El gruñón de mi abogado

Ｓｅｖｅｎ

Había aceptado a invitarlo a tomar algo, él elegiría el lugar y cuando terminara sus asuntos me enviaría un mensaje con la dirección y la hora.

Me sentía estúpido al no saber que ponerme, me sentía un maldito adolescente.  Así que simplemente elegí unos jeans desgastados, una camiseta verde con cuello en v y mis converse rojas, arregle mi cabello de modo que se notaran mis piercing en la oreja, todavía recuerdo que al hacermelos Todoroki no había estado nada feliz, pero ahora podría hacer lo que quisiera, él ya no podría lastimarme o criticarme de nuevo.

A los minutos recibí un mensaje de Katsuki, con la dirección donde debería ir. No estaba muy lejos de casa de Ochako, así que tome mi celular y me dirigí a la salida, prefería llegar un poco antes a que me tuviera que esperar. En mi camino al club me puse a pensar en conseguir un lugar donde vivir, Tenya y Ochako ya habían hecho suficiente por mi. Al llegar al club noté que no parecía ser un lugar no muy grande.

Miré mi celular y todavía faltaban alrededor de 15 minutos para que llegara Katsuki, así que simplemente revise mis redes sociales un poco y le mandé un mensaje a Ochako.

"Salí un rato, no se a que hora voy a llegar, espero no sea una molestia para ustedes"

Era mi primera vez en un lugar así, después de todo Todoroki era bastante conservador y odiaba esta clase de lugares. Mi celular sonó y vi que era un mensaje de mi amiga.

"Tranquilo, diviertete, desde aquí empieza tu nueva vida"

Sonreí. Era verdad, podría empezar desde cero. Seguí un poco más con mi celular. A los minutos escuche el ruido de una moto y como las mujeres que pasaban susurraban cosas mientras reían. Al girarme vi como la persona quitaba su casco. Era Katsuki, si me había parecido atractivo vestido formal, verlo con ropa casual me provocó que abriera levemente la boca.

Llevaba una chaqueta de cuero, su cabello revuelto, una camiseta negra, guantes de cuero, un jeans negro desgastado y borcegos. No podía quitarle la mirada de encima. Reaccione cuando lo tuve frente a mi sonriendo burlonamente.

—Cierra la boca, te van a entrar moscas Deku. –me tomó de la barbilla y se acercó– ¿Tanto te gusta lo que ves?

Me ruboricé y aparte su mano.

—No bromees, vamos dentro, hace un poco de frío aquí.

Me arrepentía de no traer ninguna chaqueta, no podía ser tan tonto.

Al entrar había una barra al igual que varias mesas con gente bebiendo y conversando. También una pista donde muchas personas bailaban bastante pegados, la musica estaba algo alta y las luces me mareaban un poco.

—¡¿Eh?! ¡Pero si es Bakugou!

La voz provenía de una mesa cercana a donde estábamos parados. Katsuki me agarró del brazo y me llevó hacia donde estaban dos personas. Un pelirrojo y un rubio con un extraño rayo teñido en el lado izquierdo de su cabello.

—Es raro verte acompañado Bakugou. –el pelirrojo sonreía mientras hablaba.

—Es verdad Katsuki, además rara vez te vemos por aquí. –el rubio parecía confundido, sus voces apenas se escuchaban sobre la musica.

—¿Y no piensas presentarnos hermano?

Lo vi frucir el ceño y suspirar.

—El idiota de cabello de mierda es Kirishima, –su risa se escucho y me saludó con la mano– y el pikachu es Kaminari, imbéciles, él es Deku.