Rey de Espinas *Namjin*

Capítulo 17

—Esto ya es demasiado. 

Namjoon miró a Moonbyul quien no despegaba sus ojos de las puertas del Palacio, ella estaba mirando con reproche y enfado a SeokJin. 

—No entiendo cual es el descontento en toda esta situación —Namjoon murmuró mirando a su rey. 

SeokJin llevaba ropa cómoda para el largo viaje y estaba agachado frente aún pequeño niño de cabello casi blanco, el pequeño sostenía con fuerza entre sus pequeñas manos la tela de la camisa rosada de SeokJin, negaba con la cabeza repetidamente mientras veía al azabache hablar. 

—Ese niño es el problema —aclaró la chica a su lado—. No se le despega a SeokJin en ningún momento y lo sigue como un pequeño cachorro, incluso Xan-Xan lo acompaña por todo el Palacio. 

—¿Y quién es el pequeño?

—Jiwon —respondió con un resoplido, su disgusto por el niño era más que claro—. Kim Jiwon. 

—¿Kim? —preguntó desconcertado. 

—Seokjin se lo encontró en la calle y decidió traerlo al Palacio para criarlo como su hijo —expresó con ligera molestia—. Lleva cuatro días en el Palacio y aun así ya tiene más ropa incluso que yo, SeokJin puso al maestro Yoh a darle clases para que el niño aprenda a leer y escribir, también está aprendiendo del reino y de Külmery —llevó sus manos a la cabeza y comenzó a peinar de forma nerviosa su cabello—. Comen juntos y salen a pasear por los jardines al atardecer, SeokJin va a su habitación por las noches a leerle y no sale hasta que el niño se duerme, incluso anoche SeokJin le permitió dormir en su habitación. 

—¿SeokJin ha decidido criarlo? —preguntó confundido—. ¿Cómo el futuro heredero?

—Eso me temo —ella negó con la cabeza—. SeokJin ha perdido la cabeza. 

Namjoon volvió su mirada hacia el rey quien ahora sostenía al pequeño niño entre sus brazos, cuando se separaron vio como SeokJin limpiaba delicadamente las lágrimas en el rostro del niño para después dejar un suave beso en la frente, vio las pálidas mejillas del pequeño tornarse rojas ante el gesto cariñoso. 

Despeinando ligeramente los blanquecinos cabellos el rey se colocó en pie y comenzó a caminar hacia ellos. 

—Ya podemos parti… 

Las palabras de SeokJin se vieron interrumpidas cuando giró bajando la mirada, el pequeño niño tiraba ligeramente de la tela oscura de su pantalón. 

—Jiwon… 

—Vas… tu si vas… —la voz era temblorosa y apenas un tono más alto que un susurro—. ¿Si vas a regresar, verdad? 

Moon bufó con fastidio a su lado y rápidamente subió al carruaje ignorando aquella escena. SeokJin ni siquiera la miró, toda su atención sobre el pequeño niño que lo miraban con ojos llenos de lágrimas y una mirada suplicante. 

—Voy a volver cariño —SeokJin aseguró poniéndose de rodillas para estar a la altura de Jiwon—. Ya hablamos de ello, mi amigo Hyung Sik se quedará contigo mientras estoy lejos, él va a cuidarte y tu vas a… 

—Estu… estudiar con él… con el mestro Yoh —murmuró bajito. 

—Maestro —corrigió suavemente y sonrió con cariño—. Solo me iré unas semanas y cuando regrese espero que puedas leerme algo —la voz de SeokJin era mucho más suave y dulce que de costumbre. 

—¡Si! —gritó con alegría—. Voy a estudiar mucho por ti, ya verás. Cuando regreses yo voy… —su suave voz perdió entusiasmo en cuanto sus claros ojos se fijaron en Namjoon.