Capítulo 19

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❌ BRYTIAGO ❌

El día había comenzado, lo sabía porque Brianna caminaba por la habitación, escuchaba sus duras pisadas ir de un lado a otro, los cajones se abrían y se cerraban haciendo un ruido que me molestaba.

Estaba boca abajo, desnudo y la sábana cubría mi cuerpo, se hincó a mi lado y buscó algo en la mesita.

—¿Qué se te perdió? —dije adormilado, Brianna pegó un brinco y me reí.

—¿Te desperté? —preguntó culpable, asentí—. Se me perdieron unas pastillas, no recuerdo donde las dejé.

—¿Pastillas?

—Anticonceptivas —asintió y se acomodó el cabello detrás de las orejas para seguir buscándolas.

—Bebé, deja eso —me pasé las manos por la cara.

—Debo tomarme una antes de salir con Mitzy, y tú deberías estar arreglado.

—No puedo, estoy muerto —me cubrí con la sábana de pies a cabeza—. Me dejaste muy mal.

—Ah pero el señor quería que me subiera a la mesita, también al sillón de la esquina, ir al balcón y en la cama después de recorrer toda la habitación —se burló.

—Mami, pero lo disfrutaste —bajé un poco la sábana, dejando mis ojos descubiertos—. ¿O me lo vas a negar? Porque todo lo que te decía jamás dijiste que no.

Arqueó una ceja y abrió la boca sorprendida.

—Es que te extrañaba, ¿que más debía hacer? Sólo quería...

—Matarme, eso querías y lo has logrado —su cara se puso roja de la pena—. Ahora deja eso, quiero dormir.

—Tendré que comprar en la farmacia, iré al mall con Mitzy, más tarde regreso —besó y mi frente y después pasó su dedo por ella.

Dió media vuelta, usaba un vestido pegado y muy corto, que se transparentaba un poco, y antes de que saliera le hablé.

—Se te nota la tanga —me reí.

—Para que vean que si uso —soltó una risa burlona y me miró—. Te guardé un poco de comida en el refrigerador, están envueltos en aluminio.

—Dale, vete entonces mami.

Me tiró un beso y cerró la puerta.

Di un largo suspiró y sonreí al recordar lo de anoche, lo que me decía al oído mientras le daba.

"Yo soy tuya"

—Soy su papi, la traigo loquita —dije para mi mismo.

Quise dormirme otra vez, pero escuché que llegó alguien así que me metí a bañar.

Tal vez es Darell.

Me bañé rápido, y me puse un jean negro y una t shirt blanca con detalles en rojo, unis AF1 blancos y bajé.

—¡Eah, Rauw! Creí que había llegado Darell, me dijo que vendría hoy —lo saludé.

—Hace un rato lo miré cerca de mi apartamento —se sentó en el sillón.

—¿Te cambiaste otra vez?

—Sí, compré uno, queda muy cerca de aquí.

—Brianna y yo nos queremos mudar,  tener nuestro espacio —le expliqué.

—Ahí quedan siete en venta, son dos con tres recámaras y los otros de una, pero son pequeños.

—¿Y los de tres?

Recuerdos Adictivos | Brytiago.© [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora