Capítulo 53

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—¡Despierta, Ashley! —Canturrea Alice en mi oreja y tira de la sábana que tengo enrollada en la pierna, miro el despertador y veo que sólo son solo las seis de la mañana.

—Alice, la boda es al medio día, ¿por qué me tengo que levantar ahora? —Me quejo y pienso en darme la vuelta y abrazar la almohada, pero antes de poder hacer lo que he pensado, noto el aire sobre mi cuerpo para luego caer en una bañera con el agua helada. —¡ALICE!

—Alice, ¿sabías que no hay que mojar a los perros? Ahí es cuando atacan al dueño. —Dice Emmett desde algún piso de abajo entre risas.

—¡Soy un lobo! No un perro. —Gruño, Alice me quita mi pijama empapado con rapidez y me echa el champú sobre mi cabello comenzando a masajear eficazmente. —Alice, todavía se lavarme el pelo.

—Calla, hoy tengo muchas cosas que hacerte, y no tengo tiempo para tu ritmo lento y casi humano. —Se queja Alice contenta, seguro que esa felicidad se debe a que ahora puede vernos en sus visiones, a mi manada por lo menos.

Este año, Alice ha preparado mi boda desde Montreal, adivinando con sus visiones lo que Paul y yo amaríamos o adiaríamos, y han vuelto a Forks hace una semana para prepararlo todo, y así aprovechar para ver a Jake, quien en este año ya ha comenzado a salir con una Nessie que aparentaba unos diecisiete años.

Jake será el encargado en llevarme al altar, papá no quiso hacerlo porque dijo que no quería que se viera raro, pero le dije que me haría mucha ilusión que me llevara él, pero insistió en no hacerlo, en cambio, estaría como representante o padre de Paul, eso le hizo mucha ilusión a Paul, ya que, para él, su única familia somos las manadas y sus hijos.

A lo largo de la mañana, Alice me hace pasar por distintas torturas como la depilación integra haciendo que mi grito se escuche, creo yo, hasta la Reserva; después me ha exfoliado y echado crema por todo el cuerpo varias veces, pues por mi alta temperatura, la crema se evapora demasiado rápido, al igual que las mascarillas para la cara. Cuando Alice me termina de maquillar, son ya las doce, sólo falta solo una hora para la ceremonia que será en la Reserva, se ha dado permiso especial a los Cullen para poder entrar tanto para preparar la boda como para asistir a ella.

—Ashley, deberías llamar a Paul, acaba de lanzar a Seth por la ventana y su madre está enfadada porque la sangre ha manchado el traje. —Comenta Alice como si del tiempo se trata, tomo mi móvil y marco el número de Paul.

—¡Lobo tonto! ¿Qué le has hecho al pobre Seth? —Pregunto a modo de saludo, escucho como un lloriqueo animal nada propio de Paul, así que debe estar de los nervios.

—Lo siento, pero no paraba de colocarme la corbata, y me estaba poniendo más nervioso de lo que ya estoy, a la una estarás, ¿verdad? —Pregunta temeroso desde el otro lado de la línea.

—Paul, ¿te piensas que me voy a dar a la fuga o algo así? —Pregunto poniendo los ojos en blanco ante su inseguridad.

—No has contestado, eso me hace pensar que si. —Contesta serio, ¿tiene cambios de humor o solo son los nervios de la boda?

—Cariño, ¿estás embarazado? —Pregunto riéndome ante su bufido, pero mi lobo no está para bromas. —Paul, a la una estaré o andando hacia el altar o sobre él, tengo que colgar, te amo.

—Te amo, pequeña. —Se despide más tranquilo y cuelga.

—Alice, ¿lanzará a alguien más por la ventana? —Pregunto, temiendo por el pobre Koda.

—No, pero... ¡Vamos a ponerte el vestido! —Exclama seguido por los gritos de felicidad de Nessie y los aplausos efusivos de Rosalie. Bella y yo nos miramos y ponemos los ojos en blanco ante eso.

Cuando ya tengo el vestido puesto y me dan los últimos retoques, Daniel y Dana entran andando torpe y graciosamente hacia mí, pero paran en cuanto me ven tan rara. Dana y Daniel bajan en mis brazos hasta el coche de Carlisle, en el que iremos al claro donde será la boda, al pie de las escaleras están Jake y Jasper, quienes me llevarán a la ceremonia.

