Durmiendo

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CAPÍTULO 19

DURMIENDO

-"Tu amor es un trampa, una trampa maldita, una trampa que ya se me olvidó la canción" ¡Despiértate!-

Siento que alguien me mueve para que me despierte. Medio dormido abro los ojos y veo que es mi Becky la que me despierta.

-Buenos días dormilón- me dice y me da un beso en la mejilla.

-Buenos días- digo con mi cara en las almohadas

-Córrete que me quiero acostar contigo- me levanto de golpe y levanto una ceja en sorpresa de lo que me dijo.

-No acostarse de esa manera niño loco, si no acostarse en serio-

-¿Y quién se acuesta de mentira?- le digo mientras me corro y levanto la cobija para que Becky entre a la cama.

Se acuesta en mi pecho y empiezo a acariciarle el pelo y a darle besitos, no puedo evitar olerlo profundamente, huele a limpio... a Shampoo

-¿Qué shampoo usas?- le pregunto medio dormido otra vez.

-Sedal, liso perfecto, el secreto de mi sedosidad-

Me rio un poco, me estoy durmiendo otra vez, no entiendo porque el mundo se empeña en despertarme temprano.

-¿Qué vamos a hacer hoy?- me pregunta

-Dormir...-

-Nah, hoy no tengo nada que hacer, no he empezado clases, no tengo turno en el hotel, Antonio salió con alguien, además es sábado.-

-Es cierto, es sábado, los sábados se hicieron para dormir hasta tarde. ¿Por qué me despiertas tan temprano?-

Becky se levanta y me queda viendo.

-Jorge, ¡son las doce!-

-Las doce de la noche, no me puedes hacer esto.-

-Las doce del mediodía.- Se acuesta a mi lado y nos quedamos viendo frente a frente. -¡Quiero hacer algo!-

-¡Durmamos! Eso es lo que podemos hacer. O mejor, yo duermo y tú te conviertes en peluche.-

La abrazo muy fuerte, como si en verdad fuera mi peluche, Becky empieza a reír y a gritar al mismo tiempo.

-¡AAhh! ¡Me estas estrujando toda!-

La dejo de abrazar y la beso en los labios.

-Ya sé que podemos hacer-

-¿El qué?-

-Es sorpresa. A las cinco me despiertas para que vayamos- la suelto y ella se levanta de la cama, yo me doy la vuelta enrollándome en la cobija.

-Jorge, no quiero dormir ¿En serio vas a dormir?-

-Pues... sí-

-Ah, está bueno. Entonces yo voy a estar con Fernando todo el rato en que estés durmiendo.-

Ja... ya sé lo quiere hacer, darme celos. Pero yo no soy celoso.

-Está bueno... ve a que te haga compañía-

La oigo chupar los dientes y salir del cuarto. Me acomodo un poco más en mi cama y duermo un rato más.

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-¡Despiértate!-

Siento un almohadazo que me da en la cabeza.

-¡Qué! ¿Ya son las cinco?-

El Regreso de Jorge BlancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora