໒❛ 𝐃𝐀𝐑𝐊 𝐍𝐄𝐂𝐄𝐒𝐒𝐈𝐓𝐈𝐄𝐒 ♡ ❫ ◗ ʚ₍ᐢ 𝙠𝙪𝙧𝙩𝙖𝙭𝙡 ᐢ₎ɞ ᵕ̈

Capítulo once

Adentrarse en la iglesia le hizo volver a esa actitud aburrida que solía llevar a la escuela hasta que se encontraba con Dave, desgraciadamente aquí no estaba su bestie del alma.

Cuando se encontró junto a su hermana con los demás jóvenes que eran parte del grupo pudo reconocer a la tal Courtney de su salón que, como siempre, iba junto al pelinegro desaliñado, el chico se veía casi igual de aburrido que él y Kim.

Había sido la hora más aburrida de toda su vida, odiaba tener que hacer estas cosas para mantener la imagen de sus padres como grandes devotos a la iglesia y a Dios. Cuando acabó la oración de despedida vió como su hermana se iba a hablar con una muchacha, tuvo que quedarse sentado en esa silla, reflexionando sobre lo que había sucedido con Axl, en cuanto lo recordó sus pómulos tomaron un color carmín que hizo que un calor llegara a sus orejas.

Estaba muy distraído hasta que sintió una presencia sentandose a su lado, al voltearse se encontró con el pelinegro amigo de Courtney.

-. ¿Hola? - Se acomodó en su asiento colocando sus manos sobre sus propias rodillas.

-. Hey.

-. ¿Qué haces aquí? No pensé que fueras creyente. - Era una verdad a medias, realmente nunca se lo planteó.

-. No lo soy, mis padres y Courtney me insistieron en que viniera... Mala idea. - Admitió llevándose una mano a sus largos cabellos oscuros. -. Quieren que tenga amigos "normales".

-. Pues no soy tu mejor opción. - Una carcajada pasó por su faringe, acariciando su lengua y resonando en los oídos del ojiazul.

-. Lo sé, tú y... Dave, ¿Cierto? ¿No quisieran salir mañana?

-. ¿A dónde?

-. A una reunión. - No sonaba muy seguro de sus propias palabras el pelinegro.

-. ¿Reunión? ¿Con quiénes?

-. Ah, unos amigos suelen hacer... Reuniones los sábados, creo que de todas formas él ya los conoce. Los espero mañana en el portón de la escuela a las dos y... No le digas a Courtney. Por cierto, me llamo Jeffrey pero dime Izzy.

-. Soy Kurt.

Aquello le dejó descolocado, rara vez había conversado con Izzy, solo cuando estaban haciendo trabajos grupales durante las clases pero de ahí no hablaban para nada.

Eso no significaba que no le agradara, al contrario de Courtney, parecía un poco más agradable.

Tuvo que despedirse casi al instante porque su hermana le hizo una seña para que se fueran, seguramente su madre estaba afuera esperándolos como siempre.

Al llegar a tu hogar lo primero que sientes es alivio, significa que vas a descansar y que todo lo del día quedó atrás, pero para Kurt era todo lo contrario. Luego de darse una ducha de quince minutos y colocarse su pijama se tiró a su cama con su cabeza perdida otra vez en lo sucedido con Axl.

Sus labios eran tan... Tan suaves y habían encajado tan bien con los suyos, deseaba repetir aquel momento mil y un veces pero debía controlarse, a penas se estaban conociendo, pero ¿Por qué le correspondió? ¿Axl se sentirá igual? ¿O solo...?

No, no debía ser negativo.

Tomó su celular para poder enviarle un mensaje a Dave diciéndole lo mismo que Izzy le había dicho hace un par de horas, obviamente el castaño no se iba a negar, entre más peligroso sonara más adrenalina acumulaba y, por tanto, más probable era que hiciera las cosas aunque eso significara arriesgar su integridad física o su vida.

Sí, digamos que no estaba tan encariñado con la vida y lo que esta requería para poder seguir adelante con ella, así de exigente se podía llegar a ser con solo diecisiete años y problemas de comportamiento.

Su celular quedó bajo la almohada mientras observaba el techo con las manos sobre su abdomen, quería hablar con Axl pero la vergüenza seguía ahí, era constante en sus venas golpeando su corazón y martillando su cabeza creyendo que seguramente al pelirrojo no le había agradado del todo lo sucedido.

Y luego venía el recuerdo de lo sucedido en la entrada de la escuela, sus labios se habían vuelto a tocar de una forma tan fugaz que se sentía entrañable como si fuera la milésima vez que compartían un beso.

Decidió que era mejor dejarse llevar por los brazos de Morfeo antes que seguir con su pequeña (gran) crisis sobre su relación con aquel ojiesmeralda tan encantador.