—¡Ash! —Exclama Jake con la boca abierta, le da un codazo a Jasper mientras dice: —Esos son los buenos genes Black.

Jasper pone los ojos en blanco y camina hacia el coche seguido por nosotros, Jake se sienta detrás conmigo poniendo sobre su regazo a Dana mientras yo lo hago con Daniel.

—¿Es verdad que Paul ha lanzado a Seth por una ventana? —Pregunta Jake mientras juega con Danny.

—Si, pero Sue solo se ha preocupado por si el traje se manchaba. —Jake, Jasper y yo nos pasamos el viaje a la Reserva riéndonos, y al aparcar, aparecen Seth y Leah para tomar a los gemelos. —¡Seth! Siento lo de la ventana. —Me disculpo con una sonrisa, pero Seth se ha quedado mirándome de arriba a bajo y solo susurra un "joder".

Leah y Seth se llevan a los gemelos y estos comienzan a andar graciosamente para llegar al pasillo. Escucho a todos decir cosas como "¡OHHH!", "¡Qué adorables!" y cosas así, Jake me ofrece su brazo y lo tomo nerviosamente.

—¿Lista? —Pregunta mi hermano en un susurro, asiento y al ver la decoración me quedo sorprendida enormemente. Los árboles están forrados por telas blancas, desde las ramas cuelgan flores enrolladas con luces blancas. El pasillo que da al altar está cubierto por pétalos blancos y al fondo, un altar hecho de madera blanca con la pintura artísticamente desgastada donde está mi lobo, al verlo no puedo evitar sonreír e intentar correr hacia él, pero Jake me agarra más fuerte del brazo provocando la risa de todos y un suspiro irritado por parte de Alice. Cuando llego al altar junto a Paul, suspiro de alivio, Jake me ha hecho andar muy despacio, mi lobo me toma de la mano y me coloca a su lado.

El chamán de nuestra tribu comienza con la ceremonia y lo lamento por los que no sepan hablar Quileute, ya que nuestras ceremonias, y más cuando se trata de miembros de la manada e incluso una alfa, deben ser lo más tradicionales posibles.

—Paul Lahote, ¿e oe i lawe i kau wahine Ashley e hoʻohanohano mea hewaʻiʻo a me ka hoʻopale ai ia e like me ka mea pono? *

*Paul Lahote, ¿Aceptas a Ashley como tu esposa para honrarla como se merece y protegerla como se debe?

—Ae, au i makemake ai. —Contesta Paul con una preciosa sonrisa mientras me guiña un ojo, ¿cómo puede hacer eso justo ahora y conseguir que me derrita?

—Ashley Black, e oe lawe me Paul kau kane, e hoomaikai aku ia ia e like me kona hewaʻiʻo, a hoʻopale ai ia e like me ka mea pono? *

*Ashley Black, ¿aceptas a Paul como tu esposo para honrarlo como se merece y protegerlo como se debe?

—Ae, au i makemake ai. —Contesto y se me escapa una pequeña lágrima de la felicidad del momento.

—Nā kūpuna makemake oe i ka pomaikai ma o kou mare ana, e selladla me ka honi*. —Declara el chamán y da por finalizada la ceremonia. Paul se acerca a mí, me toma por la cintura pegándome a su cuerpo y me besa demasiado fervientemente para estar frente a la familia y amigos.

*Los ancestros os desean felicidad en vuestra unión, ahora selladla con un beso.

Paul y yo nos miramos con amor cuando nos separamos lentamente tras nuestro beso, pero Paul nunca ha sido nada sutil y "susurra" en mi oído: —Cuando menos te lo esperes te voy a arrancar este vestido y a hacerte otro bebé. —Gruñe, y todos con demasiada buena audición se ríen. ¿Cómo sonrojarme cuando yo también quiero hacer los mismo con su traje?

—Te amo, señor Lahote.

—Te amo, señora Lahote. —Dice contra mi mejilla. —Para siempre.

FIN

BLACK  |PAUL LAHOTE|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora