La nueva integrante de la manada |QUIL ATEARA|

Capítulo 37

—¿Entiendes por qué hemos ampliado y reforzado tu protección? —Pregunta Sam tras haber explicado el nuevo plan en el que, prácticamente, nunca podré estar sola, ni si quiera en el baño, así que el nuevo plan se basa en que yo pase vergüenza y me sienta mucho más agobiada que antes.

—Si, alfa. —Susurro cansinamente, pero lo único que recibo son miradas molestas de los chicos. —Si chicos, he dicho esto antes, y si, si no fuese por ese Cullen yo ahora estaría en manos de ese loco, pero entended que estoy harta de no tener libertad, de sentirme agobiada, de no poder ni ir al baño sola.

—¿Prefieres tener esa vida con nosotros o estar muerta o secuestrada por esa sanguijuela de ojos rojos? —Pregunta Seth fríamente, y es la primera vez que hablamos desde Alec me amenazó, y me sorprende verlo así, pero, diablos, tiene razón.

—Eso no hace falta preguntarlo, yo quiero estar con vosotros, sois mi familia. —Respondo, y antes de poder pararla, una lágrima cae por mi mejilla, la cual limpia Quil dándome un casto beso en los labios, pero eso no quita que los chicos aúllen como siempre que nos ven besándonos.

—Chicos. —Dice Sam rodando los ojos. —Lexa, entiendo que no sea lo mejor pasar todo el día con ellos, te entiendo perfectamente.

—¡Eh! Tenéis suerte de poder contemplar esto todo el día. —Dice Jared molesto mientras se señala la cara y el cuerpo. —Solo os diré... ¡De nada!

—Si, gracias por comerte todo lo que no es tuyo. —Gruñe Paul dándole una colleja, haciendo que se comiencen a pelear entre ellos.

—¡Cómo se os ocurra romper algo os mato! —Exclama una voz a mi espalda, y al girarme veo a mi padre con una brecha en la frente, heridas por la cara y un brazo escayolado. Los Cullen lo rescataron de los brazos de los neófitos y ha estado descansando en el hospital para recuperarse por completo.

—¡Papi! —Exclamo con un puchero antes de correr a sus brazos, abrazándolo con fuerza pero sin hacerlo daño, pero me alejo con fuerza al notar el hedor que emana. —¿Has estado con vampiros? —Pregunto alejándome de él, notando a Quil en mi espalda. Justo veo tras él a mamá abrazando su brazo, ¿pero qué...?