.
‘’Si tú piensas que él no te quiso, allá tu’’
Es lo que demostró ese último día, y mi primo en ningún momento me dijo que Alejandro estuviera llorando, además, ni siquiera fue a mi entierro, entonces, él no me quería, volvió a Italia para tirarse a Paola y después seguir con los negocios de su padre.
‘’A lo mejor llevas razón, pero, a lo mejor te estas equivocando’’
Puede, pero, más vale prevenir que curar.
El sonido de mi móvil me saco de mis pensamientos, fui hasta la mesita que había al lado de mi cama y mire la pantalla, era Hugo.
-Dime- dije cuando descolgué.
-Ami, pasare a por ti en media hora, cuando este en la puerta te aviso y bajas con todo ¿vale?
-Sí, hasta luego Huguito- dije colgando.
Cogí una camisa de tirantes rosa palo, unos shorts blancos y unos tacones negros, me maquille levemente, deje mi pelo suelto el cual me llegaba por debajo del culo y cuando Hugo me llamo salí de mi apartamento y cogí el ascensor hasta llegar a la primera planta donde Hugo me esperaba en su Jeep Grand Cherokee blanco, vestido con unas bermudas azul marino y una camiseta de TH roja con el logo en azul marino, llevaba unas deportivas blanca y sus gafas de sol Ray Ban con los que terminaba el conjunto, se veía realmente sexy, me puse mis gafas de sol y me acerque a él, él me cogió por la cintura y me dio un beso en los labios, yo me aleje para sonreírle y le devolví el beso.
Os explico, no estoy enamorada de Hugo, pero llevo con él desde hace año y medio y le tengo mucho cariño, la que quiso empezar con esta relación fui yo, quise olvidarme de Alejandro lo suficiente como para poder volver a España y no terminar otra vez en sus brazos, y por fin lo he conseguido, Hugo me da toda la seguridad que había perdido en mi misma, quizá no este enamorada de él pero si sé que me gusta mucho y que no lo cambiaría por nada ni por nadie.
-¿Vamos?- me dijo cuándo se separó de mí con una gran sonrisa, yo se la correspondí y entre en el Jeep mientras que él dejaba mi maleta en el maletero.
En el camino de mi apartamento al aeropuerto fuimos cantando y haciendo el tonto, hasta casi nos la pegamos pero nosotros no paramos de cantar.
Cuando llegamos al aeropuerto nos encontramos con Marcus y su novia Sarah, Sarah era una chica muy simpática de la edad de Marcus, era de piel pálida, de ojos azules y pelo por los hombros rubio ceniza.
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Mátame. (NPSA3)
RomanceDos años. Dos años son los que han pasado desde la supuesta muerte de Ana. ¿Cómo estará Alejandro? ¿Habrá podido rehacer su vida o habrá caído en la pena de una muerte inexistente? ¿Y Ana? Pues de Ana lo único que os puedo decir es que irá a por tod...