Instinct ✦ ≪JinSu≫

★Final★

Cuando SeokJin regresó a Seúl, YoonGi no permitió que hablaran de lo que pasaría en dos semanas, en cambio el felino trató de pasarla de lo mejor junto a él, junto a sus amigos y junto a su familia.

Ganó una medalla en uno de sus partidos de basquetbol. Tocó el piano por última vez. Se despidió de la universidad. Tuvo una pijamada con sus amigos en el apartamento de HoSeok. Probó el bendito juguete sexual junto a SeokJin. Estuvo presente cuando YeJin se casó por el civil. Tuvo otra videollamada pero esta vez con los padres de SeokJin, haciéndoles saber que había sido todo un placer haber podido conocerlos. Celebró su cumpleaños y también celebró el de SeokJin, aunque el suyo sería hasta varios meses después. También fue al último desfile de moda de su madre JiHyun.

Ese último día disfrutó de su piscina. Hizo que SeokJin le colocara aquella misma inyección que le permitía sentir el sabor de las cosas para poder disfrutar plenamente de la comida. Y juntos fueron a una pista de patinaje sobre hielo.

Ninguno sabía patinar, pero se habían divertido demasiado. Tomados de la mano, cada uno cuidando del otro, se dirigieron hacia afuera de la pista para poder quitarse esos patines que les habían hecho sufrir por una buena hora y media.

—Me duele todo —comentó el felino, quitándose el primer patín luego de que llegaran a unos asientos.

—¿Cómo no? Te caíste como unas treinta veces.

—Cada caída fue por un año tuyo de edad... aunque me faltaron dos.

—¡Oye!

YoonGi soltó una risita baja, procediendo a quitarse el otro patín y poder darse un pequeño masaje en los pies. Vaya que ahora admiraba el trabajo duro de todos los patinadores artísticos.

—Y para que lo sepas —volvió a hablar el cánido, terminando de quitarse los patines—. Puedo estar cerca de los 32 años, pero por dentro sigo siendo un joven de 20.

—Lo sé —YoonGi se levantó para acercarse a su novio y poder dejar un besito sobre sus labios—. Vámonos de aquí, aún hay mucho por hacer.

Y así fue. Luego de eso fueron con sus amigos a ver una película al cine, y al salir, entraron al área de juegos, donde disfrutaron de unas rondas de hockey de aire, pero terminaron yéndose luego de que SeokJin sufriera un accidente, cuando el disco impactó accidentalmente contra su entrepierna.

Por último, el felino ayudó a sus madres a preparar la cena, era mucha, demasiada comida. Pero se debía a que no cenarían solos.

La cena fue tipo pícnic, solo que de noche y en el mirador donde SeokJin y él observaban las estrellas. Parecía una cena navideña, y cómo no, una buena despedida. Todos estuvieron ahí, desde la familia del felino hasta sus amigos y los amigos de SeokJin.

YoonGi se había apartado un poco del resto mientras los demás conversaban los unos con los otros. Se quedó de pie, con sus manos entrelazadas detrás de su espalda y observando el hermoso cielo lleno de estrellas de todos los tamaños. Un pequeño nudo se hizo en su garganta al tener en cuenta que esa sería la última vez que lo vería.

—Deberías estar con los demás.

YoonGi volteó a su costado derecho, encontrándose con NamJoon. El felino respiró hondo, regresando la mirada al cielo.

—Felicidades —sonrió levemente—. SeokJin me contó sobre su embarazo.

—Gracias —dijo en voz baja, elevando las comisuras de sus labios.

Ambos se mantuvieron en silencio por varios segundos, hasta que YoonGi relamió sus labios y volteó todo su cuerpo hacia el chico mitad reptil.

—Por favor, cuida de él —pidió. NamJoon no necesitó preguntar a quién se refería, era claro que hablaba de SeokJin.