Instinct ✦ ≪JinSu≫

★70.5★

SeungWan había elegido el restaurante. SeokJin se había ofrecido a pagar todo, así que fue por un lugar más modesto. No quería un restaurante costoso y darle la impresión al cánido de que era una interesada que buscaba buenas posiciones económicas para aprovecharse de ellas, porque no era así.

De hecho su última cita había sido un año atrás, donde tuvo una relación con un tipo que buscaba buenas oportunidades. Ella pensaba que el chico solo tenía mala suerte, que las empresas no eran capaces de ver al gran talento que tenían frente a ellas. Por esa razón ella se ofrecía a ayudarlo cuando tenía algunos problemas económicos o cuando en ocasiones buscaba un lugar donde quedarse. Sin embargo, luego de un tiempo la venda se cayó de sus ojos y se dio cuenta de que el tipo no valía la pena. Sí, SeungWan no era interesada, pero eso tampoco quería decir que iba a estar con un perdedor que no buscaba oportunidades para salir adelante, solo decía que lo hacía.

Esa última relación le hizo no querer tener pareja durante un buen tiempo. Pero esos delgados muros que había construido alrededor de su corazón, iniciaban a derrumbarse. Quería tener a alguien con quien compartir sus días, alguien en quien apoyarse, alguien con quien salir, alguien que pudiera darle amor y afecto. Quería una verdadera relación, no una en la que una de las dos partes fingía estar enamorada para conseguir algo a su favor.

Y justo en ese momento, apareció Kim SeokJin. Su gusto por él literalmente fue a primera vista. Y por lo poco que llevaban interactuando, podía decir que no era ni de lejos como el último chico con el que estuvo. Ella esperaba realmente que algo bueno pudiera salir de ahí.

Ambos agradecieron cuando el mesero llegó con sus platillos. La chica esperó hasta que este se retirara para volver a enfocarse en SeokJin.

—Debo admitir —tomó su copa, la cual solamente contenía agua fría—. Que pensé que no te volvería a ver. Es decir, han pasado muchos días desde que JiMin nos presentó.

—Lamento eso. Quería... Resolver unas cosas antes de dar el siguiente paso —bebió de su limonada.

—Entiendo —colocó su mano sobre la de SeokJin, sonriéndole de manera afable.

SeokJin bajó la mirada hacia la suave caricia que le brindaba la chica. Él trataba de no hacerlo, sabía que estaba mal, pero le era imposible no hacer comparaciones.

SeungWan era una chica hermosa, con facciones delicadas, cuerpo esbelto, cabello largo que presumía de lo brillante y bien cuidado que estaba, uñas un tanto largas y con una perfecta manicura, su maquillaje era sutil pero de igual manera notorio, su voz era suave y dulce. Y su linaje... se caracterizaba por ser tierno, también dulce.

YoonGi era diferente. Sí, era pasivo al igual que la chica frente a él, pero seguía siendo hombre. SeokJin se había acostumbrado demasiado a él. El tacto de YoonGi era diferente, le gustaba sus uñas cortas al natural y con las venas que se marcaban en sus manos, tampoco solía usar maquillaje, su voz era más grave y seductora. Y aunque SeokJin nunca lo había dicho en voz alta, le atraía mucho el linaje de su ex novio, le encantaba el aura salvaje y peligrosa que podía emanar. A pesar de tener un cuerpo delgado y con algunas buenas curvas, sabía que no era tan frágil como podría aparentar. Y terminando por algo más íntimo, SeokJin se había acostumbrado a alguien que quizás no tenía senos, pero sí un pene.

Bebió nuevamente de su copa con limonada, comenzando a sentir que haber tenido una cita no había sido del todo una buena idea.

SeungWan alejó su mano al notar que el cánido no había reaccionado como esperaba. Forzó una suave sonrisa para luego tomar los palillos que estaban a un lado de su comida.