¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
21; the omen
Lydia Martin había visto y vivido muchas cosas en su vida, sobre todo la muerte, ella la encontraba, la sentía como si fuera parte de ella.
Pero ese era el precio de ser una banshee, un ser sobrenatural que gritaba por todos aquellos que no pudieron hacerlo, un ser que percibía la muerte. Y acababa de percibir a muerte de su mejor amiga.
Lo primero que vio fue el cielo estrellado, un cielo tan hermoso que la dejo pasmada un segundo, luego lo sintió. Sintió los susurros de los muertos por todos lados, susurrando y gritando un solo nombre.
Ellie.
Ellie.
Ellie.
Estaba en el bosque, en Beacon Hills. Cerca de un río, iluminado tenuemente por la luna. Observaba las ramas de los árboles susurrar una melodía escalofriante, que erizó sus vellos de los brazos.
Escuchó unas pisadas fuertes, que partían ramas y arrastraba algo en el suelo, algo que gritaba asustado y se removía. Una persona, encadenada por los pies.
—¡Scott!
Lydia arrugó la nariz ante el olor que la golpeó, tan fuerte que la mareó. Olía a sangre, tan intenso que se sostuvo del árbol a su lado.
Era un hombre, cubierto de negro, arrastrando a una persona, a una mujer, por las cadenas que rodeaban sus tobillos.
Y todo se paralizó, el grito que iba a salir de la garganta de la mujer se quedó a medio camino y el hacha que iba a la parte abdominal de la mujer se suspendió en al aire.
Lydia se acercó temerosa a la escena que se desarrollaba frente a ella y detalló los rostros de la imagen frente a ella.
Soltó un sollozo ahogado al observar el rostro desfigurado de su amiga ante el terror que le causaba el hombre sobre ella.
—Ellie...
El hombre sobre Ellie giro su rostro hacia Lydia, que se quedó estática al sentir esos fríos ojos azules sobre su cuerpo, sintió esos ojos examinarla hasta bajar y perforar en un segundo el hacha en el abdomen de la mujer luchando bajo él. Apareció frente a Lydia en un parpadeo y apretó sus brazos con sus manos.
—¡ELLIE!
🌕🌕
—Y.... ¿cómo me veo?
Lydia parpadeo el recuerdo de su presagio lejos de su mente y enfocó sus ojos llorosos en el rostro sonriente de su mejor amiga, que daba vueltas una y otra vez para apreciar su vestido sobre su cuerpo.
Debía admitir que el color lila le quedaba de maravilla, resaltaba sus maravilloso ojos castaños e iluminaba su rostro como árbol de navidad.
—Te ves hermosa Ellie.
La chica McCall soltó un pequeño grito emocionada y se tiro sobre Lydia y la abrazó hasta que sonó el timbre de la casa.
—Lydia... —La rubio fresa soltó un pequeño sonido de afirmación ante su llamado y apretó más fuerte la pequeña cintura de Ellie— te amo mucho, mucho, mucho, mucho, nunca lo olvides, ¿okay?
Lydia cerró los labios con fuerza para no sollozar y dejó un beso sobre la mejilla de Ellie.
—Ve, o Stiles va a volver a tocar el timb...
El timbre de la casa resonó por segunda vez antes de que se escucharan unos golpea en la puerta y el grito de Stiles desde el porche de la casa.
Ellie soltó un risita y tomó su bolso del escritorio, volvió a girar frente al espejo para revisar que todo estuviera en orden y alisó las manos sobre su vestido para quitar las inexistentes arrugas.
—Deséame suerte.
La chica le tiró un beso a su amiga antes de bajar corriendo las escaleras y abrir la puerta con una sonrisa.
Stiles volteo apresurado y tartamudeo al ver a su mejor amiga en ese vestido lila.
—Ellie, —soltó un suspiro enamorado y pasó sus manos por su cabello— estás hermosa.
La chica McCall sonrío y cerró la puerta tras ella una vez estuvo fuera de la casa, extendió su mano hacia Stiles y lo arrastró hasta el Jeep del chico.
—¿A dónde me llevaras?
Stiles abrió la puerta del Jeep para Ellie antes de rodearlo y hacer una mueca triunfante antes de subir al asiento de piloto.
—Es una sorpresa.
Ellie aplaudió emocionada y empezó a relatarle su semana, omitiendo en suceso con Lydia y el grito.
Después de unos minutos de manejo, llegaron a un mirador, donde se podía apreciar en todo su esplendor la cuidad en la que habían estado toda su vida.
Stiles guió a Ellie de la mano hasta una pequeña manta en el suelo frente al mirador y abrió los brazos una vez Ellie estuvo sentada sobre la manta a sus pies.
—Bienvenida al mirador de nuestro pueblo.
Ellie soltó una risa y palmeo el lugar a su lado para invitar a sentar a su chico.
—Me encanta, no es como si no hubiera venido antes pero... esto es mucho mejor que venir un a llorar y a tomar por una chica.
Stiles soltó una carcajada y pasó su brazo por la cintura de Ellie para atraerla hacia él.
—Esto es mucho mejor.
OTRO CAP porque ME LLEGA LA INSPIRACIÓN PARA DOS O TRES CAPÍTULOS A LA VEZ Y AQUÍ ESTA ESTA PENDEJADA ;)
