Narra Lillian:
Desperté escuchando un alboroto afuera. Giré mi cabeza al reloj y Vi la hora, eran las 11. Dios tan tarde ya es y yo tengo que terminar cosas de el vestuario.
El alboroto seguía afuera así que me puse zapatos, un suéter y salí.
- Ay los niños Baudelaire ya saben mi plan- dijo Olaf
- Lastima- dijo una de las gemelas
-¿Ahora que haremos?- dijo Tom, otro compañero de Olaf
- Supongo que iremos a la carcel- dijo Fernan
- ¿De que están hablando?- pregunté yo asomandome al barandal
Cuando Violet y Klaus me vieron subieron rápido las escaleras.
- Lillian no podrás creer lo que está pasando el Conde Olaf quiere...- comenzo a hablar Klaus pero Olaf lo interrumpió
-Quiere que entres a tu habitación ahora- dijo serio
- ¿Que? No hasta que me digan que pasa.
- El quiere casarse con Violet de verdad, no es una obra.
- ¿Que?
- Es verdad Lillian debes creernos-
- Lastimosamente creo que eso no sucedera- dijo Olaf
- No entiendo nada como que se quiere casar contigo, tu... Tu eres solo una niña.
- Es por la fortuna Baudelaire- concluyó Klaus
- Pero tu, ¿Serías capaz de casarte con una niña?
- Y no solo eso, también encontré esto- dijo Klaus sacando un cuaderno- El te quería secuestrar, no te salvó como me contaste, Katherine- me extendió la libreta.
Hoja tras hoja que leía, cada vez mi corazón más se rompía. El tipo al cual llame padre por su supuesta "ayuda". El quería secuestrarme y pedir mi fortuna a cambio de mi rescate.
-No, oye... Me conoces bien y sabes que no, ellos son unos mentirosos.- me sonrio- Esa libreta no es mía, tu... Katherine tu eres mi hija-
-No, no lo soy. Y puede que esté contigo desde hace ya un año pero conozco a los Baudelaire y ellos no dicen mentiras- lo mire con asco y le lance la libreta- me arrepiento de haberte llamado padre, porque viví en una mentira.
- ¿Cómo puedes estar tan segura de eso? ¿Cómo puedes estar segura de que yo te haría algo así?- me tomo de las manos- tu eres mi hija
-¡Que no lo soy! Y estoy más que segura por qué ellos son mis amigos, los tres.- los mire y les sonreí-
- Vaya, vaya, vaya, vaya... No creí que me fueras a traicionar de esta manera-
- ¿Traición?, ¿Cómo te podría traicionar? Yo no estaba enterada de nada, y aparte tu me querías muerta.- lo mire con asco y lágrimas me salieron- nunca serás y nunca has Sido mi padre, jamás podrías serlo, no estás si quiera a la altura de mi padre real.
- Por eso lo mate- me dió la espalda
- ¿Que?
- ¿Ustedes creen que llegaron a mi porque si?- soltó una risa corta- ¿Creen que el incendio en sus casas fue por accidente?
- Tu lo causaste-
- Claro que fui yo, si no quien más. Fue fácil, con los Weasley. Tu madre no sabía que estabas fuera de casa y murió buscándote en todo el lugar. Luego tu padre escucho que una dulce niña tonta le dijo "papi ¿que pasa?"- dijo imitando una voz femenina- Y el techo se le vino encima. Tu hermano, murió junto a el. Oh al menos eso creía hasta que me dijiste que Travis sigue vivo.-
- No lo vas a encontrar-
- ¿Eso crees? A ti te pude encontrar, y crees que a él no.
- Ya me tienes a mi, tienes la fortuna Weasley. Deja ir a los Baudelaire y deja en paz a mi hermano.-
- Sería un buen trato, pero no. Alguien una vez me enseñó que dos son mejor que uno. Así que tendré ambas fortunas casandome con Violet, y teniéndote a ti
- Si es por eso cásate conmigo y déjalos en paz a ellos. Ellos no te han hecho nada.
- Ellos...- Klaus lo interrumpió-
- ¿Porque causaste el incendio en nuestra casa?
- Ouh ustedes también quieren saber eso- se rió y los demás de su grupito también- con ustedes fue más difícil y fácil a la vez. Sus padres ya lo esperaban asi que decidieron arriesgar sus vidas y ellos se quedaron, ustedes salieron y obvio yo me enteré y lo arregle todo para que llegaran a mi.
- No te pudiste ni siquiera tentar el corazón por unos pobres niños...-
- Niños mimados, ricos, con una enorme fortuna con una vida triste por venir.
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"Una Serie De Eventos Desafortunados"
ФанфикDonde el Conde Olaf ya tenía una "hija". Katherine Weasley una niña de tan solo 12 años o más que perdió a sus padres y hermano en un terrible incendio. (Más sobre ella en el capítulo uno) Un día llegan a su nuevo hogar los huérfanos Baudelaire que...