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Día 04
Galletas de Chips
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Aquel día era bastante extraño para Adrien, pues Plagg no había tenido mejor idea que pedirle que compre galletas con chips de chocolate en la panadería de los padres de Marinette. Si bien, se encargó de comprarlas y saludar a los padres de su amiga, estaba realmente curioso de que quisiera algo dulce, después de todo, mientras más salado y apestoso fuera lo que iba a consumir, era mejor para el Kwami.
Cuando llegó a la casa y le mostró la bolsa, rápidamente el Kwami buscó un papel transparente y un moño para envolver aquellas galletas como si fuera un regalo. En ese momento, Adrien ya no pudo quedarse callado, preguntando qué tanto hacía el pequeño ser oscuro.
—Hoy es el cumpleaños de mi terroncito —informó, tratando de que el paquete se viera decente.
—Wow —exclamó, agachándose para quedar frente a él, pues Plagg estaba sentado en la mesa de centro, muy concentrado—. ¿Y cuándo es tu cumpleaños? —consultó.
—También es hoy —informó, sin mirar a su portador que lucía muy sorprendido por la información —, así que espero que esto me quede bien, porque siempre alardea de que sus regalos son mejores que los míos.
—¿Son gemelos? —soltó, más para sí mismo que para el Kwami, pero finalmente Plagg observó a su portador —¿Qué?
—No necesariamente —explicó—. Es simplemente que, junto con la creación viene la destrucción y por eso somos contrapartes. Emergimos simultáneamente.
—Por eso... como gemelos —volvió a insistir.
Plagg dejó de hablar para volver a concentrarse en el empaque que estaba haciendo, pero estaba realmente frustrado de que no le saliera bien el moño.
—¡Ya voy atrasado! —protestó, dejando lo que hacía
—¿Te ayudo? —Adrien ordenó el paquete y lo ató al cuello de Plagg para que pudiera transportarlo sin preocuparse de que fuera a caerse —. Así te será más fácil llevarlo.
—Gracias, Adrien —dijo, elevándose con un poco de cuidado para equilibrar el peso—. Te buscaré si hay una alerta de akuma. ¿de acuerdo?
—Claro, solo ten cuidado de que no te vean —dijo, afirmando con su cabeza—. Te esperaré para que celebremos tu cumpleaños, después.
—¡Genial! —exclamó, encantado—. Tengo un camembert añejado que podríamos compartir.
Adrien se despidió con un gesto de la mano y una sonrisa, que no pudo evitar convertir en risa en cuanto el Kwami salió de su cuarto, pues debido a la forma cómo había atado las galletas al cuello de Plagg, parecía un lindo gatito con un moño.
...
Cuando Plagg regresó esa noche, Adrien lo esperaba sentado en su cama. El pequeño kwami traía una bolsa con cosas que parecían ser regalos que había recibido de la guardiana y una cara de pocos amigos.
—¿Te fue mal? —indagó, cuando de repente el Kwami le lanzó la bolsa, que logró tomar en el aire, y se fue enojado a ocultarse en su cajón de queso —¿Plagg? —dijo, pero al no recibir respuesta, bajó la mirada a la bolsa. Dentro, había una variedad de trozos de queso y una nota de papel. La tomó y al desplegarla, se encontró con una nota de Ladybug.
«Gracias por las galletas y por la escena de Plagg con un moño en el cuello» y al leer aquello, no pudo evitar soltar una pequeña risita que hizo que Plagg gruñera. «Tikki dice que ha sido el mejor regalo en años, gracias. Por otra parte, envío estos quesos para que compartas con él, después de todo es su cumpleaños también. Ladybug»
—¿Estás enojado? —preguntó, elevando un poco la voz mientras sacaba los trozos de queso de la bolsa, y al no recibir respuesta, tomó un pedazo de gruyere—. Oh, éste huele demasiado bien, creo que me lo come... —pero rápidamente, perdió el queso de sus manos.
—No vuelvas a jugar conmigo —amenazó el Kwami, dejando el trozo sobre la cama—. Me vuelves a poner un moño y te cataclismo las muñecas de colección.
Adrien sonrió con nervios, llevando la mano a su cuello.
—De acuerdo, ¿le gustaron las galletas a Tikki? —consultó, para cambiar de tema.
Plagg se sentó en la cama, frente a los trozos de queso, y afirmó.
—Le encantaron, además, como eran de sus favoritas, sentía como si estuvieran hechas para ella —respondió, empezando a degustar los quesos.
Adrien sonrió, tomando el pedazo de queso gruyere que Plagg le extendía, curioso de descubrir otra faceta de su Kwami y la de Ladybug. Sin duda, un perfecto complemento, como él con ella.
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Un día de Adrien torturando a Plagg para balancear las cosas xD
Esto es un re fancanon propio, de que Plagg y Tikki probablemente tengan el mismo cumpleaños. xD
Enseguida el capitulo que sigue 😉
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Este capítulo cuenta con 754 palabras.
La siguiente consigna es "Ropa Interior"
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¡Gracias por leer y por el apoyo recibido!
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Aquatic~
05 de Agosto 2020