Después de años, ¿habrá alguien leyendo esto? Si es así, sería lindo saber cómo han estado.
Grupo:BTS. Advertencia: No. Relación: Amorosa.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-¿Puedo salir contigo Jeon JungKook?-Preguntó el hombre, sosteniendo su cintura.
-No lo sé, ¿puedes?-Bromeó JungKook, abrazando el cuello del más alto.
-Oh, en ese caso, sí, sí puedo.-Sonrió, besando sus labios.
Un quejido salió de los labios de Jeongguk cuando decidió estirarse luego de despertar, como ya le era costumbre volteó a su izquierda mirando su reloj, aún le quedaban algunos minutos antes de que sonara su alarma.
Tomo su celular soltando un bostezo en el proceso, el día había comenzado como cualquier otro, su rutina siempre era la misma desde que su última pareja le había dejado, levantarse, asearse, arreglarse, tomar una taza de café y salir de su departamento para tomar el tren hasta su trabajo, pasar horas revisando papeles y haciendo gráficas para después salir, tomar el tren esta vez de regreso y meterse en su cama luego de cenar fideos instantáneos, lo mismo una y otra vez.
-Qué patético.-Gruño luego de mirar las publicaciones en redes sociales, todo el mundo parecía ser feliz, todos menos él.
Jeon Jeongguk estaba a nada de cumplir los treinta años, aunque no lo pareciera, era medianamente alto y guapo, parecía ser el partido perfecto, pero entonces ¿por qué todas sus relaciones habían fracasado?
Por más que lo pensara nunca llegaba a entenderlo del todo, su trabajo no era el mejor pero definitivamente le iba bien, era amable, divertido y atento, además como ya habíamos mencionado era realmente atractivo, ¿qué estaba mal con él?
Soltando un suspiro el castaño decidió abandonar su cama, no importaba qué tan difícil y desastrosa fuera su vida romántica, aún tenía que asistir al trabajo si es que quería seguir teniendo una vida cómoda.
Una mueca so formo en su rostro una vez se miró frente al espejo, sus ojeras eran realmente grandes y lamentables, el cepillo de dientes que estaba entre sus manos de un momento a otro cayo al lavabo luego de recordar que había soñado.
Sus mejillas comenzaron a arder, había tenido un sueño con un extraño, un extraño al que nunca antes había visto, soltó una risa nerviosa negando levemente, él no podía sentir nada por una persona creada por su imaginación era completamente absurdo, eso lo tenía bastante claro, entonces ¿por qué en ese momento su corazón latía con fuerza al recordar el sueño?
Lavó sus manos recogiendo el cepillo que había tirado anteriormente, se lavó la cara y cabello decidido a olvidar aquel sueño, sobretodo tratando de olvidar al hombre que se encontraba detrás de él. Un quejido se escapo de sus labios, su mente no dejaba de pensar en aquel extraño, y se sentía bien.
