Capítulo 9

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Como se esperaba tanto Katsuki como Kirishima se habían quedado en el equipo dejando a otros cuatro chicos como reservas, desde aquella vista "express" que había hecho a la pista el día de las eliminatorias no había vuelto a ver a Tomura, cuando iba a realizar los pagos de aquel infernal préstamo solo se encontraba con una rubia loca y un sujeto extraño que por alguna rara razón usaba un pasamontaña.

Al menos algo bueno sucedía ya que el tierno peliverde con el que vivía poco a poco seguía en sus intentos por conquistarlo, pequeños roces cuando estaban juntos ya sea en casa o en los entrenamientos, besos rápidos y furtivos cuando podían, algunas veces podían sentarse juntos y acurrucarse en el sillón viendo alguna película, Deku no lo sabía pero todo aquello estaba haciendo que Katsuki comenzara a abrirse más a él contándole muchas cosas sobre su vida o sus gustos... Realmente quería que las cosas duraran a como estaban en ese momento.

-Bakugou, por favor mete el letrero es momento de cerrar- El chico hizo lo pedido mientras que Aizawa y Shinsou limpiaban todo.

- ¿Lo ayudo en algo más? -

-Es todo, puedes irte sin problemas nos veremos mañana-

-Hasta mañana-

Katsuki comenzó a caminar rumbo al hogar de los Midoriya después de un arduo día en el trabajo, las cosas con el ojeroso se tornaron muy tensas y era algo que Aizawa notaba, pero como no interfería con su trabajo no prestaba atención a las cosas ya que consideraba que tanto su hijo como Katsuki sabrían manejar sus problemas de forma civilizada. Cuando estuvo por llegar pudo ver a la cara quemada amigo de Tomura, de nuevo un escalofrió le recorrido la espalda, pero primero se congelaba el infierno a que él le demostrara algún tipo de miedo a esa bola de imbéciles.

-Buenas noches Bakugou- Su voz sonaba tan burlona que realmente quería acabarles la cara a golpes, pero debía de mantenerse tranquilo.

- ¡¿Qué diablos quieres?!-

-Vamos niño ¿Realmente tienes que ser tan mal educado? -

-Di que diablos quieres y lárgate- Dabi sonrió, le encantaba fastidiar a gente como Bakugou.

-Es sencillo, Tomura exige el resto del pago antes del fin de semana...- Katsuki abrió los ojos, no faltaba mucho para liquidar su deuda, pero aun así era bastante dinero el que necesitaba- Además de que no debes olvidar pagar los intereses-

- ¿Intereses? ¿De que carajos hablas? -

- ¿Acaso tu papi no te comento?, cuando pides dinero debes de pagar los intereses por el préstamo- Colocó una mano sobre sus hombros- Es algo bastante sencillo Bakugou-

-Debes de estarme jodiendo- Empujo al maldito cara quemada.

-Tu puedes pequeño, además la gente con la que vives se ve que tienen dinero- Aquellas palabras le trajeron de nuevo aquel miedo que había experimentado cuando vio a Tomura el día de las pruebas.

- ¡Aléjense de ellos desgraciado! -

-Bueno eso dependerá de ti, esperamos el dinero el próximo domingo- Y sin agregar más comenzó a alejarse del rubio, Katsuki llevo sus manos sobre la cabeza pensando que podría hacer, no quería involucrar ni a la familia Midoriya ni mucho menos a Aizawa.

- ¿Kacchan? ¿Qué haces afuera? Hace frio- Agradeció de todo corazón que Dabi se largara por el lado contrario al que venía el peliverde, mientras que este se acercaba a donde el rubio para abrazarlo ocasionando que Katsuki correspondiera la acción ocultando el rostro de Deku en su pecho.

-No es nada, creo que me perdí en mis pensamientos ¿Tu que haces afuera? -

-Mi madre me mando a comprar medicamentos ya que mi papá se siente algo mal- Las hermosas esmeraldas que tenían por ojos se encontraron con sus ojos, ¿Cómo podía cuidar aquella inocencia y alegría que veía en su pequeño Deku?

Perderte otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora