ĮȵȶɍƟɖưƈƈĮȬȵ

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–Jimin, ¿me estás escuchando? –se quejó Bangchan, haciendo un puchero. Jimin, efectivamente, había dejado de escucharle hace rato, distraido con la música de la televisón del bar

–Lo siento –se disculpó Jimin, mirando al suelo. Banchan suspiró, pero prosigió.

–Decía que Isu está portándose como un capullo, y alguien debería cantarle las cuarenta. Le he dicho varias veces que deje de contestar así a sus compañeros pero... ¡Jimin, lo estás haciendo otra vez! –Esta vez, Jimin ni se molestó en contestar. Un hombre acababa de entrar en el local. Apestaba a alfa por los cuatro costados. No hacía falta poder percibir feromonas para notarlo. Era alto, con la mirada seria y el pelo peinado hacia atrás. Iba de negro de pies a cabeza, con americana sobre la camisa, todo elegantemente planchado. La camisa tenía los tres primeros botones desabrochados, pero eso no le daba un toque desaliñado. Sus ojos se cruzaron con los de Jimin, y frunció el ceño. Mantuvo la mirada unos instantes, pero finalmente siguió caminando hacía la mesa donde le esperaban otros hombres con su misma aura de alfa. Jimin se estremeció.

–¡Jimin! –le volvió a llamar Bangchan –. ¡Ya ha pasado la hora de irnos y ni siquiera te he contado lo de Isu!

–Cuéntamelo de camino –sugirió Jimin, empezando a levantarse. Bangchan le imitó, poniéndose la chaqueta y empezando a parlotear de nuevo. Antes del salir del café, los ojos de aquel hombre y los de Jimin se volvieron a cruzar. Un escalofrío recorió a Jimin. ¿Era porque era un alfa o porque era simplemente aterrador? Jimin desvió la mirada y cerró la puerta detrás de él, siguiendo a Bangchan.




<수싀>

This is mafia, sweetheart [Jimin x Namjoon] (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora