Capítulo 32

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Un mes después.

 

Bryan estaba de gira, apenas habían pasado tres semanas en las que diariamente me llamaba y me escribía para saber como estaba. Días antes de que se fuera me enfermé, todo lo que comía, aunque fuera un simple bocado se regresaba.

—¿No estarás embarazada Bri? Escuché que muchas veces el diu no funciona sino te lo ponen bien —me decía Bethany.

—Qué no, ¿por qué te obsesionas con eso?

—De todas maneras deberías hacerte un test, o mínimo ir al ginecólogo —insistió.

—¿Vas a salir ahora?

—Iré por Kevin después de la sesión de fotos con Rauw y me regreso rápido, ¿por qué?

La miré por un largo rato. Realmente si sospechaba de algo así, porque eso que ella mencionó podía sucederme.

—Comprame un test, y algo para el dolor de cabeza por favor, ahí sobre la cómoda está una tarjeta — le señalé.

Me sentía tan débil que no podía siquiera levantar mi brazo, ni mantener mis ojos abiertos.

—Ay, yo te lo compro.

Salió de mi habitación dejándome sola.

Eran justo las dos de la tarde, desde que Bryan se fue, Darell viene a verme y dejarme algunas cosas.

Desde que me enfermé, todos vienen a cuidarme.

Y es porque Bryan se los pide. Escuché mucho ruido en la cocina por más de diez minutos, de pronto veo a Darell entrar a la habitación con una charola.

—Bryan me llamó temprano y dijo que estabas muy enferma, ¿qué te pasa?

—De todo, me siento fatal —respondí casi en un susurro.

—Pues mira esto, te traje cosas que no vas vomitar, levántate.

—Es que no tengo fuerzas para hacerlo.

Se levantó y rodeó la cama, me ayudó a sentarme, casi obligándome a hacerlo y me acercó la charola. Tenía fruta picada en cuadritos, gelatina y un yogurt.

—Se ve delicioso todo esto —como se me antojaba.

Pero el solo pensar que cuando terminara de comer todo y este volvería a salir, se me quitaban las ganas de comer.

—Ya sé, y yo piqué todo —decía con una enorme sonrisa—. Hace tiempo me he dado cuenta que tienes un brillo en los ojos muy distinto.

—¿Distinto? —pregunté y me llevé un pedazo de fruta a la boca.

Asintió.— ¿No estarás embarazada?

—Eso lo averiguaremos —entró Bethany con una bolsa cristalina, se podían ver dos pruebas de embarazo y una caja de pastillas.

—¿Quiere decir que también tienes tus sospechas? —me miró.

—Es un sustito solamente, iré al baño.

Recuerdos Adictivos | Brytiago.© [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora