-Oye, amor-le dijo el peliplata mientras entrelazaba sus manos-¿vamos a Ichiraku?
El menor se removía en su cama inquieto.
-Cariño, ¿ya te dije cuán bien me haces?-decía esto mientras dejaba un camino de besos en su cuello.
El rubio quería despertar pero no podía.
-Espero que aguantes cielo-le había susurrado al oído.
Naruto se levantó sobresaltado.
-¿Fue un sueño?-se decía a sí mismo-no, imposible...cada oración se sintió tan real.
-¡Naruto!-le habían gritado de abajo-¡baja a desayunar que se te hará tarde!-gritó de nuevo Kushina.
El rubio se levantó para dirigirse a la ducha, estaba sudado y con un gran dilema que carcomía su cabeza...
*¿Qué fue eso?* sin dudas no entendía nada y más por el simple hecho de que pareció tan real...como si él lo hubiera vivido.
El baño fue rápido y al poco tiempo ya estaba desayunando en compañía de sus padres.
-¿Cómo te sientes amor?-Kushina le dedicaba una sonrisa cálida ante la pregunta.
-Mejor, creo-dijo sin darle mucha importancia.
-¿Pudiste recordar algo en estos días?-había sido la pregunta de Minato.
-Un poco pero son cosas...de poca importancia-empezaba a recordar los momentos soñados, eso no tenía nada de poca importancia.
-Oh, lo entiendo-respondió el ambarino mayor notando una rareza en su hijo-ánimos, seguro podrás recordar algo dentro de poco.
-Tienes razón, ¡Dattebayo!-respondió el rubio con una sonrisa radiante pero aún con una sensación de rareza instalada en su interior.
Así fue como transcurrió el desayuno, con un ambiente pacífico acompañado de comentarios por parte de Kushina y risas de parte de ambos rubios.
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Al terminar de desayunar, Naruto se dirigió para donde moraba su padre, quien estaba juntando y guardando unos papeles en su portafolio en el living.
-¿Pa?-lo llamó suavemente el rubio, recibiendo así un leve asentimiento por parte del mayor para que siga-¿hoy pasaré el día contigo otra vez?
A lo que el rubio mayor contesta...
-Hoy tengo que atender asuntos importantes, los cuales no puedes presenciar-detuvo su mirada en su hijo con una sonrisa cálida-espero lo entiendas, Naru.
-Es lo de menos, lo entiendo a la perfección-respondió este-¿hoy puedo hacer una misión o algo? No quiero pasar el día en casa-el menor deseaba poder aclarar un poco los "sueños" que tuvo a la mañana y poder entender un poco la rareza que sentía en su interior.
Y sí, decidió llamarle rareza ya que no puede definir en palabras la sensación que siente internamente.
Minato lo pensó por un momento para luego responder con una sonrisa disimulada.
-Bueno, ahora que lo pienso-una pose pensativa acompañaba a la oración-tengo una pequeña misión pero Kakashi te acompañará, por las dudas.
Perplejo era el estado del menor, quien quería pasar la tarde solo para poder aclarar esa sensación rara y sus sueños con su sensei, quien de "casualidad" ahora iba a ser su acompañante.
Minato, por otro lado, se encontraba emocionado por el "mini plan" que hizo a último momento, desde que empezó su tarea de volverlos a unir se ha sentido como una especie de cupido y le encantaba la idea.
La respuesta se hizo esperar, Naruto estaba en una batalla con él mismo.
*No le puedo decir "se me pasaron las ganas de salir, chau" porque sospechará y es lo menos que quiero ahora* se decía mentalmente.
-Eeeh-pudo modular luego de unos minutos eternos de silencio-creo que no habría problema en que él venga-dijo para luego rascarse la nuca y dejar salir una sonrisa no tan sincera.
-¡Okey! Entonces, vamos a la oficina-Minato se había dado la vuelta para recojer su portafolios y colocarse su bata de Hokage-seguro él ya está ahí-y sin más se fueron rumbo a la torre.
