Sentarse a la mesa con Iris fue lo más incómodo. Yo sabía lo refinada que era ella, la manera en la que levantaba el meñique cuando se llevaba cualquier cosa a la boca... Roberth nos hacía preguntas a mi hermana y a mi, preguntas que solo le respondiamos con un "sí" o un "no". La verdad es que no nos interesaba en lo más mínimo entablar una verdadera conversación con él.
En la mesa se formó un silencio incómodo, hasta que Iris me hizo una pregunta... Vaya pregunta.
-¿tienes novio, Sadie?- después, me regaló una sonrisa que a kilómetros se notaba falsa.
-¡sí, tiene el mejor novio del mundo!- habló mi hermana.
Ella sabía perfectamente todo lo que había pasado con Iris, y no estoy segura si se habían mirado alguna vez, pero si no estoy mal si le he enseñado fotos de ella. Por eso la reconoció.
-Mira que mi hermana es una chica a fortunada por tener a ese chico. La trata como una princesa, que pena por la estúpida que se haya perdido de ese hombre...
-Ingrid- la regañó mamá.
-¿estás segura de que eres la chica que él escogió? Digo, ¿no habrá otra persona por ahí?- yo no sabía qué decir. Lo bueno era que Ingrid estaba tan furiosa que respondería todas las preguntas que nos hagan a ella, a mamá y a mi.
-¡pero si son la parejita perfecta! Hasta van a tener un bebé.
Iris había ingerido un poco de jugo, que casi se sale por sus fosas nasales.
-¿estás embarazada?- su voz se había transformado, ya no era dulce ni sarcástica. Era diferente. Rara.
Asentí.
-¿cuántos meses tienes?
-¿dos semanas?- fue lo que atiné a decir.
Roberth soltó una risa y todos los quedamos viendo.
-vaya, Rose, se ve que si has hecho un buen trabajo cuidando a las niñas- me giré para ver a mi hermana y ella ya estaba roja- una está embarazada y supongo que no ha terminado la universidad... Y la otra... ¿Ya te graduaste, Ingrid?
-¡por lo menos mamá tuvo los huevos para quedarse con nosotras. Nos sacó adelante con la ayuda de mis abuelos, que en paz descansen! Tú no eres más que un maldito cobarde.
Mamá se había levantado para calmar a mi hermana. El señor se había quedado callado y las dos mujeres que estaban completamente perplejas. Supongo que Iris lo estaba por la noticia del bebé.
Después de la comida, todos estábamos sentados en la sala. Nadie hablaba. No había nada que decir.
-Iris, hija, ¿por qué no llevas a tus hermanas a tu cuarto? Sirve que se conocen.
-no somos hermanas- dice mi Ingrid.
Saco mi celular y comienzo a escribirle a Millie, y a Finn.
Millie Bff ❤️
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Sin duda alguna, este es el autor ganador
Millie tarda demasiado en responder. Supongo que debe estar con su familia, intentando caerle bien a su abuela o jugando con Ava.
De ese no me mandaste foto.
¿Quién es?
John Green.
Sin duda, lo peor.
¿A que no a dividas quien es mi "hermana"?
Iris. Ya lo sabía, Finn me dijo que ella le dijo que su papá le había dicho...
¿Entendiste?
¡¿FINN SABÍA?!
Si Finn sabía,eso significa que él e Iris habían estado hablando, y hasta pudieron haberse visto. ¿Cuándo? ¿Antes o después de que supiéramos lo del bebé? ¡¿Por qué ni siquiera le dijo que teníamos sospechas de estar esperando un bebé?!
Mamá, Ingrid y yo solo nos abrazamos entre nosotras a las 12 de la noche.
-¿en qué piensas?- me preguntó Mamá.
Supongo que ella y mi hermana se habían dado cuenta de que después de hablar con Millie, yo estaba como ida. Y es que estaba pensando.
¿Debería dudar de Finn?
Siento unos brazos rodearme. Me quedo quieta cuando noto el cabello rubio de la persona que me abrazó.
