♡ Fuera de mi Liga ♡ [Jardín de Meteoros]

18

lixue | ೃ࿔₊•

—Lei. ¿La vas a dejar irse, de nuevo?— agarre una de las galletas y me la lleve a la boca.

Estamos en su cuarto hablando, después de la fiesta no respondía mis llamadas ni mensajes así que decidí venir a su casa a verlo.

Él estuvo ahí para mi, así que yo lo estaré para él. 

—No se.

Agarre su mano y la apreté, el las vio y me miró a los ojos—. Si sabes que hacer, sólo tienes miedo por el que pasará. Si no lo haces, te vas a arrepentir toda tu vida. Yo siempre te apoyaré.

—No te merezco—. entrelazó nuestros dedos dando un ligero apretón.

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Hoy es el día en que se va Jing, estamos reunidos en el aeropuerto. Estos últimos días los pasamos en Shanghái juntas.

Ximen me tiene abrazada porque no he podido dejar de llorar dese hace un rato, aunque ahora estoy más calmada, él sigue sin dejar de abrazarme dándome todo su apoyo.

—¿Aún no puedes contactarte con Lei?– le pregunto Meizuo a Ximen.

—No está disponible desde ayer.

—Sabe qué Jing se marcha hoy, no lo puedo creer—. sonreí sin que me vieran, es parte de nuestro plan.

—Tal vez yo pueda, ¿lo intento?— los tres miramos a Qinghe con su celular afuera.

—Meizuo, sigue intentando—. le dije.

Ah Si llego a nosotros con una caja en sus manos.

—Ah Si, ¿Lei no vino contigo?— le preguntó Ximen.

—¿No está aquí?

—No.

Seguimos esperando hasta que Qinghe le pregunto a Ah Si que había en la caja, hice oídos sordos porque no me interesa.

Jing se vuelve a ir, y esta vez ninguna de las dos sabe cuándo nos volveríamos a ver y eso me pone más triste.

—¿Qué tan estúpido debes ser para decir algo así?— vi a Ah Si con intriga, no se de qué habla—. Si ese es el caso, no te sirve de nada. ¿Y si te mueres mañana? Una vida de lamentos. Si no te expresas, ¿esperas qué alguien te taladre la cabeza para ver qué tan deprimido estás?

Me quede pensando en lo que había dicho Ah Si hasta que vi a Jing enfrente mío, sonreí viéndola, no quiero que su último recuerdo mío fuera una imagen mía llorando.

—Me voy. Cuídense.

—Cuídate–. le dijeron Meizuo y Ximen.

Me separe de Ximen para ir a abrazar a Jing, quien al ver mis intenciones abrió sus brazos.

—El amor es amor—. me susurró en el oído—. Es algo que no podemos controlar. Cuando reconozcas tus verdaderos sentimientos, sé egoísta y sé feliz de una vez por todas, no me enojare.