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Mientras tanto, en la torre era otra historia.
-¿Por qué siempre acepto a hacer su papeleo?-se decía en voz alta un peliplata un poco enojado-él es el Hokage, ¡NO YO!-y sin más terminó de acomodar la última pila de papeles terminados y listos para ser entregados o guardados.
Decidió acostarse un rato en el suelo, estar toda la mañana en la torre haciendo papeleo que no te pertenece era agotador después de todo.
Al soltar un suspiro escuchó la puerta siendo golpeada.
*Hasta que se digna a venir* se dijo mentalmente mientras se paraba para abrir la puerta y llevarse una sorpresa.
-¿Kakashi?-llamó el mayor al jounin, quien dejó su mirada perderse en los ojos azules profundos de su rubio.
-¿Mgh?-dijo volviendo a la realidad y posando su mirada ahora en Minato-oiga, recuérdeme que nunca más acepte su aburrido y agotador papeleo-luego de eso, dió paso a un bostezo.
-Eeh, creo que lo dejé acumular bastante-dijo Minato rascándose la nuca-pero antes que se me olvide, tengo otra misión para vos.
Kakashi sólo lo fulminó con la mirada.
-Tu nueva misión es acompañar a Naruto en su pequeña misión de rutina-y sin más le entregó un papel de la misión del menor.
Kakashi al levantar su vista del papel y posarla en Minato, pudo ver como éste le dedicaba un guiño.
-Entonces...¿te parece empezar ahora?-dijo Kakashi ahora mirando a Naruto, quien asintió con nerviosismo disimulado.
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-No entiendo que misión vio ese viejo en esto-decía un rubio en forma de queja.
-Oye, tranquilo-Kakashi se encontraba detrás de él, ayudándolo-si nos apuramos seguro terminamos antes.
Y sí, la misión era ni más ni menos que limpiar el parque...
-¿Te gustaría luego ir al campo de entrenamiento?-había hablado Kakashi mientras traía su bolsa cerrada.
-Sí, no veo lo malo-*DIJISTE SI MAMERTO, ¿¡POR QUE NO DIJISTE NO?!* se gritaba el menor mentalmente con un severo tic en el ojo.
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Unas horas más tarde...
-Oiga viejo, luego deme una misión un poco más seria-se quejaba Naruto ahora adelante de su padre.
-Pero...vos eras quien me dijo que quería una pequeña misión-Minato lo había mirado con una cara de confusión y diversión.
-Bueno, creo que nos tenemos que ir-dijo Kakashi-Yondaime sama, aquí se encuentra el informe de la misión.
-Ay por favor-dijo Naruto-no te gastes en llamar misión a la tarea de esclavos que tuvimos que hacer-y sin más se fue con los brazos tras su nuca.
-Oye, ¿cómo les fue?-preguntó en un susurro Minato.
-Habíamos quedado para ir a pasear un rato luego de esto-respondió Kakashi.
-Oigan, ¿por qué susurran?-ambos pegaron un brinco del susto-Kakashi sensei, ¿vamos?
El peliplomo se despidió del Hokage con un "luego te cuento" para irse tras el rubio.
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El campo de entrenamiento se encontraba vacío, teniendo como única compañía la ventisca fresca y suave que soplaba a esas horas de la mañana logrando así que los árboles hagan un sonido relajante.
Naruto se sentía raro y le molestaba por un lado el no haber podido pensar un poco en lo que le estaba pasando pero por otro...por otro lado...
-Oye, ¿te parece si nos recostamos contra ese árbol?-dijo el menor señalando un árbol cuyo tronco era alto y daba lugar para dos personas exactas.
-Me parece perfecto-dijo el de melena plateada, su voz había salido tan suave que el rubio se detuvo a pensar y compararla con un melifluo*.
Ambos se habían dirigido hacia el árbol para luego tomar lugar y sentarse.
