R E D // Matthew Gray Gubler ✔

RUN (FINAL)

Capítulo veinte: I could see this view a hundred times (Final)

Pasé los últimos meses, al igual que cuando era pequeña, preguntándome si el amor verdadero existía. Después de tantos tropiezos, negaciones y confusiones, Matthew y yo por fin pudimos darnos una nueva oportunidad de ser amados.

Tenía más de lo que podía pedir. Unos amigos leales, una nueva amiga honesta, mis padres apoyándome en todo momento, el amar y conocer a la Jade Armstrong, y un hombre maravilloso que casualmente estaba enamorado de mí.

Pasaron varios meses desde que él y yo nos hicimos novios, y fueron los mejores de mi vida. No lo voy a negar, hubo días o semanas en las que no nos veíamos por culpa de nuestro trabajo, o porque queríamos visitar a nuestros padres, incluso salir con nuestros amigos. Lo bueno de esto era que ninguno haría drama por esto y entenderíamos al otro.

Un sábado decidimos hacer una pequeña cena en mi casa, terminamos todos sucios y la comida casi se nos quema, pero aun así disfrutamos de nuestra noche.

Al terminar la cena, puse algo de música y nos quedamos abrazados mientras cada canción sonaba. Me encontraba relajada escuchando los latidos del corazón del Matthew y esas hermosas melodías que salían de la computadora.

De pronto, se me ocurrió una pregunta.

-Si una canción describiera nuestra historia, ¿cuál crees que sería?

Él dio un beso en mi frente, luego soltó un suspiro.

-Deja pienso un poco.

Volvimos a quedarnos en silencio. Era increíble estar con alguien y poder disfrutar hasta de los silencios, o si se llenaban con conversaciones, estas serían las mejores aunque se trataran de algo bobo a los ojos de los demás.

-Esta es la canción -dijo de pronto-. La que esta sonando en tu computadora.

Miré el nombre de la canción, y no pude estar más de acuerdo con él.

Minutos más tarde, decidimos salir un poco a la azotea, disfrutando de ver las luces de la cuidad y recordando aquella vez que estuvimos ahí, pensando que aquel día habría quedado perfecto como una cita, solo que ninguno tuvo las agallas para decírselo al otro.

Abrace más fuerte a mi novio, esperando que lo nuestro no se tratara de un sueño más y no queriendo ir a otro lugar.

Y, si él se fuera a otra parte, ahí estaría yo a su lado. Amándolo con todo mi corazón.

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