MI QUERIDO DIARIO

CAPÍTULO 26

Mi madre me ha ido a ver al Bufete, me exige ver a mis hijos y le dije tajante que no, además tiene prohibido acercarse a mí, todo lo de la boda que ella hizo, nunca contemplo mis deseos y los de Ana, por ello no quiero que conviva conmigo y mi familia, sé que no es por eso solamente, pero no puedo hablar a los cuatro vientos el porqué, aun no me entregan los resultados de la necropsia a Leila, mi padre me comentó sobre el supuesto secuestro de mi hermana, eso es un delito que deberá pagar mi madre, mi hermana no quiso participar en que los secuestrados fueran mis hijos, sé que mi madre tiene el trastorno bipolar, antes sé que se llamaba depresión maníaca, su estado mental tiene cambios extremos en su estado de ánimo, sobre todo cuando deja de administrar sus medicamentos, mi padre aun así la ama, pero lo que ha hecho últimamente es demasiado extremoso.

Estoy con mi padre hablando de ese tema y el de Leila, cuando Taylor me saca de la plática con mi padre, le he dicho que si no es algo sumamente urgente no me interrumpa, por lo que pensé primero en Ana y mis hijos,  Ana y Sawyer  han observado cuando van rumbo a Montesano, que un auto rojo los persigue Taylor me proporciona la matrícula,  tengo apoyo de la policía desde el secuestro de Mía, le llamé al sargento Flinn, es uno de los mejores investigadores de personas desaparecidas e investigaciones.

Le día el dato y en unas cuantas horas nos comunicó que ya tenían identificado el vehículo y el usuario, por lo que de inmediato llamé a mi esposa y le dije que no se preocupara, ya estaba investigado y la policía de Seattle y Montesano estarán al pendiente de ese vehículo. El detective Flinn me llamó muy preocupado, mi padre estaba oyendo el informe de la persona que sigue a Ana, nos íbamos de espaldas al saber, que mi madre le pagó a ese fulano para secuestrar a mi esposa.

En cuanto llegó mi esposa a la casa, la puse al tanto de lo que ocurría, pero que no se preocupara, ya todo estaba bajo control, además ya con esto debo de enseñarle a Ana la carta que me dejó Leila después de casarnos, así ella entenderá realmente porque no quiero convivir con mi familia, ya que ella, los niños junto con mis hermanos y padre, son mi verdadera familia.

Para empezar, le conté como fue que me hice novio de Leila, era un arreglo matrimonial entre los Williams y los Grey, sin embargo le confesé a mi esposa que  los padres de Leila  después de firmar el acuerdo, Leila empezó a enfermar, desde que la conocí era una mujer muy sana, si moría Leila, ellos pensaban que se quedarían con todo sin pagar ningún dólar, porque se hizo un acuerdo matrimonial, se abrió una investigación por parte de mi padre, ya que decía que no era normal.

El detective confirmó el envenamiento de Leila, pensábamos que los culpables eran sus propios padres, pero las investigaciones arrojan que fue mi madre, en el celular de Leila, venían pocos vídeos donde mi madre suministraba gotas a la comida de Leila. Al confirmar que mi madre fue la asesina de Leila, mi padre dispensó la deuda de los Williams y les regresó sus propiedades, no devolvería la vida a Leila, pero se compensará no queden en una ruina total.

También fui sincero con Ana, llegué a querer mucho a Leila, el amor que siento por Ana, no se compara con lo que sentía por Leila, igual ya estaba acostumbrado a su presencia y al acuerdo, pero el destino me pasó una jugada, descubrir a la mujer que me quitaría el sueño, la que me hace sentir vivo y que ahora es mi mujer. Por ello, le mostré a Ana la carta de Leila que me escribió el mismo día de la boda, porque ahí dice que cumplió su sueño de casarnos, pero también me da ánimos de buscar a Ana, me echa en cara que fui un patán con mi ahora esposa, por todo lo que le dije en el hospital, la carta dice así:

Querido esposo Christian Grey:

Cuando leas esta carta es porque ya estaré muerta, me cumpliste el sueño de la poca vida que me quedaba, yo sabía que iba a morir de todos modos, pude descubrir quién me estuvo administrando veneno en mis comidas, en mi celular están las pruebas, hice un gran sacrificio para poder llegar hasta el altar contigo, también quiero que sepas que estaba enterada de tu romance con esa chica del hospital, yo podía levantarme de la cama con ayuda de una enfermera, cuando pensaba que tú y tu familia no estaban en la habitación, o se habían marchado, la enfermera que me cuidaba me levantaba y me sentaba en una silla de ruedas, salíamos a dar un paseo por el hospital, por eso pude darme cuenta de tu romance con esa chica, estabas tan absorto con su belleza, que no podías ver más allá de sus ojos, de toda ella, pude comprobar que estabas conmigo por compromiso, vi el gran amor que le tenías, lo único que no me agradó de ti fue que le faltaras el respeto, al decirle que no tenías ninguna relación, mujeres como ella las encontrabas en cualquier hospital, la enfermera te oyó decirle toda esa bajeza, ¿Sabes? me decepcionaste como hombre, ella te ama y te dio felicidad que yo ya no podía darte, pensaba terminar con lo nuestro, a pesar de que la humillaste cuando salí del hospital.

Mientras estaban los preparativos de nuestra boda, pude saber quién era esa chica, mi chofer la siguió, supe por todo el dolor que estaba pasando, ella si sufría por ti, yo no, porque sabía que me iría, pero ella se quedaba destrozada, te dio mucho a cambio de nada Christian, lo único bueno que pudiste hacer, fue invertir en esa casa tan hermosa que yo no disfrutaría, oí cuando le dijiste al cristo del hospital que si me moría, te casarías con ella porque la amabas más de lo que llegaste amarme a mí, que esa casa la compraste pensando en ella, pensabas que no saldría viva del hospital y no nos casaríamos, yo llegué primero que ella, la bajeza que hiciste con esa chica del hospital es imperdonable, es muy probable que no la encuentres nunca más, por lo que te voy a pedir un gran favor de una esposa moribunda, si algún día piensas casarte, nunca lo hagas en casa de tus padres, como nos casamos nosotros, no lo digo por tus hermanos y padre, pero vives con el enemigo en casa, hay muchos recuerdos de nosotros, si te llegas a casar ahí, te maldeciré para toda tu vida, ese será tu castigo por engañarnos a las dos, me enteré que te desististe de todos mis recuerdos por ella, porque la dejaste ir por cobarde, sé que la amas, después de que haya muerto, búscala y pídele perdón si es que te perdona, has ese sacrificio por el amor que le tienes, veo en tus ojos la felicidad solo con ella, espero en verdad que te pueda perdonar, porque si no lo hace, llorarás lágrimas de sangre, si te vas a casar con alguien, nunca permitas que tu madre intervengan en los preparativos de tu boda, ¿sabes porque? Porque nunca te piden parecer, ella hizo todo para que nuestra boda fuera todo lo contrario a lo que teníamos pensado, el vestido que escogí, nunca llegó a la habitación y me impusieron el que utilicé, el maquillaje era muy subido de tono para mí, tu sabías que no utilizo mucho maquillaje, desafortunadamente también el banquete no era de mi elección y mucho menos el tuyo, ella sabía que era alérgica a las aceitunas y al pescado, pero yo solo fui un maniquí a su merced, pero si tú quieres una boda a su medida, solo déjala actuar a su manera.

Espero de corazón, encuentres a esa chica del hospital y el día que la encuentres, se hombre y pídele perdón, cuídala y respétala, te deseo que seas feliz, aléjala de tu madre, cada uno escoge su destino, me despido diciéndote que te amaré hasta mi último suspiro.

ATENTAMENTE

LEILA GREY