16.

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Días después de la integración de Eren Jaeger a las tropas de la Legión de Reconocimiento, se anunció la fecha exacta de la próxima expedición extramuros.

Tenían solo un mes para estudiar al titán cambiante, y preparar todo lo que se necesitaría en base de la información que obtendrían de él.

Era un tiempo muy corto para llevar a cabo una expedición, e incluso los nuevos reclutas tendrían que participar. Pero Erwin no parecía preocupado por ello, e Irene sabía que eso no era una casualidad.

— ¿Tienes algo que decir? — habló el comandante, rompiendo el silencio instalado en su oficina.

Pero ella lo ignoró y continuó leyendo el informe que había recibido sobre la investigación de los dos titanes que habían capturado a petición de Hanji Zoë.

— Estás más callada de lo usual. — pronunció el rubio de ojos azules, dejando de hacer trazos en el plano de su nueva formación, para oír atentamente su respuesta.

— Si hago mi pregunta... — dijo la capitana sin levantar la mirada de los papeles que sostenía en sus manos. — ¿Vas a responderme?

Erwin sonrió levemente, pensando que ella era extrañamente intuitiva.

— Te lo diré a su debido tiempo. — le respondió con serenidad, y volvió a concentrarse en lo que estaba haciendo anteriormente.

— Sabía que dirías algo como eso. — musitó Irene soltando un largo suspiro de resignación.

— Ten paciencia. — le dijo, pero, en lugar de apaciguar su curiosidad, lo que logró fue confirmar sus sospechas de que algo estaba sucediendo entre las sombras.  

— En fin. — pronunció la capitana Vermilion mientras ordenaba los documentos, que sostenía en sus manos, para terminar de leerlos en otro momento. — Hanji irá a ver a Eren esta noche, me pidió que te lo dijera.

— Bien. — dijo el comandante, sin despegar la vista del plano que estaba sobre su escritorio de madera.

— Eso es todo. — le informó Irene antes de levantarse de su asiento para retirarse.

Sin embargo, antes de abrir la puerta para irse, Erwin la detuvo.

— Espera.

Ella giró a verlo, esperando lo que iba a decir.

— ¿Que hay sobre los dos titanes que capturaron?

— Ningún dato nuevo. — le contestó con desánimo.

— Ya veo. — susurró pensativo, mientras golpeaba suavemente el lápiz contra el escritorio. — Entonces ve con Hanji, y presenta un informe sobre el avance de la investigación de Eren Jaeger cuando regreses. — ordenó el comandante al tener una solución.

— Entendido. — respondió Irene sin titubear, porque comprendía que hacerlas trabajar juntas era  beneficioso. Ya que Hanji se encargaba de los detalles científicos, e Irene era la responsable de observar y analizar el comportamiento de Eren Jaeger ante los experimentos.

En otras palabras, eran ellas quienes tendrían que determinar si el joven Jaeger era apto para la misión, tanto física como mentalmente; y en caso que no lo estuviese, eran responsables de entrenarlo y prepararlo para el peor escenario.

— Irene. — la llamó el comandante antes de que ella se marchara. — Una última cosa.

— ¿Qué? Dilo de una vez. — pronunció con el ceño fruncido por el misterio que rodeaba a Erwin. — Solo haces que tenga más curiosidad.

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