Día 18: Combinamos

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Día 18

Combinamos

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Sí había algo que Adrien estaba esperando con ansias en el colegio, era el "Día de las Parejas", en el cual estaba permitido que los estudiantes del establecimiento, llevaran algún adorno o ropa a juego con su pareja, o en caso de estar soltero, combinar con su mejor amigo o amiga.

Aquello se veía realmente divertido y el hecho de que en esta ocasión tuviera a alguien con quién combinar, lo hacía sentir grato y encantado de ingresar al colegio. Aún no había revelado que Marinette finalmente había caído ante sus encantos felinos, dándole el sí más dulce y mágico de su vida, así que esperaba que ésta fuera una buena ocasión de dar a conocer su relación.

Sonrió cuando vio a la chica cruzar la calle, corriendo, completamente atrasada y cargando en sus manos, lo que ambos iban a usar para combinar.

—Hola, Adrien —dijo agitada, cuando se detuvo frente al rubio, que la observaba con una sonrisa —. Perdón por la demora, pero finalmente terminé y a tiempo.

El muchacho observó el bolso que Marinette le entregó. A diferencia del que usaba a diario, éste era negro con las bandas de colores que lo identificaban y el cierre estaba adornado con un llavero en forma de flor de cerezo. El de Marinette también era negro, pero con flores de cerezo en un borde y un llavero redondo con los colores de Adrien.

—¿Te gusta? —preguntó, intrigada por la reacción de su compañero, el cual observaba el bolso con una enorme sonrisa.

—Me fascina —respondió, pero la de coletas pudo notar cómo, de pronto, la sonrisa desaparecía del rostro del chico.

—¿Sucede algo?

—Es que me acordé de la boina que desapareció —comentó, haciendo que Marinette se tensara en su lugar.

—Bueno, ¿por qué mejor no pasas los útiles al nuevo bolso y así entramos? Se nos hará tarde —le comentó, haciendo que el chico dejara sus dudas de lado y se acercara a su guardaespaldas, que aún lo esperaba, para poder cambiar su bolso por el que Marinette le regaló.

Terminados los cambios, ambos se despidieron de Gorila y se encaminaron, escaleras arriba, hacia el patio del colegio.

Adrien estaba observando cómo nadie parecía percatarse de sus bolsos combinados, hasta que la voz de Alya se escuchó detrás de ellos. Volteó hacia la chica de lentes para alardear de la creación de Marinette, pero ésta ya tenía el bolso de ella en sus manos.

—¡Wow, chica, te luciste! —le dijo, fascinada por el diseño. Adrien sonrió porque también estaba orgulloso de la creación de su lady, pero lo que siguió hizo que frunciera el ceño— ¿Es una combinación por los mejores amigos que son ahora?

—Para que sepas... —espetó Adrien, realmente molesto. Aun se la debía del día de las bromas, semanas atrás.

—Por supuesto —lo interrumpió la voz de Marinette, que lucía muy nerviosa, dejándolo congelado en su lugar —. Adrien y yo, ahora somos super mejores amigos.

Ah no, eso había sido demasiado, hasta para él mismo, así que dejando a las chicas solas, subió hacia el salón y no les habló por el resto del día.

A la hora de la salida, Marinette se paró al lado del escritorio de Adrien, mientras él ordenaba todo dentro de su bolso. Sabía que la había arruinado por culpa de sus nervios y por eso, ahora el chico no le hablaba.

—Perdón... —susurró, pero el rubio seguía concentrado en revisar que nada se le quedaba, saliendo por el otro lado para evitarla a toda costa— ¡Adrien! —dijo, saliendo tras él mientras bajaban las escaleras — ¡Ya te pedí perdón! —exclamó, haciendo que el chico se detenga en el patio y ocasionando que empezaran a captar la atención que no consiguieron en un inicio—. ¿Adrien?

El rubio giró sobre sus pies y se le acercó mucho, aunque cualquiera que los viera diría que demasiado. El chico la miró realmente molesto, pero la quería tanto que era imposible para él, mantener esa postura por mucho tiempo. ¡Era tan blando!

—Perdón... Alya me pone nerviosa y... —pero no pudo completar la frase porque quedó paralizada, al igual que todos los que veían la escena, cuando Adrien la tomó del rostro y la besó.

—Te perdono —le susurró, separándose de ella y enseñándole la punta de la lengua—, pero vas a tener que explicar esto, tú sola —y con una resplandeciente sonrisa en sus labios, salió del colegio, dejando a Marinette parada en el patio, con las mejillas sonrojadas y el corazón latiendo a mil por hora.

A su alrededor, aun nadie salía de su sorpresa... ¿Acaso Marinette había logrado alcanzar a Adrien Agreste?

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Y mejor dicho, Adrien la conquistó finalmente. Lo sé, lo siento, me está quedando con tintes Adrinette, pero es que no puedo evitarlo xD Es mi sueño frustrado últimamente ;o;

Este capítulo cuenta con 778 palabras.

La siguiente consigna es "Cartón" un poco de como fue evolucionando la amistad de Adrien con Marinette (Lo sé, lo sé, acabo de decirlo xD)

Gracias @MariAgreste18 por la idea de los bolsos xD

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¡Gracias por leer!

Aquatic~

18 de Agosto 2020

Entre Sesiones y CorazonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora