Tierra Media: One Shots

Protegerte III

Abrió los ojos lentamente, lo primero que vio fue un techo alto de piedra oscura. Miró a su alrededor, un mueble con una vela la cual se desgastaba poco a poco, una jarra y un vaso. 

Alargó el brazo para agarrar el vaso pero un doloroso pinchazo atravesó su espalda. De su boca salió un pequeño quejido, en sus ojos se empezaban a acumular las lágrimas, era un dolor tan agudo que pensaba que en cualquier momento moriría..

-Ertha...- aquella voz hizo que girase la cabeza al lado contrario encontrándose con Kili.

-¿Kili? ¿Dónde estoy?- preguntó con hilo de voz- ¿Qué me ha pasado?- derramó algunas lágrimas.

-Tranquila, estás bien- acarició su cabeza con cuidado- estás a salvo, Azog no te volverá a dañar.

-¿Qué pasó?

-Azog te...- el sonido de la puerta abriéndose interrumpió al enano, giró la cabeza para encontrarse con Fili, tenía grandes bolsas oscuras bajo sus ojos, su rostro cansado demostraba no haber dormido nada. Fili fijó sus ojos en la chica, ambos se miraban- Yo, mejor me voy- besó la frente de la chica y le dedicó una sonrisa. Caminó hacia la puerta, al pasar por el lado del rubio, palmeó su hombro y lo miró con una leve sonrisa- No seas muy duro con ella.

Salió dejándolos solos.

Fili caminó hasta la silla que había al lado de la cama donde estaba Ertha, llevó sus ojos al suelo, evitando mirarla.

Ertha en ningún momento dejó de mirarlo.

-Fili, ¿cómo he...?- el rubio la interrumpió con la voz rota.

-¡Nunca vuelvas a hacer eso!- exclamó mirando a la joven, por sus mejillas caían lágrimas. Se sentía furioso con ella.

-¿Qué?

-¡Nunca vuelvas a exponerte a un riesgo así!- se levantó de la silla con brusquedad- ¿Sabes los días que nos has hecho pasar? ¿Sabes lo que es tener a alguien a quien amas postrado en una cama sin saber si va a vivir o a morir? ¿Sabes el miedo que pasé al verte sangrando? ¿Al ver cómo morías lentamente sin que yo pudiera hacer algo?- sus lágrimas caían con más rapidez.

-Fili, prometí proteger al rey a toda costa.

-¿A toda costa? ¿Y si hubieras muerto, Ertha? ¿Qué sería de mí sin ti? ¿Te has parado a pensar en eso?- bramó frenético.

-Firmé un contrato como protectora de la Compañía y en especial del rey Thorin. Debía cumplir con el contrato.

-Pero... ¿Y nosotros? ¿Qué pasa conmigo?- se acercó a ella sentándose a un lado de la cama, más tranquilo- Entiendo que quisieras proteger a mi tío y lo que hiciste fue valiente, dar tu vida por él, pero... Ertha, una vez más te has tomado tu trabajo muy en serio- respiró profundo para tranquilizarse- Primero con Kili, evitaste que una flecha envenenada le diera a él, pero te dio a ti... Si no hubiese sido por Tauriel, tú estarías muerta. Ahora mi tío- entrelazó su mano con la de la chica, quien estaba atenta a sus palabras- has estado a punto de morir, tan cerca de la muerte, y me mataba el saber que no podía hacer nada para evitarlo...- bajó la cabeza sollozando.

-Fili, estoy aquí- soltó la mano del enano para llevarla a su rostro, acariciando su mejilla y su barba- y no pienso irme de tu lado- el rubio la miró con una sonrisa nerviosa- estaría junto a ti hasta en el fin del mundo- Fili se fue acercando a ella con lentitud- No te será tan fácil deshacerte de mí, heredero- el enano rió, aquella era su chica, la que tanto amaba.

-No tengo pensamiento de alejarme de ti- inclinó su rostro sobre el de la joven.

Sus labios se rozaban, ambos habían cerrado los ojos disfrutando del tacto.