"Una Serie De Eventos Desafortunados"

Seven

La injusta vida que un niño o niña puede tener es algo que jamás complacerá a la vista. Sin más que decir, Lillian la genuina Katherine Weasley a pasado por muchas cosas, la perdida de su familia entera es algo que ni ella puede explicarse.

Los Baudelaire, aún que no se lo puedan explicar, están buscando una explicación.

Buenas y malas personas son las que podemos encontrar en esta vida, tu puedes ser buena o mala para alguien. Jamás lo sabrás desde tu punto de vista.

Pero aquí había alguien que si sabía lo que quería representar en todas las personas, Olaf.

Este carismático e ingenuo personaje es alguien que debemos admirar por su desempeño en no poder hacer las cosas bien. Claro que tampoco uno se imagina los vuelcos que la vida te hará atravesar.

Regresando a nuestro punto de partida anterior, Katherine Weasley aleas "Lillian" se encontraba sollozando mientras leía las páginas de un libro que contaba una desafortunada historia, lo lamentable es que era la suya.

- Que haces aquí?- dijo Klaus al notar que la joven estaba a su lado sentada en el piso-

- Amm yo lo...- sus palabras no salían, sin embargo se limpio las mejillas y sonrió- lo siento, no te quería despertar. Que horrendo libro tienes ahí- río por lo bajo

- Son solo Noticias Locales- tomo el libro mientras se levantaba y colocaba con delicadeza las gafas en su rostro- pero eso a ti que... ¿Que haces aquí?- su rostro paso de una mueca a una seriedad sombría

- Yo solo...- ahora ella en vez de una sonrisa su boca esbozaba una mueca

- ¿Vienes a burlarte de mi "grandiosa" habitación?

- No, yo solo estaba buscando a Violet y... Ahhh no tengo porque darte explicaciones-

- Y no tienes porque estar aquí, por favor vete no quiero verte-

- Está también es mi casa Klaus-

- Pero este es mi dormitorio- se acercó a la puerta y la abrio- te agradecería que te retiraras

- es ahora o nunca- pensó la joven- Klaus Baudelaire ¿Cuál es tu problema conmigo?- alcé un poco la voz

- Ninguno, solo vete- dijo señalando la puerta

- Y si no quiero ¿Que?- se acercó a él y cerró la puerta de un azoton

- Entonces yo me iré- trato de abrir la puerta pero ella lo detuvo

- No- se recargo en Esta- hasta que me digas porque crees que soy igual que el

- Eres su hija- ahora levanto la voz el

- No de sangre, ya lo había explicado-

- Si pero llevas tiempo viviendo con el, ¿No creerías tu alguien como el no estaría de alguien pues... Igual a él?

- No, primero conocería a la persona-

- Ya lo conocí

- No me refiero a el, Klaus creí que eras del tipo que aplicaban lo de "No juzgues a un libro por su portada",creí que eras diferente- hagacho la mirada

- Lo soy pero ¿Cómo es posible que a ti te trate bien y a nosotros como basura? Olaf solo quiere la fortuna Baudelaire, no le importamos ni yo ni mis hermanas. Preferiría vivir en la miseria y en la calle-

- ¿Y a dónde iriás? Son solo niños, Olaf dijo que ustedes estaban aquí por un favor a sus padres-

- Pues estoy seguro de que ni a mamá ni a papá les hubiese gustado que viviéramos en un lugar como este- se cruzó de brazos