CAPÍTULO 6 - Inversión arriesgada (1/8)

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Adentro de la institución educativa. Estaban caminando y platicando los dos en los jardines de la universidad, que eran hermosos; adornados con flores de la región, árboles y pinos grandes, un estanque al estilo japonés, caminos empedrados, estatuas, decoraciones con un toque asiático y oaxaqueño.

-¿Por qué quiere usted que deje a James?

-Por el simple hecho de que él tiene que casarse con una mujer que le conseguí.

-¿Acaso piensa que su nieto le gustará la decisión de usted?

-No es eso si le guste o no, se va a casar con ella para mantener el nivel social que cuenta. ¿Te imaginas como estaría contigo? Una persona que ni siquiera puede mantener sus gastos o lo peor, que siempre ha venido de una clase media.

-¿Sabes? Su nieto no le interesa si sea una persona acomodada o pobre.

-¡Cállate! – Le grita a Max y posteriormente una bofetada, que le quedó marcado en a cara.

En el edificio principal, que se encuentra los servicios universitarios y la oficina de la rectoría del campus. Estaba mirando una vitrina elegante en el que se podía destacar grandes logros por parte de Ernesto Corporation, SanPin University y los siete grupos que conforman la corporación en el estado de Oaxaca; entre ellas, la construcción de varias estaciones de bomberos totalmente equipados en los municipios de San Blas Atempa, Santa María Ecatepec, Cd. Ixtepec, Villa de Zaachila, Santiago Pinotepa Nacional y Miahuatlán de Porfirio Díaz, al igual de varios centros de salud pertenecientes a SanPin Hospital en el puerto de Salina Cruz, Tlaxiaco, Tlalixtac de Cabrera, Santa Catarina Juquila y Loma Bonita. Además de grandes obras como una planta cementera en Unión Hidalgo, la remodelación de la carretera de Oaxaca-Tehuacán, la entrega de despensas a los municipios vulnerables en el sismo de 8.3°, de ambulancias, equipo de luminarias y cableado eléctrico en la región de la Sierra Sur, Cañada y Sierra Norte, etc.

En la cancha de futbol del campus, estaba Max sentado en las gradas y recordando aquella jugada en la que James era miembro del equipo de la universidad, pero en el campus de la Ciudad de México. Apoyando hacia él con porras. El equipo de la universidad se enfrentó con la universidad tecnológica Bolívar, la segunda universidad privada más importante del país y la cuarta a nivel latinoamérica.

Hubo un empate de 2-2. Para decidir el ganador de la Liga Universitaria Nacional Privada, la única liga en donde compiten grandes universidades privadas de gran prestigio. Era a través de un desempate. Pasaron varios jugadores de los dos equipos y hasta ahorita, nadie había anotado. Llegó el turno de James, tenía el número 25, por ser la fecha que nació y su número de la suerte. Se podía sentir una tensión muy grande entre todos los asistentes. Pateó el balón, el portero ya estaba listo para poder esquivar la anotación, pero sus esfuerzos eran en vano. Se hizo el gol por parte de James, y, por ende, el equipo de SanPin University campus Bosques de Tlalpan fue ganador de la liga. Con esto, había una gran celebración que el rector del campus organizó una fiesta para poder celebrar la victoria. Sin embargo, James no quiso asistir a la fiesta, porque lo quería celebrar especialmente con Max, en un lugar tan impresionante.

Se pusieron de acuerdo en verse desde el monumento a la Revolución. Max vestía con una camisa de rayas, pantalón oscuro, una chaqueta blanca y un paliacate de color azul amarrado en el cuello y James, con una camisa casual de verano, pantalón de cuadros ajustados, chaqueta oscura y paliacate igual amarrado en su cuello, pero este era de color rojo.

-¿Pensé que no ibas a llegar? – Le dijo a James.

-Una disculpa, había un caos vial. Pero eso no importa, ¿Sabes? Estamos aquí por una razón muy espacial.

-No será porque tu equipo ganó la liga, ¿O no?

¿Él?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora