⤷Capítulo Siete.

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Para el jueves en la tarde Rose ya no se encontraba en aquella casa,había regresado a su departamento de soltera ya que la enorme casa estaba a nombre de Namjoon y Jimin. Pues la señora Kim, a pesar de que Rose le caía bien, no dudaba en que algún día tuvieran sus diferencias y prefería que su nieto e hijo estuvieran a salvo.

Aunque comprar una nueva casa no era el mayor problema para Namjoon en ese momento. El abogado al que había contratado le había dicho que lo más probable es que Rose quisiera la custodia completa de su hijo y que lo más seguro es que sí la tuviera.
O muy bien podrían tener la custodia compartida, pero Namjoon lo que quería era que  su hijo no estuviera con su casi ex esposa,más que nada no quería que lo hiciera sentir mal porque él sabía lo sensible que era Jimin.

Finalmente suspiró cansado y vio lo enorme que era su oficina,el papeleo en su escritorio y los enormes cuadros con las fotos de los artistas que trabajaban para él. Grupos de chicos que buscaban el sueño joven,mujeres que querían triunfar en el mundo del modelaje y actores que querían hacer desfallecer a las adolescentes, y que increíblemente lo hacían, con sus bonitas sonrisas y cuerpos musculosos.

Su vida, tal vez,iba a mejorar de ahora en adelante.

Dejó de lado su MacBook cuando la puerta de su oficina se abrió y Jimin entró corriendo con su mochila azul, atrás de él JunMyeon con algo que parecía ser una enorme caja.

-¡Papá mira esto!.-Habló el menor corriendo a sus brazos para después ser cargado y sentado en las piernas de su padre.
Finalmente pasó lo que parecía una invitación de color roja con azul y puntos amarillos.

¡Estás invitado a mi fiesta de cumpleaños número siete!.

Namjoon sonrió al ver la emoción de su hijo, era la primera vez que lo invitaban a una fiesta de cumpleaños. Incluso él parecía ser la primera vez que iba a una fiesta infantil que no era por parte de su familia o la de Rose.

-Es el cumpleaños de Tae, y su papá, el maestro Jin,le hará una fiesta enorme en su casa. Él dijo que yo era un invitado de honor y que no podía faltar.-Siguió con sus mejillas rojas de la emoción y con sus ojos en dos líneas perfectas por la enorme sonrisa que tenía.

-Qué bien, mi amor, me alegro mucho.-Contestó el moreno también sonriendo, contagiado por la alegría del menor.-Ve pensando qué regalo le llevarás, ¿de acuerdo?.-Jimin asintió y se bajó del regaso de su padre,dejó su mochila en el enorme sillón largo y salió gritando el nombre de su secretario.

Cuando Jimin iba a la empresa era la distracción en persona para los trabajadores,para todos. No había persona que no cayera rendido ante sus encantos y para complacerlo todos jugaban a lo que él quería. Incluso los grupos de chicos dejaban de lado sus labores como ídolos para estar con el pequeño Kim.
Y eso no le molestaba a Namjoon.

-Jimin me dijo que era el Omega de un niño.-Comenzó JunMyeon y Namjoon asintió de regreso a su MacBook.

-Si...-Asintió lentamente.

-¿Qué?,¿solo "si"?,¿sabes lo que es un Omega y un Alfa?.

-Cálmate loco, solo es un juego de niños.Y solo son eso, niños, no estoy preocupado de que ese tal Min YoonGi sea un pervertido.-Contestó virando los ojos,el simple hecho de decir que Yoongi era un pervertido lo hacía sentir estúpido porque era obvio que no sabía lo que realmente significaba.

𝖴𝗇̃𝖺𝗌 𝖢𝗈𝗅𝗈𝗋 𝖱𝗈𝗌𝖺 -𝖭𝖺𝗆𝖩𝗂𝗇  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora