El Hermano de mi Novia

Presente XI

Despedí a papá y Maya por la noche.

-Duerme bien Hermanito-dijo Selene mientras llegaba a su cuarto. Había sido un día de muchas emociones y aunque debía acostarme a dormir para levantarme temprano al día siguiente no lo hice tome mi billetera y las llaves para salir de casa. No sabía hacia donde iba pero el sonido del ascensor me distraia.

Fui a un bar y empecé a beber recordando cada una de nuestros encuentros.
Recordé el primero de muchos días que amanecimos juntos.
Recordé las veces que calle con tal de tenerlo a mi lado.
Recordé las veces que tuvimos que mentir para que nadie nos descubriera.

Por más que busque en mis memorias y en todos esos recuerdos no podia encontrar una sola vez en la que él halla apoyado mis decisiones. Siempre trato de hacer menos lo que teníamos.

Cuando estábamos solos el decía cosas hermosas. "Te necesito" " Eres mio" "Me encantas" hasta llego a decir "Te amo" pero al salir de ese lugar todo se borraba.
Cuantas veces le hablé de enfrentarnos a todos y decir lo que éramos para que simplemente huyera como siempre.

Nunca va aceptar que es Gay. Como nunca me aceptará de nuevo, pero no lo necesito.

Deje de necesitarlo hace mucho tiempo. Tengo amigos, una carrera y todo los que me conocen Saben que Soy Gay y aún así deciden permanecer a mi lado.
Papá me acepto tal como soy y eso es lo mejor que pudo haber pasado.

-Festejando?- volteo a mi lado y sonrío. Hace un buen tiempo que no lo veo.

-Si, Salud por mi- No quedamos en las mejores condiciones la última vez pero es bueno verlo bien.

-Salud por Ti! Felicidades por tu último libro, yo quise colarme a la firma pero todo estaba agotado-me río y el también lo hace luce nervioso-tenia una boda ese día, Me alegra verte Bien a pesar de todo-

-Soy Gay y todos los que amo lo aceptan, eso es lo mejor que me puede pasar asi que porque no Festejar?-

-Salud!-dice chocando su vaso con el mío. Ambos conversamos sobre nuestras vidas desde el momento en que no volvimos a vernos. Cuando Eliot se fue de la ciudad habíamos tenido una pequeña pelea que terminó distanciandonos hasta ahora.

Eliot es primo de Selene y lo conocí mejor en la Universidad. Ambos compartimos cuartos y aunque primero fue divertido y amable con el tiempo se volvió algo duro. Los rumores de que era gay llegaron a sus oídos y el parecía no sentirse cómodo, lo peor fue cuando descubrió que Roger durmió conmigo cuando el no estaba.

En ese entonces no sabía que él y Selene se estaban viendo fue una pelea horrible en la que nos dijimos un montón de cosas hirientes pero aquí estamos. Bebiendo como si eso nunca hubiese pasado.

-Me alegra saber de ti y que hayas vuelto a la ciudad, y me disculpo por él pasado- automáticamente el niega.

-No te disculpes, me harás sentir peor de lo que me sentí en ese momento-la charla se vuelve sería de repente- No me molestó para nada que seas Gay o que te acostaras con alguien cuando yo no estaba, Estaba molesto por que Fuera él! Toda la familia hablaba de lo perfecto que era el novio de Selene que no se ponían a pensar en la diferencia de edad o que su familia es... Joder ese Imbécil se acostó con Selene y luego fue a buscarte y tu lo amabas- Mierda! 

-Por favor para-

- No! Me enviaron lejos y tuve que callar todo este tiempo pero no mas! Ese tipo estaba enfermo, es la misma mierda que su padre y estoy contento de que por fin Selene y tu se dieran cuenta-

-Gracias, sólo necesitaba que alguien más me lo dijera- empiezo a llorar y el me abraza. Cuando Eliot se fue llego Ash y conocí lo que en verdad era una historia de Amor.

Dos personas que se separaban por la circunstancias, familiares, trabajo o dinero pero aún así, en la distancia ellos respetaban su amor y esperaban con ansias la próxima oportunidad.

Tenía que dejar de esperar por él. Habían mas personas en el mundo y yo merecía amor de verdad, merecia que alguien estuviera orgulloso de mi.

No se si lo hizo por pena o por que estábamos ebrios pero fue tan rápido que no pude apartarme. Nos besamos con fuerza como si sólo nos quedará esa noche y lo continuamos hasta llegar a un hotel.

Habían pasado años sin hacerlo con otra persona y aunque no estaba en completo control no me importó. Quería llegar hasta el fin y darme cuenta que no todo debía ser como él quería.