El local era pequeño, pero se sentía un ambiente acogedor, podía ver que las mesas eran atendidas por un chico de cabellos alborotados y una pequeña niña de cabellos blanquecinos largos, en la cocina salía un hombre de cabellos negros con una charola entregando dos platos de katsudon.
-Hola Aizawa, tienes mesa para tres-
-Shinsou ayúdalos por favor- Los dos adolescentes avanzaron mientras el rubio se quedaba en la barra- A pasado tiempo-
-Lo sé, pero con todo lo que hay en casa no eh tenido tiempo de venir, nos encantaría comer katsudon- Aizawa asintió mientras se dirigía a la cocina, mientras que el rubio camino hasta la mesa donde estaban los chicos aun hablando con Shinsou.
-En ese caso supongo que debemos de mejorar en la defensa- Shinsou se quedó pensando mientras observaba atento a Izuku- Eso lo decidiremos con el resto de los chicos, buenas noches entrenador-
-Me da gusto verte muchacho, ¿Cómo se encuentra tu madre? -
-Emi se encuentra bien, ahora mismo está descansando ya que el embarazo no la deja moverse del todo- Katsuki se sentía fuera de lugar, se notaba desde lejos que aquellas personas llevaban tiempo de conocerse.
- ¡Hola Izuku!¡Hola señor Yagi! - Grito la pequeña niña mientras se acercaba a ellos con su pedido- Tres platos de katsudon, hola ¿Tú quién eres? ¿Eres amigo de Izuku? Yo me llamo Eri, ¿Tu cómo te llamas? -
-Vamos Eri, no seas imprudente-
-Me llamo Katsuki... Mucho gusto Eri- Todos se sorprendieron ya que no esperaban que aquel chico contestara tan dulcemente a la pequeña, quién se alejó rápidamente tras el llamado de su padre.
-Perdona a mi hermanita, a veces es algo enérgica- Katsuki dejo de ver a Shinsou para devorar su comida, si lo habían invitado no iba a desperdiciar la oportunidad.
-Y tu perdona a Bakugou, a veces es algo impulsivo- Respondió Yagi mientras observaba como Shinsou se alejaba para atender otra mesa, comenzaron a comer en silencio ya que el rubio menor no tenía intención de hacer platica, pero no era eso, sino que en silencio se preguntaba como estaría su padre y también...
- ¿Quiénes son esas personas? - Pregunto de repente, tanto Izuku como Yagi se miraron entre ellos para después mirar al rubio.
- Mi papá es entrenador de hockey, Shinsou es uno de los jugadores y es amigo mío- Izuku volvió a prestar atención a su plato- El señor Aizawa y mi papá, por coincidencias de la vida, se conocieron en la escuela-
-Ya veo-
-Joven Bakugou ¿Qué sucedió para que la policía te siguiera antes de entrar a la pista? - El rubio suspiro, no tenía de otra más que responder si quería que lo dejaran irse.
-Un imbécil choco conmigo cuando iba a mi trabajo, me di cuenta de que tiro algo... Era una cartera, pensé que era de él, pero cuando iba a decirle ya estaban dos policías y un hombre junto a mí, sin siquiera dejarme defender comenzaron a fastidiarme, alcance a golpear a uno en la cara y escapar... El resto ya lo saben- Yagi se llevó las manos al rostro ya que aquel era un claro ejemplo de estar en el lugar equivocado en el momento equivocado- Maldita sea, seguramente mañana ya no tendré trabajo-
-Dime Bakugou, ¿Cuántos años tienes? -
- ¿Acaso este es un maldito interrogatorio? -
-Digamos que solo es curiosidad- El pequeño peliverde sonreía amigablemente.
-Tengo 17 años-
- ¿Y ya trabajas? Increíble- Tomo un poco de arroz de su plato- ¿Vives con alguien? -
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Perderte otra vez
RomanceUn error que le costo muy caro... ¿Podrán solucionar todo antes de que sea demasiado tarde?... Sabe que jamás debió de abandonarlo como lo hizo, en especial después de aquella horrible experiencia pero ahora que estaba de regreso debía de soluciona...