Capítulo dieciocho- [parte uno]

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Narrado por Louis.

Era lunes y la verdad para nada me apetecía ir a la universidad. Una por Harry, y que me mande a la mierda. Y otra porque mis animos no se encontraban buenos para mover un pie e ir. Pero bueno, al menos estaré con Zack y Matt, ya que Zayn a de estar también algo... ¿molesto?

Me levanté forzadamente de la cama y caminando al baño para ducharme. Estuvo de lo mejor que el agua tibia de la regadera me relajara de la tensión. Cuando terminé, escojí al azar mi ropa y me vestí. Bajé a la planta baja, no antes secarme el cabello con una toalla. En la cocina estaba una despensa bien equipada, había pastas, galletas, leche, cereales, jugos; etc. Rápido agarre el jugo de naranja y lo abrí dándole un trago, mi vista se fijó en el cereal. Tal vez será mejor empezar a comer algo, aveces el hambre no lo aguanto y la elimino con puros líquidos.

Tomé un tazón de la alacena, una cuchara y la caja de cereal. Eran ojuelas escarchadas de azúcar, vertí leche hasta arriba y comí. Vaya, de verdad que no sabía mal.

Dejé el tazón en el fregadero y salí con mi mochila a con Zayn. Creo que ayer me descontrolé demasiado besando a la chica. No sé qué coña estaba pensando al hacerlo. Le debo una inmensa disculpa a Harry, espero y la acepte.

En la cochera sólo estaba Zack, mientras que Matt sacaba un auto negro. ¿Y Zayn?

Me acerqué a Zack y le preguntaba dónde se encontraba Zayn.

—Hoy quisó adelantarse un poco más temprano que nosotros.

—¿Porqué?— le dije frunciendo el ceño.

—Viejo, ayer me contó lo que paso en el restaurante y se fue para no verte. Dijo que no quería verle la cara a un "patán"— agache la mirada—. Perdón Louis, no quería decirte eso pero Zayn me dijo que lo hiciera.

—No te preocupes, yo tuve toda la culpa por lo de ayer.

—¿Porqué lo hiciste?— para esto, Matt ya nos había avisado para entrar al auto y él también iba escuchando.

—No sé en qué pensaba, sólo sé que me siento jodido.

—Tranquilo, nosotros no somos quién para juzgarte, aquí estamos para lo que necesites amigo— dijo Matt viendome por el retrovisor mientras Zack asentía en acuerdo.

—Gracias viejo.

...

Tuvimos sólo las primeras tres clases antes del descanso. El profesor Monroe no fue y salimos a la cafetería antes que todos.

Harry estaba con sus amigos, Niall y un chico moreno, no sabía su nombre. Zayn se acopló con nosotros y de vez en cuando me decía una palabra.

Harry se encontraba a dos mesas adelante que nosotros, a veces me miraba fijo. Su mirada era de un completo odio y enojo, Niall también me miraba a veces pero él me sonreía.

—Ya vengo, chicos.

Les dije a mis amigos levantandome y caminando a la mesa de Harry. Él se dió cuenta que iba hacia su dirección y me seguía con la mirada hasta que estaba al frente suyo.

—Harry, ¿puedo hablar contigo a solas, por favor?— le pregunté bajo y él me miraba de mala manera.

—¿Perdón?— echó una risita sarcastica—, ¡pero yo no habló con pendejos!

Mis ojos se abrieron como plato al escucharlo, estaba furioso.

—¿Q-qué?— le dije tartamudeando.

—Lo que oiste... pendejo.

—Pe-pero Harry yo...— le toque el hombro y lo que recibí fue un empujon de su parte tirandome al suelo.

—¡No me vuelvas a tocar!— la clase, sorprendida al igual que yo, vimos como Harry salía veloz de la cafetería empujando fuerte las puertas.

Zayn me tendió la mano para levantarme y me puse de pie algo atónito, aún.

Pero yo aún te quiero Harry.

...

Narrado por Harry.

Estaba llorando en el baño de la universidad, aunque menos que ayer. Me dolió hasta los huesos haberle hecho eso a Louis, nunca me ha gustado agredir y lastimar a la gente.

Me sentía a la vez, un idiota en haber creído a Louis, en amar a un idiota como él. Ya jamás lo volveré a tratar igual, a confiarle y mucho menos ser su amigo.

Ayer por las noches, las chicas me ayudaron como nunca. Una cosa que me dijo Gemma, fue que de primero me comportara mal con Louis —hoy exageré y demás—, y que lo sorprendiera perdonandolo. Pero me negué. Él ya no se merecía mi perdón, nunca saldra de mi boca diciendole que le disculpaba su estupides. ¡Yo le amaba, mierda!

Se escucharon murmullos y pisadas entrantes en el baño, cerré bien la puerta con seguro para que no me vieran así.

—¿Harry?— tocaron la puerta. Solté aire en alivio de que fuera Niall y no otra persona.

Limpie mis mejillas mojadas por las lagrimas y salí. Niall venía con Liam.

Liam sabía de lo que tenía con Louis, y me dijo que si le quería luchara él, eso era una cosa. Pero si me agradaba que me diera la oportunodad de conocerle y así fue. Pero ese pendejo ya no me agradaba.

—Ow, Harry— Niall vió que mis ojos se cristalizaban de nuevo y me abrazó junto con Niall. Tragué el nudo en mi garganta.

—Gracias chicos pero mejor vamonos a clases.

...

Cuando terminaron las clases salímos del edificio y ví que Louis estaba con sus amigos. Él abrazaba de la cintura a... otra chica. Mi enojo y celos empezaron a crecer. Niall me tomó de los hombros y me gritó, no me dijó, me gritó que me calmara y lo olvidara. Pero no podía.

Por impulso, me encamine hacia con el bajo los llamados de Niall. Louis vió que iba a con él y me sonrió, esa sonrisa bonita se esfumara.

—Con que para eso querías que te disculpara, eh— le señalé a la chica.

—¿De qué hablas?— su rostró se volvió a interrogante.

—¡De que eres un puto!

Mi puño se estampó en su mandíbula logrando tirarlo al sacate. Se levantó con sangre en su boca, y con una distracción me regresó el golpe en mi estómago haciendome sofocarme.

—Oh, no debiste hacer eso Louis— deje caer mi mochila y en posición le dí un golpe en la mejilla.

—¡Ya basta Harry!— me gritó Niall.

—¡Cállate la boca por una vez por favor Niall y largate!— Niall derrotado, se fue pisando fuerte y dejando solo a Liam.

Cuando voltee de regreso a Louis, él me recibió con un golpe en la nariz haciendome sangrar.

Me tire sobre él tirandolo y posicionandome a horcajadas golpeandolo cada vez más fuerte. Mi rabia iba aumentando cada vez más.

—¡Eso te pasa por lastimarme!— un golpe—. ¡Esto por ser un idiota!— otro golpe—. ¡Esto por puto!— otro golpe—. Y esto...— me acerque a su cara susurrandole con dientes apretados—... porque te amaba— y otro golpe.

Su cara estaba sangrante, morada e hinchada más que la mía. Me levante con la ayuda de Liam y limpiandome la poca sangre con mi camisa. Los amigos de Louis y la chica lo ayudaron a levnatrse después de que caminara más lejos de él.

Zayn, Harry... mi Harry— oí que susurró audible y sollozando. Volte a verle y me miró— Harry...

Eso último lo susurró derramando varias lagrimas por su mejillas. Ya no me importaba su dolor.

Eso te pasa por lastimarme. Ahora será así, lo que te espera... cariño.

Stockholm Syndrome - Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora