Mi maid.

Capitulo Final.

*Narra la autora(osea yo xD)*

¿Cuanto tiempo creeis que a pasado desde el incidente de Akira? Pues nada más y nada menos que 5 cinco años ya.

Por alguna razon, que Hikari y los demas aun desconocen, Sayumi lo habia confesado todo,y cuando digo todo es todo. El perverso plan que habian maquinado los abuelos de Akira junto a Sayumi, hizo que la familia Kobayashi tubiera un gran discusion con los representantes de dicha familia. Desde ese dia no se ha vuelto a ver a ninguno de ellos tres.

¿Porque confesaria Sayumi todo?¿Se sentiria arrepentida por el mal que causo?¿Fue obligada por alguna fuerza misteriosa a hacerlo? Esa pregunta quedara en el aire por el resto de nuestros tiempos, pero lo que es importante es el suceso que esta apunto de ocurrir. Un cambio radical en la vida de nuestros protagonistas.

Era un dia soleado de primavera, un martes para ser mas exactos, cuando Akira entraba en las oficinas de su padre. 

-Sientate.- ordeno su padre indicandole una de las sillas que había cerca del escritorio.Akira no dijo nada simplemente se acomodo en la silla y espero a lo que venia. Su padre saco de uno de los cajones una pequeña montaña de papeles, y se la dejo a Akira justo en las narices.

-Ten-dijo ofreciendole, la pluma que llevaba en el bolsillo de su camisa. Akira la cojio y su vista paso a todos aquellos papeles. 

Ellos ya habian hablado de eso. Akira ya era mayor, asi que habia llegado el momento de que le sustituyese en el cargo de presidente de la empresa.

-¿Enserio tengo que hacerlo?- se quejo Akira mientras dejaba la pluma a un lado del escritorio.

-Ya emos hablado de esto, y cuanto antes firmes mejor.-le contesto su padre devolviendole la pluma. Akira la cojio con desgana y alfinal tras resoplar un par de veces acabo firmano aquellos papeles. Acabo de firmar cada uno de los lugares marcados, su padre le extendio la mano.

-Bienvenido, señor presidente.

-Papa, dejate de bromas-le dijo aceptando el gesto.

Tras acabar la reunion con su padre, bajo al garaje y se monto en su deportivo negro, y condujo hasta una mansion en uno de los barrios más ricos de la ciudad. En la puerta de entrada, tubo que bajar de su coche para poder llamar al timbre.

-¿Quien es?-se escucho a traves del interfono.

-Soy Akira Kobayashi, venia a ver a la señorita Shiraoka.

-Claro, claro pase. La señorita le esta esperando.- dicho eso la verja empezo a abrirse, dandole al fin paso.

Aparco justo delante  de la puerta, solo estaria allí  unos minutos, asi que no se molestó en guardarlo  en el garaje.

Entro por la puerta principal, y se dirijio  hacia un despacho  que se encontraba al fondo del pasillo que estaba a su izquierda, como le habían dicho una de las sirvientas cuando lo vio entrar.

Llamo a la puerta, por educación  más que nada.Del interior del despacho se escuchó  "un adelante", que le permitió a Akira entrar.

-¡Akira!- dijo al verle, Hikari como siempre tan alegre. Se avalnzo sobre él, dandole un caluroso abrazo, que Akira recibio encantado. 

-Siento molestarte, porque seguro que estaras ocupada.

-Para nada, si necesitaba un descanso.- Hikari ahora se encontraba haciendo una carrera de periodismo y estaba en sus ultimos examenes, para conseguir el titulo.-¿Que era eso tan urgente, de lo que me querias hablar? 

-Verás, ...- hizo una leve pausa nervioso- ¿te acuerdas de que hoy habiamos dicho de ir a cenar?

-Claro que me acuerdo- le respondió sonriente, y aun seguida abrazada a él.