- Wendy, tengo que decirte algo.- aviso, parando de golpe.
Ya estaban muy lejos de los demás, y Yeji había decidido decírselo ya. Se puso delante de la chica mayor, que la miraba con curiosidad y un poco de miedo.
- ¿Quieres formar parte de esto?- pregunto insegura.- Quiero decir, la guerra... y eso..
- No, no quiero.- contesto enseguida.- ¿Qué tienes pensado?
- Uf.- dejó salir el aire retenido.- La alarma ha sonado de hace rato, pero de allí no saldrá nadie, porque ellos ahora están a salvo. Ahora tú y yo, iremos con ellos, pero necesito saber si estás de nuestro lado.- dijo con tono inseguro.
- Claro que estoy con vosotros.- asintió.- Llevó días pensando escapar, pero no sabía cómo. Vámonos ya.- dijo agarrando el brazo de la pequeña y corriendo. - Ellos ahora tienen que saber que de allí no saldrá nadie.
Corriendo hacia donde la pequeña Hwang indicó que su hermano y el resto del grupo se había ido, justo en dirección contraria. Tardaron más de medio día en poder rodear la zona para no ser vistas, hasta llegar a Mapo-gu.
La ciudad era un poco oscura para las jóvenes, pero no tenían tiempo para eso, necesitaban encontrar al resto del grupo que se había marchado la noche pasada. Caminaron por la ciudad, hasta llegar a una zona de edificios en mal estado.
- Kam dijo que irían a una zona poco poblada para no ser vistos...- murmuró Yeji.
- Puede que estén por aquí.- respondió Wendy, insegura.
Buscaron varios edificios, pero no encontraban ni rastro de ellos. Entraron en un edificio que parecía ser un antiguo hospital. Algunos de los muebles estaban movidos de forma estratégica, pero se veía que habían sido movidos. Se escuchó como un hombre hablando, casi un murmullo, unas plantas arriba.
Encontraron las escaleras, por las que subieron, cogidas de la mano, hasta llegar al piso 3.
- Mira, vienen del.. comedor principal de la planta.- escucho la pequeña.
Se pusieron delante de la puerta, y la abrieron de golpe.- Bien, ya que estamos todos..- dijo Kam una vez acabaron.- Hablemos de lo que haremos.
- Tengo una duda.- dijo Kibum.- ¿Dónde est-
No pudo acabar la pregunta, puesto que la puerta se abrió de golpe, dejando ver a dos chicas. Wendy y Yeji. Serim no se lo pensó dos veces, y se levantó para ir a abrazar a Wendy, quien le correspondió al abrazo gustosa. Yeji salió de allí, y se fue al lado de su hermano, quien también la abrazó, como si fuera un tierno peluche.
- Me alegro de que estéis de vuelta.- dijo Kam con tono amable.- ¿Yeji, quién es tu amiga?- pregunto curioso.
Hyunjin dejó de abrazar a su hermana un momento para que esta pudiera contestar. Miró a Wendy, quien se había acercado un poco a ella. Dudo por un momento, pero Wendy había sido muy buena con ella.
- Ella es Wendy, me ayudo a salir del bosque y llegar hasta aquí.- contesto con una sonrisa.- También es del laboratorio.
- Oh, bienvenida Wendy.- dijo Kam.
- Se lo que me van a decir.- dijo con una sonrisa.- Vine para ayudaros, porque se que lo que está haciendo la jefa no está bien. Desde que Serim se fue, realmente yo también quería ir con él, pero ella amenaza a nuestras familias. Pero no me importa, solo quiero que esto se acabe.- dijo la chica.
- Me alegra que hayas tomado esa decisión.- dijo Kibum con una sonrisa.- Siéntate, estábamos a punto de hablar de algo importante.
Todos se sentaron en las sillas, para poder escuchar a Kam. El director se aclaró la garganta, y procedió a decirlo.
- Seguiremos aquí por unos días más.- dijo en alto.- Cuando sepamos que dejan de buscarnos, iremos a por ellos.
Todos se quedaron callados.
- ¿Ir a por ellos? En plan, ¿atacarlos?- pregunto Nayeon.
- Así es.- confirmó el director.
- Eso podría ser peligroso.- advirtió Su.
- Ellos estuvieron entrenando por mucho tiempo, y tengo un plan.- informo con seguridad.
- Cuéntanos tu brillante plan.- dijo Hongjoong no muy seguro, quería proteger a sus amigos.
- Bien.- empezó a decir.- Mandaremos a seis de los nuestros para que vayan a matar a Jefa. Se infiltrarán en el laboratorio, y cerrarán todas las puertas desde la sala de máquinas, luego crearán una cuenta atrás para que el laboratorio se autodestruya, y saldrán de allí.- explico con rapidez.- Mañana prepararé el plan entero, con los detalles, pero por el momento eso es todo. Hora de irse a dormir.
Nadie dijo nada, y todos se levantaron de sus asientos para dirigirse a sus habitaciones. Al final, la profesora Su durmió en otra habitación con Yeji y Wendy porque no cabían todas en la misma. Felix y Hyunjin se dirigieron a la que era su habitación, y se sentaron en la cama. Minho y Han también estaban en su cama, pero ya se habían quedado dormidos.
Se estiraron en la cama, con las miradas en el techo.
- ¿Crees que te cojan para la misión?- murmuró Hyunjin.
- Seguramente.- suspiro el peli blanco.
- ¿Ya te encuentras mejor?- pregunto curioso.
- Un poco.- respondio con los ojos cerrados.
No era como las otras noches, solo estaban estirados encima de la cama, mirando al techo. Felix no podía dormir por el dolor que cabeza, que lo estaba matando. Era como si tuviera un taladro al lado y no pudiera concentrarse en otra cosa que no sea ese sonido. Intentaba calmar su menté, pero no podía. Hyunjin notó la intranquilidad del menor, y decidió abrazarse a él, como todas las noches. Pasó sus manos por la cintura del pecoso y lo abrazó con mucho amor, quería protegerlo de cualquier mal.
Felix notó las manos, y como lo abrazaba. Enseguida una sonrisa apareció en sus labios.
- Tranquilo Lixie, yo estoy contigo.- susurro Hyunjin, con una sonrisa.
Felix puso sus manos encima de las de Hyunjin, que agarraban su cintura.
- Extrañaba que hicieras eso.- murmuró alegre.
Hyunjin se aferró a él, y apoyó su mentón en el hombro del pecoso, quedando en cucharita. Hyunjin tranquilizó a Felix, hasta que los dos se quedaron dormidos. Ellos realmente solo querían dormir el uno con el otro para siempre, pero sabían que en esos momentos no sería bueno, por eso intentaron dejar sus sentimientos de lado.
Pero Hyunjin no podía alejarse de Felix, y Felix no podía dejar de pensar en los abrazos por la cintura que Hyunjin le daba.-
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Exiliados // Hyunlix
FanfictionFelix solo quería vivir su vida de estudiante. Pero una prueba, lo manda a un internado lleno de gente con poderes mentales. Pero lo peor de todo, es que una mujer loca quiere matarlo. Alejado de su familia, tendría que enfrentarse a lo que es no te...