Uno al lado del otro.
Bien pegados.
Sus hombros se rozaban al mínimo movimiento.
Naruto se había sacado su banda ninja, dejando así su pelo con total libertad, el cual ondeaba al compás del viento.
Kakashi había quedado embobado con esa escena.
La verdad... sí que lo extrañaba...y mucho.
Pero lo que nuestro jounin no sabía era que a Naruto también le empezaba a molestar bastante el no poder recordar nada y tener lagunas mentales que ni él entiende.
El mayor se atrevió, tímidamente, a coger un mechón de pelo del menor y acariciarlo suavemente.
-Es muy suave-su voz, tan tranquila, emanaba paz y emanaba encanto para el rubio también.
Naruto se había puesto tenso por un momento, y es que recibir ese tipo de gesto por parte de tu sensei no era algo de todos los días pero luego lo pensó, trajo a su mente el recuerdo de los sueños de esa mañana y se dejó llevar...después de todo una parte de él se sentía cómoda con la presencia de su acompañante.
-Gracias-su tono...también era tranquilo.
El rubio cerró los ojos y se dejó llevar por el momento.
El sonido de los árboles.
El sonido del viento siendo cortado por sus cuerpos.
La leve caricia de Kakashi hacia su mechón de pelo.
Y esa sensación de rareza que fue reemplazada por una reconfortante, una cómoda...una cálida.
Y sin darse cuenta, se quedó dormido.
Kakashi aprovechó para pasar su brazo por detrás del menor y atraerlo hacia él para que pueda descansar mejor mientras disfrutan del hermoso día.
Porque eso era, un hermoso día.
Naruto se acomodó mejor sobre el cuerpo de Kakashi y siguió durmiendo.
El jounin le daba todo el amor que se le fuera posible en forma de caricias suaves.
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¡Hola! ¿Cómo están? Sisi, desaparecí por un tiempo (aunque no fue mucho, creo) porque entre la escuela y otras cosas no me queda espacio para escribir.
Este cap lo hice en forma de borrador hoy a la mañana (mientras estaba en clase xd) y decidí terminarlo hoy cosa de publicar algo.
Perdón si no es lo que esperaban, trato de no colgarme mucho con la historia (y de dejarla lo más linda que se me sea posible) y hoy me agarró una especie de inspiración.
GLOSARIO:
MELIFLUO: es un sonido excesivamente dulce, suave o delicado.
No me acuerdo si la usé en algún cap pero por las dudas vuelvo a poner su significado.
Me alegra saber que más gente se suma a la lectura de mí historia, es muy lindo saber que algo que pensaba no iba a llegar lejos tenga tantas vistas y esté recibiendo el apoyo que ustedes le dan a la misma.
Mil gracias por sus mensajitos también, siempre trato de contestar todos (lo mismo con sus follows, siempre trato de devolvérselos).
Iba a publicar dos caps pero se me dificulta escribir el segundo ahora, así que denme un tiempito más...
Cualquier cosa me están diciendo por priv o en forma de comentario (adoro leerlos jajajaja) y no olviden de dejarme su estrellita ;)
Bueno, ahora sí me despido...espero estén bien en estos tiempos, les mando un abrazo enorme y nos estamos leyendo.
¡Lxs quiero!
°Sasoriisperfect°
PD: gracias a los que leyeron hasta el final de la nota jajajaja :D
PD 2: si la historia está tomando otro rumbo y va perdiendo su toque, xfis me lo avisan cosa de poder mejorar y evitar completamente eso :D
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Sentimientos encontrados by CS. (Fanfic: KakaNaru)
FanficQuién diría que un ex anbu, entrenado para no sentir ni demostrar sentimiento alguno, terminaría enamorado del hijo de su ex sensei y cuarto Hokage. ¿Por qué siente esto? Siendo que se encargó del muchacho desde que era bebé y aún así nunca sintió...