Segunda Oportunidad (TERMINADA)

EPILOGO ✔

Lo que fue de...

Eleanor Soto, la madre de Eleanor. Ella se equivocó demasiado en su vida y murió sacrificándose por aquella persona que había cuidado de su hija desde niña, porque aunque Eleanor nunca le habló de él, ella lo conoció cuando ninguno de los dos observaba. Falleció arrepintiéndose pero con la idea de que su hija algún día la perdonaría por sus errores.

Eric Jones, el abusivo padre de Eleanor. Él no perduró mucho tras las rejas, pues años después murió tras meterse con las personas que no debía.

'La Bruja', jefa de Eleanor. Nunca dejó de comportarse como una bruja, pero en el fondo siempre le deseo lo mejor a Eleanor, así que fue de gran ayuda para impulsar a Eleanor a sus metas. Tiempo después se retiró de la universidad para solo atender a sus pacientes.

Julieta, la mujer detrás de Blake. Nunca dejó de coquetear con él hasta que en cierto punto consiguió lo que quería pero de ahí no fue a más, trabajó en el bar hasta que se casó.

Daniel, el galán detrás de Eleanor. Él siempre fue tierno y comprensivo con ella, después de tanto insistir consiguió su oportunidad con ella. Pero ese capítulo, no terminó bien...

Bruno, el verdadero patán de nuestra historia. Fue expulsado de la universidad después de que Blake y Nico lo denunciaran de abuso físico contra la mujer, después de eso, más chica lo acusaron por lo que no hubo faltas de evidencia para expulsarlo. Eleanor creyó que él había abandonado el lugar por su cuenta, pues ni Blake ni Nico le dijeran nunca la verdad. Después de eso, Bruno nunca fue más un problema en sus vidas.

Nico, el amigo fiel. Él nunca cambió, el siempre fue el elocuente chico que nos deslumbró con su lealtad por igual a sus dos mejores amigos. Terminó sus estudios, dejó de vivir con sus padres y consiguió un departamento justo debajo del de Blake y Eleanor porque sí, ellos vivieron juntos toda la vida. Pasaron los años e increíblemente Nico consiguió estabilidad con una bella chica, y fue feliz por mucho tiempo. Lo único que se puede decir que lamento fue que nunca pudo decirle a Blake: "Te lo dije".

Eleanor, nuestra querida Elle. Siguió trabajando para 'La bruja' hasta que se graduó. Aunque al inicio le resultó difícil alcanzar sus sueños, eso jamás la detuvo. Se convirtió en la Psicóloga que siempre deseó ser, ejerciendo su profesión para ayudar a aquellos que la necesitan, también enseñando a otros la belleza de la Psicología.

Hasta tal punto que se volvió la inspiración de varios tras conocer su historia, y es favorable decir que dejó de ocultar sus cicatrices porque un día dejó de verlas como marcas de sufrimiento para comenzar a verlas como las marcas de la guerra que vivió y de la cual sobrevivió.

Nunca le interesó saber más de su padre. Pero sí visitaba, por lo menos una vez al mes, la tumba de su madre; cambiaba las flores secas por unas nuevas y pasaba largos minutos observando aquellas palabras grabadas en su lápida.

Eleanor Soto

29/JUNIO/1974 – 30/MAYO/2020

"Gracias"

No fue capaz de poner un "Amada madre" pues había cometido sus errores, pero pudo enmendar lo cometido con su hija salvando a la persona más importante en su vida.

Blake, nuestro chico de ojos avellana. Superó las pesadillas después de varios años, y día con día se convirtieron solo en recuerdos borrosos. Terminó sus estudios de Comunicación aunque al final, increíblemente, nunca la ejerció. Toda su vida trabajó en el bar pues se sentía como ahí, hasta que un día se volvió el dueño del lugar y se sintió orgulloso.

Él siempre aseguró que la parte violenta formaría parte de su persona, pero él nunca quiso aceptar que esa parte no existía más; en el fondo, él se sentía orgulloso de poder controlarlo porque lo último que quería era ser como su padre. Nunca supo nada de él, ni nunca quiso saberlo.

Tanto Blake como Eleanor nunca pudieron sentar cabeza con alguien, ellos no encontraron a alguien que valiera la pena para formar parte de sus vidas. Alguien que aceptara que, si querías a uno, tendrías que querer al otro.

¿Extremista? A ellos les importaba un rábano. Porque sabían que solo se tendrían a ellos mismos, incondicionalmente, en cada momento.

Entonces ambos cumplieron aquella promesa sobre dejar de sobrevivir para poder vivir.

Siguieron con su vida, siempre al lado del otro; apoyándose, amándose, respetándose, confiando. Con bajas, con desgracias, con risas, con lágrimas, con felicidad, con batallas, con desafíos y con miles de cosas más.

Ellos se unieron, se destruyeron, sobrevivieron, se repararon, vivieron, crecieron y murieron. «Siempre juntos.»

Jamás sintieron la necesidad de necesitar nada más que no fueran ellos dos. Y para ambos fue más que suficiente mientras aquello les permitiese vivir su segunda oportunidad.

F I N

Con amor, Wen<3