Obediencia |+18| (borrador)

22

El casamiento de Claire es hoy y yo ya estoy arreglada, esperando a que Zaid termine otra maldita llamada para poder irnos. Lo cierto es que estoy ansiosa por poder ver a mi amiga, sin importar que el motivo sea su casamiento con un hombre abusivo, que responde a Zaid.

—¿Ya estás lista? — Zaid me mira, mientras yo estoy sentada en el sillón del living, esperándolo.

—si, ya estoy.

—vamos— con su mano en mi espalda, ambos salimos de la casa, hasta el auto, nuevamente conducido por Ahmed— no podremos quedarnos hasta el final, ya me avisaron que algunos hombres de Anás están por el lugar.

—¿E iremos de todas formas?—le pregunto en un murmullo.

¿Por qué quiere exponernos a esto?

—quieres ver a tu amiga, te prometí que lo harías y estaremos un rato, al menos la ceremonia— me dice— luego, nos iremos.

—¿Volveremos aquí?

—si, tenemos que hacerlo— me dice— mañana tenemos otros compromisos.

—¿Compromisos?

—tenemos un almuerzo con algunos... accionistas de la empresa— me dice.

—almorzaremos con mafiosos, lo entiendo.

—Siria— hay una advertencia en su voz—no digas eso.

Pero es la verdad.

—lo siento— digo, para no generar problemas.

Tardamos más de una hora en llegar al salón donde se hará el casamiento de Claire.Al hacerlo, veo a un grupo bastante grande de hombres trajeados y mujeres bien vestidas que charlan animadamente. Es un ambiente muy diferente al que recuerdo de mi casamiento con Zaid, pero también entiendo que Claire y su esposo — del que no recuerdo el nombre — no tienen un blanco en la espalda, como Zaid y yo.

—Vamos— Zaid sostiene mis dedos con los suyos, mientras avanzamos hacia las personas. Me da un poco de ansiedad estar rodeada de mucha gente, porque durante muchos años, estuve casi siempre sola, por los castigos de las Madres— ese es el...

—el marido de Claire— murmuro, reconociendo al hombre del día que se llevó a mi amiga del convento— ¿Cómo se llama?

—Samal— me dice— supongo que verás a tu amiga cuando comience la ceremonia— asiento— tengo que saludar a algunas personas.

—claro— hago el intento de soltar su mano, entendiendo que él ira a saludar y yo me quedaré sola, pero niega.

—hoy no, Siria— Zaid suspira— no quiero que te separes de mí en toda la noche, ¿Bien? — asiento y él se detiene frente a mí, para poner su mano en mi mejilla— por favor, no me desobedezcas.

—dije que no iba a hacerlo— murmuro.

Él se inclina, me da un beso en la frente y se queda por unos segundos con su frente pegada a la mía.

—señor Kemal, qué bueno que pudo venir— el que será esposo de Claire se acerca a nosotros con una sonrisa— buenas noches, señora Kemal.

No me han llamado así antes y me quedo un poco inquieta, hasta que él y Zaid comienzan a hablar de cualquier otra cosa, que no me interesa y yo me dedico a mirar a mi alrededor, distraída.

—Siria— Zaid aprieta mi mano, llamándome la atención—la ceremonia ya está por comenzar— asiento y camino, siguiéndolo por un pasillo, rodeeados de otro montón de personas. Hay un salón con al menos diez bancos, que enfrentar un pequeño altar decorado con flores, precioso. Samal se acomoda, tal como lo hizo Zaid el día que nos casamos y nosotros caminamos hacia la primera fila, a la izquierda. Al menos podré ver a Claire de cerca— creo que no estabas escuchando— Zaid me saca de mi ensoñación— pero Samal dijo que Claire quiso invitar a las Madres.