Eighteen

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Katsuki y Kirishima estaban juntos preparando la cena, a mi y a Kaminari nos habían prohibido entrar a la cocina.

-Se creen muy perfectos, también se cocinar, maldición. -estabamos sentados en el sofá de la sala, el rubio se encontraba con la cabeza hacia atrás y yo con mis piernas cruzadas totalmente sobre el sofá.

-Pues que bien Izuku, yo no sirvo para eso, Eijirou es quien se encarga de la comida en casa. -suspiró y siguió mirando el techo.

-¿Ustedes viven juntos?

-¿Eh? -se giró a mirarme confundido- Si, ¿Bakugou no te lo dijo?

-Kstsuki no suele hablarme sobre sus amigos, -baje la mirada y jugué con mis dedos- lo poco que sé, es lo que me han dicho ustedes.

-¡Pero que ogro! ¿Como que no te habla de nosotros? -lo vi y parecía verdaderamente ofendido- Eso es ser muy mal amigo, se va a enterar.

Quise detenerlo pero ya se había levantado y estaba llegando al lado del pelirrojo, quien al verlo lo abrazo tiernamente.

-Eijirou, ¿sabes? Katsuki no le habla de nosotros a Izuku, nosotros sabemos casi todo sobre el, pero el no sabe nada sobre nosotros, ¿no es cruel? -hizo un puchero con sus labios y Kirishima sonriendo acarició su cabello- ¡Te mereces completamente lo de la vez que te dejó con las palabras en la boca!

-¿Eh? -¿como rayos sabían eso? Que vergüenza, fui muy inmaduro esa vez.

Kaminari soltó un simple "ah" y apartó la mirada, su pareja sólo se reía, como siempre.

-Es solo que Katsuki nos... -calló completamente al ser amenazado con un cuchillo.

-¡Si sigues hablando te mato bastardo! -me pareció verlo algo sonrojado, pero debió ser mi imaginación.

Me acerqué y lentamente baje su mano junto al cuchillo.- ¿Eres idiota? ¿Como le puedes apuntar a alguien con un cuchillo Katsuki?

-¡Cierra el pico Deku! -volvió a girarse y siguió cortando verduras, pero parecía de mal humor.

-Bien, pues sigue cocinando tranquilo. -iba llegando a la sala cuando Kaminari apareció al lado mío.

-Se llevan muy bien, ¿verdad? -su sonrisa era muy linda.

-Podría decirse que si, pero a veces me saca de mis casillas, -frunci el ceño y me tire sobre el sofá- no me escucha, se dirige a mi por sobrenombres insultantes, suele tratarme como a un niño y puedo seguir enumerando cosas.

-Pero no te has alejado de él, aún cuando hace esas cosas. Además todos tenemos un sobrenombre insultante de su parte. -reí subiendo mis pies al sofá y lleve mis rodillas a mi pecho, abrazando mis piernas.

-Porque a pesar de todo eso no es malo, ¿sabes? -asintió y espero a que siguiera hablando- A veces suele ser muy dulce.

-¿Dulce? ¿Bakugou? -asenti lentamente- ¿Estamos hablando de la misma persona? No niego que sea bueno, pero dulce...

-A pesar de sus bromas e vocabulario grosero, él suele ser muy dulce conmigo. -ladee un poco mi cabeza confundido, ¿por qué luce sorprendido?

Abrió y cerro varias veces su boca pero nada salio.

-¡Eijirou! -me sorprendí con su grito y parece que los dos en la cocina también porque se lo escucho a Katsuki maldiciendo en voz alta, a los segundos apareció el pelirrojo apresurado- Izuku esta delirando, creo que necesita un doctor.

-¿Delirando? -Kirishima me miró unos segundos y volvió la mirada a su pareja- A mi me parece que esta muy bien, Denki, ¿por qué dices eso?

Katsuki apareció con muy mala cara, seguro por el grito.

El gruñón de mi abogadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora