Capítulo: 14 "Representante"

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Jiang Cheng voló en su espada hasta llegar a Lotus Pier, su antiguo hogar, al ver las construcciones y el paisaje inolvidable del clan Jiang no pudo evitar sonreír con cierto toque de tristeza al recordar todos esos momentos que creció allí y sobre todo a su familia, su madre, su padre y hermana, todos ellos que perdieron la vida en la Segunda Gran Guerra de Cultivación.

Ya que ninguna guerra sobrepasaría a la Primer Gran Guerra, donde los mismísimos dioses descendieron del cielo y los demonios ascendieron del infierno, enfrentándose mutuamente en el mundo mortal, donde las bestias y humanos intervinieron, los cuerpos de bestias, humanos, dioses y demonios cubrieron la tierra, volviéndola infértil y los ríos y mares se tiñeron de sangre, trayendo sequías y hambrunas a los mortales, los más afectados por la guerra.

Jiang Cheng había estudiado con detenimiento la historia del mundo de la cultivación, del como el ser humano logro desarrollar el cultivo, la fuerza y el poder.

Todo fue gracias a que varios clanes y sectas ayudaron a los dioses y estos en agradecimiento les obsequiaron núcleos dorados, con el cual podrían desarrollar el cultivo interno y llegar a convertirse en inmortales.

En cambio, solo un clan decidió aliarse con los demonios; el cual también le otorgaron un poder y un núcleo dorado. El nombre del clan nunca se supo, pero dicen que fue destruido por las bestias divinas, mandadas por los mismos demonios, ya que un demonio es traicionero y vil por naturaleza, nunca se debe confiar en ellos y mucho menos ayudarlos, ya que ellos no tienen corazón ni alma, cuando ya no le sean útiles los asesinarán por la espalda.

El doncel camino hasta llegar a la mansión Jiang, la cual estaba en el centro, donde supervisa todo a su alrededor.

Los habitantes lo saludaron y agradecieron su buen manejo y control de su liderazgo, pues procuraba que todo fuera justo, honesto y a tiempo, no permitiría que su gente cayera en la pobreza o hubiera hambruna, por lo que el comercio y la pesca era lo primordial de sus actividades económicas.

El joven doncel había pasado casi un año que no supervisaba personalmente su secta, dejando un representante que le informaba hasta la mínima cosa que ocurriera, mandándole cada semana un informe detallado.

Su camino fue ameno, tranquilo, pues quería ver por sus propios ojos lo que le había escrito el joven Ling Chen, un hombre de cuarenta y tantos años, de un carácter amable y agradable, siempre con una sonrisa en sus labios.

Por lo que todos lo aceptaron como el represente del líder de la secta, además el doncel convivió mucho con él en la Segunda Gran Guerra de Cultivación, pues él era su mano derecha con el asunto de la secta YumengJiang.

Al llegar a la mansión, llegó corriendo un joven señor de traje morado con lila, su cuerpo bien torneado, de hombros anchos y vientre plano, de piernas firmes y musculosas, de brazos duros y amasados.

Al ver al líder de la secta con su porte elegante y demandante no pudo evitar sonrojarse, pues, aunque ya estaba grande, su belleza permanecía fija, como si el tiempo no hubiera pasado en él.

-Líder Jiang. ¿Por qué no me dijo que vendría? hubiera ordenado que prepararan una buena cena digna de usted. – Comentó el hombre mientras hacía un saludo formal.

-Quería que fuese sorpresa y no importa, de todas formas, este es mi hogar, no es necesario ser tan formal.

-Entonces, por favor acompáñeme a tomar una taza de té, está caliente. – El doncel saludo de igual manera y asintió a la invitación, luego ambos se fueron a conversar sobre el informe de estas dos semanas.

Ambos se fueron, caminando por los pasillos, atravesando el jardín interno, donde había puentes atravesando un pequeño estanque, había flores de lotos y varios peces de distintos tamaños y tonalidades.

Un doncel que portaba una túnica ligera de color blanco con distintivos púrpuras, su largo cabello suelto con una mini trenza al lado, a su lado izquierdo lo acompañaba un hombre con una túnica morada con listones y botas de color lilas.

Ambos eran amigos, pues desde muy jóvenes se conocían, incluso Wei Ying lo consideraba como alguien cercano, incluso Ling Chen se ofreció para compartirle de su energía yang cuando fuera necesario.

Sin duda, ese joven era alguien a quien apreciaban y consideraban como un fiel amigo, lástima que su carácter amable y gentil, también tenía su lado depresivo y tímido, ya que a veces prefería aislarse y estar solo, rechazando sus citas de juegos, por lo que el sentimiento de amistad a veces se tambaleaba en la cuerda floja, pero los momentos que estaban juntos era memorables y recordables.

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elvis- Sempai 

El doncel del amor y la cultivación 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora