Un amor a prueba de todo - Germangie (2)

CAPÍTULO 20

CAPÍTULO 20.
*Clara*
Son unos bebitos hermosos. Espero poder jugar con Julieta como si fuese mi muñequita y poder jugar con ella, es muy mona, tiene los ojos de mami y la sonrisa de papi. Pablo tiene los ojos marrones de papi y es rubito como mami y como yo. A mami se le veía muy feliz, nos estaba mirando a todos con mucho amor. La verdad es que son unos niños preciosos. Papi vino a mi lado, dejó a Julieta con Vilu y me cogió en brazos.
G- Clari, necesitaremos mucha ayuda con los bebitos, espero que nos ayudes mucho, ya que Vilu sale mas con sus amigos y tu... Tu... No se lo digas a nadie pero tu eres mi favorita- me dió un beso en la cabeza-.
C- Vale papi, te ayudaré- me bajé de sus brazos y fui a ver a Vilu con los bebés-.

*German*
Clari se bajó y fue con Vilu y con los pequeños. Me fui al lado de Angie, la pobre debe estar muy cansada por el parto, creo que necesita paz y tranquilidad.
G- Mi amor como estas? - me senté a su lado y le cogí de la mano-.
A- Perfecto, mira a nuestros bebitos, nada me hace mas feliz que estar con vosotros- dijo mirando a los niños-.
G- Sabes, creo que vamos a ser una familia preciosa, Vilu, Clari, los mellizos, mi princesa y yo - dije dándole un beso-.
Definitivamente no sé que tiene esta mujer para que me deje totalmente enamorado, no se que hace para tenerme hipnotizado.

*Angie*
Llegó la hora de que el resto viniera a ver los bebés. Cuando entraron y vieron a dos bebés se enternecieron de repente.
P- Son hermosos.
O- Mis chiquitines.
B- Son igualitos a vosotros.
R- Hola hermosuras.
Se pusieron todos a agobiar a los bebitos hasta que se oyó un llanto. Awww, normal que lloren, si los estan atosigando. Pablo me pasó a Pablito y intenté calmarlo meciendolo en mis brazos. Decidieron irse todos, me quedé sola con German y los mellizos.
Empecé a cantarles una nana y los dos se quedaron completamente dormidos.
G- Eres una gran madre, lo sabias no? - dijo mientras se tumbaba a mi lado con Julieta en brazos y yo a Pablito-.
Los pusimos a sus camitas y nosotros nos quedamos en la cama. Noté como los brazos de él me rodeaban por la espalda y me empujaban contra él. Me giré y me quedé mirandolo a los ojos.
G- Es hora de dormir mi amor, descansa, yo me quedaré a tu lado toda la noche, te amo- me dió un tierno beso en la cabeza-.
Le rodeé con los brazos por la espalda y me acurruqué en él.