¿Volver a tí? - Sasuhina (Terminada)

Capítulo 20

- No soy Sasuke, preciosa. -. respondió el pelinegro de cabello largo.

- Itachi, ¿qué haces aquí? -. pregunto Hinata a un Itachi completamente diferente del que conoció. Estaba desarreglado y tenía ojeras como si no hubiera dormido en días.

- Te estaba buscando a tí. -. sonrie y se acerca a ella quien retrocede algunos pasos.

- ¿Por qué retrocedes, princesa? ¿me tienes miedo.

- Itachi, no estás en condiciones...ve a casa y date un baño. Come algo y-

- No me intentes dar sermones como si fueras mi madre. Porque ni a ella le hago caso, siempre prefiriendo a su hijo pequeño: al idiota de Sasuke que me quito su amor de madre y tu amor, Hina.

- Itachi, yo no quise...

- Olvidalo. Ahora camina.

- ¿Qué?

- Te dije que caminaras.

- Itachi, no sé de qué hablas pero debo irme.

- Si quieres ver a tu madre, ven conmigo.

- ¿Qué?

- Ya oiste, muévete.

- No lo haré, no sé que intentas pero no lo haré. Gritaré y-

- No te conviene gritar, princesa. ¿Recuerdas que así te decía? Jajaja hasta que me dejaste por el estúpido de mi hermano menor, yo te amaba Hinata...te amaba.

- Itachi, por favor...-. susurro Hinata buscando una oportunidad para salir del ascensor. Tenía todas la de perder pero debía intentarlo.

- Pero sé que muy en el fondo también me amas por eso te daré otra oportunidad. -. exclamó el pelinegro jugando con el arma que sacó de su saco. -. Camina.

- Itachi...

- Ni siquiera te atrevas a moverte. Mira, solo camina o...¿prefieres ver a tu madre en un ataúd?

- Ella no...ella no está aqui.

- Que irritante puedes ser a veces, pero mira aquí. -. en ese momento la pantalla del celular se iluminó viendo a la madre de Hinata amarrada y amordazada. -. Le hice una pequeña visita a mi suegra y le dije que viniera a visitarnos. ¿Qué opinas?

- N-no...

- Tú decides, princesa. ¿Nos vamos o no...?

HORAS DESPUÉS

Sasuke aún se encontraba revisando algunos papeles cuando la puerta se abrió abruptamente. El silencio de hace unos instantes había sido destituido por los gritos de Naruto.

- ¡Hey teme! -. gritando llegó el rubio a su lado.

- ¿Qué quieres, Naruto?

- Vamos, no te hagas el gruñón. Sé que tienes tu corazoncito y debes estar feliz.

- Ya Naruto, déjalo tranquilo. -. responde Shikamaru apoyado en el umbral de la puerta.

- Pero, es una noticia genial. Dime, ¿qué tal te cayó la noticia? ¿dónde está Hinata-chan?

- ¿De qué hablas, dobe?

- De que serás papá, nuevamente. Teme, que malo eres. No querias contarnos, suerte que Tenten antes de irnos nos contó.

- ¿Qué? ¿de dónde sacas eso? ¿Tenten? ¿de qué estás hablando?

- Hinata, venía a decirte eso. -. respondió Sakura mirando seriamente a todos. -. ¿dónde está?

- ¿Hinata? Ella no vino aquí. -. respondió confundido.

- ¿Qué? Pero ella dijo que vendría.

- Sasuke, ¿estas seguro que no vino a tu oficina?

- Claro que estoy seguro, estoy aquí toda la mañana. Díganme, ¿dónde está Hinata?

- Hace un rato estuvimos con Hinata en su departamento y ella dijo que vendría para arreglar las cosas y decirte que estaba embarazada.

- Teme, esto no es gracioso.

- ¿Me ves con cara de hacer bromas?

- Si Hinata no vino, aquí...-. susurro Shikamaru levantando la mirada.

- Maldita sea, entonces, ¿dónde está?

CONTINUARÁ.