20:50
—¿Listo para mañana?— preguntó Mary, doblando delicadamente su atuendo dentro de su maletín. No lo miró, pero se pudo percibir una sonrisa en su rostro.
—Mucho más que listo— respondió Calum, acomodando su vestuario mientras esperaba a que la mujer terminara de alistarse. Subió su bufanda para que cubriera ligeramente su boca, y decidió quitar el pequeño beanie de su cabeza—. Muy nervioso, también.
—Eso es normal— terminó, y seguidamente colgó el maletín en su hombro. Asintió cortamente, indicando que podían salir del estudio—. Pero no dejes que eso te perjudique. Sabes que es una oportunidad grandísima, ¿verdad?
—¡Claro que sí!— concedió, riendo para cubrir su inseguridad con emoción. Al escuchar a Mary reír junto con él, supo que funcionó—. No la desperdiciaré, en lo absoluto.
—Me alegra escuchar eso— asintió. Segundos después, paró a la salida del estudio, y procedió a darle un beso en la mejilla a Calum en forma de despedida—. Nos vemos mañana. Puedes practicar la rutina en tu habitación o mente, pero no satures tu cuerpo.
—Sí, lo sé. Hasta mañana— se despidió también, devolviendo el gesto.
Esperó unos momentos hasta asegurarse de que su maestra haya bajado las gradas y se haya alejado lo suficiente, y recién ahí se permitió bajar la cabeza, claramente nervioso por la reciente conversación. Sabía, obviamente sabía que era una gran oportunidad, y tenía todas sus esperanzas puestas en esa audición. Sería el inicio de su carrera, de todo lo que siempre soñó. Había practicado noche y día durante más de ocho meses, y si tomabas eso en cuenta, no existía forma de que mañana pudiera arruinarlo, por más nervioso que estara, pues su cuerpo y mente ya se sabían de memoria la rutina. Aún así, la incomodidad de la excitación e inquietud que la situación traía era imposible de evitar. Aún con la mirada puesta en el piso de asfalto, comenzó a bajar las gradas también con lentitud.
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Diet, dance and love » Cashton
FanfictionCalum es simplemente perfecto. Todo lo que hace es con completa delicadeza, firmeza y elegancia. Camina de puntillas, nunca se encorva. Practica ballet desde los seis años y su vida es completamente disciplinada. Tanto como en los horarios para hace...