Capítulo 26 - JJK

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Me dolía la cabeza.

Traté de estirar mis brazos al notarlos entumecidos y al abrir lentamente los ojos pude ver el techo de una habitación.

¿No había logrado suicidarme?

Me incorporé quedando sentado en la orilla de la cama donde me encontraba, pero en ese momento pude notar algunas diferencias en esa habitación. No estaba en mi casa. Me levanté bastante desorientado mirando alrededor, esa casa apenas estaba decorada, solo tenía los muebles necesarios para vivir, pero no había ni un solo cuadro o detalle que me diera una pista de a quién le pertenecía ese lugar...

Aún sentía mis músculos más débiles de lo normal, pero podía moverme, así que salí de esa habitación encontrándome en el segundo piso de una casa. A pesar de no tener ninguna decoración especial, ese sitio no parecía estar abandonado. Estaba en muy buen estado, las paredes no tenían ni una muesca en la pintura, los muebles parecían recién comprados, e incluso el suelo aparentaba estar recién encerado.

Llegué a lo que parecía ser el salón de esa extraña casa, y fue más de lo mismo. Todo estaba nuevo, pero sin rastro de algún propietario.

Me asomé por la ventana algo deslumbrado por la luz al haberme despertado hacía poco, pero cuando me acostumbré no pude reconocer nada de las afueras. No había visto esas calles antes en ningún sitio, y sobre todo me extrañó que todo estuviera tan limpio. Las calles normalmente estaban sucias, con basura por el suelo o con alguna que otra mancha. Lo mismo ocurría con la fachada que había al otro lado de la calle. Estaba completamente limpia, sin rastros de humedades o pintadas. Era un lugar idílico, demasiado perfecto.

Volví a subir a la habitación donde había despertado en busca de mi móvil. Quería llamar a Jin o a alguien que pudiera explicarme donde estaba y que había ocurrido, pero no tenía el móvil en ningún lado. Lo único que me pertenecía era la ropa que tenía puesta, parecía que me había teletransportado de alguna manera...

Lo que más me abrumaba de esa situación era que después de todo, mi intento de suicidio no había servido para nada. No había muerto, puesto que aún seguía consciente, y tampoco había vuelto con Taehyung. ¿Qué podría salir peor?

Aún desconcertado por el lugar en el que me encontraba, decidí salir a la calle por si alguna persona de fuera me podría aclarar algo más de aquél sitio. Al llegar a la puerta de entrada me extrañó que ésta estuviera abierta. No tenía cerradura, solo el picaporte que se podía abrir tanto por fuera como por dentro. Todo era demasiado extraño.

Al salir a la calle, me seguí sorprendiendo por todas las zonas por las que pasaba. Ninguna de ellas me recordaba a algún otro país en el que pudiera estar. No había ni una papelera por la calle, y sin embargo, las calles estaban completamente limpias, ni siquiera tenían las típicas manchas negras de los chicles que la gente suele tirar al suelo y se quedan ahí de por vida. Estaba bastante desorientado.

Unos minutos después llegué a una especie de parque, similar a la calle anterior, todo perfecto. No tenía ni una sola planta marchita y todo era verde. Me acerqué a una fuente que había en medio de una especie de plaza y me quedé observando el agua, completamente cristalina, sin ningún rastro de suciedad.

En ese lugar, por fín pude escuchar a personas, al parecer sí había gente en ese mundo tan perfecto, pude distinguir a algunas personas paseando, incluso a niños jugar sin preocupaciones. A pesar de todo seguía siendo extraño que hubiera tan poca gente en un parque de ese tipo.

Seguía desorientado en aquel lugar, además, aún no conseguía recuperar todas mis fuerzas, mi cuerpo se encontraba demasiado cansado, pero no sabía de qué. Pensaba acercarme a alguna persona que viera cerca y preguntarle donde me encontraba, por muy extraña que pudiera parecer aquella pregunta. Sin embargo, no pude acercarme a nadie cuando noté un peso en mi espalda que me hizo desequilibrarme un poco.

Déjame verte [JJK + KTH] (Ver. Jk)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora