Capítulo 31: De vuelta a casa
Hermione, Harry y Ron llegaron a una llanura no muy lejana al bosque, la chica cayó al suelo, su poder y fuerza mágica estaba casi agotado.
— ¡Tenemos que volver! — Harry estaba furioso.
—No podemos volver, ellos son muchos, solo lograríamos que nos capturaran— Hermione trataba de hacerlo entrar en razón.
— ¡Lo abandonamos!
—Él me hizo prometer que haría esto en caso de peligro— Soltó rápidamente mirando al suelo con una profunda tristeza— Para él la prioridad era que tu salieras con vida de cualquier situación, él lo hizo por ti.
Harry dio un pequeño tropiezo hacia atrás, su mirada perdida poco a poco se llenaba de lágrimas, ya estaba harto de perder a las personas que quería, porque trataran de salvarlo.
"Yo moriría por él"
Recordó las palabras que Draco había dicho el sexto año a Snape, nunca pensó que realmente lo cumpliría, los sentimientos de Draco, nunca se los había tomado tan enserio, hasta aquel momento.
...
—Maldito, hiciste que los otros escaparan— Uno de los carroñeros traía amarrado de brazos a Draco mientras le ponía un cuchillo en el cuello— Llevémoslo al ministerio.
—No— Dijo otro parándose enfrente suyo mientras sonreía maliciosamente— Nos darán más dinero por este rubio si lo llevamos a la Mansión.
Draco no mencionó ni una palabra, estaba tranquilo, de todos modos Harry ya estaba a salvo.
...
Harry se había alejado un rato de sus amigos pensando en los posibles lugares en que tendrían a Draco, solo eran dos: el ministerio o la mansión Malfoy. Al final se decidió por la segunda.
—Iremos a la mansión— Dijo enérgicamente— Probablemente también tengan a Luna ahí.
—Harry, podría ser peligroso— Hermione lo miraba con tristeza.
—No abandonaré a Draco— Harry estaba firme en su respuesta.
Hermione también sentía que debían buscarlo, pero sus posibilidades de lograrlo eran muy nulas— ¿Y cómo planeas entrar?
Harry no pudo responder a eso, pero sintió que tal vez era necesario pedir ayuda para ello. Agarró el trozo de espejo que tenía dentro de su calcetín mientras mencionaba "Ayúdenos por favor"
Al poco rato algo apareció detrás de ellos, era Dobby, que traía una sonrisa enorme al ver de nuevo a Harry.
...
El grupo de carroñeros llegó arrastrando a Draco hacia los mortífagos que yacían en la mansión esperando órdenes de su líder.
Bellatrix los vio en la entrada e inmediatamente los hizo pasar.
— ¡Cisy! A que no adivinas quien vino a visitarnos— Grito en el gran salón mientras entraban a Draco que trataba de soltarse de su agarre.
De inmediato se formó la cara de sorpresa de Narcisa y Lucius al ver a su hijo amarrado y siendo sujetado por los carroñeros.
Por su parte Draco dejo de forcejear viendo a su madre que lucía grandes ojeras, aunque su padre se veía mucho peor, estaba completamente demacrado.
—Volvió el hijo pródigo— Bellatrix se burlaba de su situación— ¿Estaba solo? — Ahora se dirigía al grupo que lo había llevado.
—No— Contestó un poco avergonzado uno de ellos— Estaba con Potter y sus amigos.
— ¡Imbéciles, lo dejaron escapar!
—No fue culpa nuestra— Respondió de inmediato— Él se inmoló dándoles tiempo para escapar.
Draco soltó una risa burlona tratando de enojar a su tía, pero ella se percató de otra cosa, uno de los carroñeros traía en su bolsillo lateral la espada de Gryffindor que le había quitado a Draco.
Enojada por ello empezó a atacarlos y botarlos de la mansión completamente asustada y nerviosa.
— ¡Que más! —Le gritó a Draco— ¡Que más sacaron de mi bóveda!
— ¡No sacamos esa espada de tu bóveda, maldita loca! — Le respondió irritado.
Bellatrix no dejaba de rondar nerviosa alrededor suyo hasta que tuvo una idea deteniéndose en seco —Lucius, será mejor que lleves a Narcisa a otra habitación, ¡Ahora!
Lucius no desobedeció a su cuñada y se llevó a Narcisa casi arrastrándola, ella sabía que le harían daño a su hijo.
— ¡No, Lucius déjame! — Sus gritos cada vez se escuchaban más lejanos.
Bellatrix por otra parte volvió a preguntarle a Draco que más habían tomado de su bóveda, pero él la ignoraba.
Ella harta de ser paciente, lo atacó con un hechizo cruciatus, haciendo retorcer a Draco en el suelo.
—Nos divertiremos mucho hasta que me respondas Draco.
...
Harry y sus amigos ya habían planeado como entrar a la mansión y salvar no solo a Draco sino a los que se encontraran en las mazmorras de la mansión, como Luna.
Dobby primero dejó al trio dorado en la entrada de la mansión y mientras ellos se escabullían el elfo llevaría a los demás a una cabaña segura.
Al llegar a la mansión empezaron a moverse silenciosamente, pero de inmediato escucharon unos gritos provenientes de lo que parecía ser el salón principal. Era Draco.
Harry se empezó a alterar más, esos gritos eran desgarradores, como si lo estuvieran torturando de manera cruel.
Sin pensarlo mucho empezó a correr hacia él mientras sus amigos le seguían.
...
Draco estaba recostado en el suelo, ya no sabía cuántos hechizos de tortura le había mandado Bellatrix, pero algo seguro era que no se rendiría fácilmente y buscaría una forma de escapar.
— ¡Contesta maldita sea!
Draco guardó silencio, ya era en vano decirle que no sabía nada de lo que buscaba.
Bellatrix se agacho hacia él y tomó su antebrazo derecho marcando con la punta de la varita la palabra "Traidor" mientras Draco gritaba con dolor, pero ella no se detenía y cada vez la herida era más profunda.
— ¡Déjalo! — Harry apareció mandándole un hechizo a Bellatrix que ella esquivo con agilidad, pero muy a las justas.
—Harry— Susurró Draco.
La mujer soltó una risa burlona —Vinieron a rescatarlo niños ingenuos— De inmediato aparecieron dos mortífagos atrás suyo incluido Lucius —Ahora si podremos llamar al señor tenebroso.
Empezaron a lanzarse hechizos, pero la habilidad mágica del trio había mejorado bastante, desarmando a los mortífagos, Bellatrix en un esfuerzo inmediato por detener el ataque tomó a Draco de rehén poniéndole una daga en el cuello.
— ¡Basta! —Gritaba mientras apretaba más el cuello de su sobrino— O lo mato.
Harry no tenía opción más que bajar la varita, pero cuando todos guardaron silencio se escuchó unos tornillos ser aflojados, era Dobby que estaba manipulando el candelabro para que se cayera encima de Bellatrix.
Cuando este se soltó, la bruja hizo un paso atrás y Draco se liberó tomando la espada y saltando hacia el trio. Ellos lo agarraron e inmediatamente Dobby fue hacia ellos para transportarse, pero en un último intento Bellatrix lanzo la daga antes que el portal se cerrara, alcanzando a uno de ellos.
Dobby, el pequeño elfo.
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Fortuna amorosa | Finalizada
FanfictionUn pequeño accidente en segundo año cambia por completo el destino lleno de enemistad de Harry y Draco. Aquella relación de amistad se va fortaleciendo con el paso de los años e incluso llega más allá. Sin embargo, existen complicaciones para llega...