3. Je veux

714 40 0
                                    

ALBA

—¿Qué le has dicho? —la pregunté cuando llegamos a su habitación.

Me miró y entró.

—Te lo estoy diciendo en serio Marina.
—Yo no la he dicho nada de lo que pueda arrepentirme.
—No es eso, es si la has contado algo de mí.
—Sí.
—¡Marina!
—¿Qué?
—¿Cómo que "qué"? Quiero saber todo lo que la hayas podido decir de mí.
—¿Tanto importa Alba? No te va a hacer nada, bueno, comerte con la mirada pero nada más —sonrió.
—No estoy para bromas —me estaba empezando a cansar.
—Yo tampoco.
—No quiero que nadie sepa nada de mí, ¿o es que no lo entiendes?
—Pues claro que lo entiendo, pero no tienes casi amigas, una más no estaría mal.
—¿De dónde es ella?
—Madrid.
—Ves, no podemos ser amigas.
—Bueno pues otra cosa —sonrió pícaramente.
—¡Tíaaa! Qué poca ayuda tengo contigo de verdad.
—Tú tranqui que como me entere que te hace daño la mato.
—Vale, ya está.

Salí de su habitación y fui a la sala del personal donde se encontraba Sebas mirando las facturas.

—Alba, hay que hacer algo para aumentar los ingresos, no vamos mal pero si no viene más gente o no economizamos esto se va a ir al garete.
—Creo que ya tengo la solución, ahora vuelvo.

Salí y fui escaleras arriba y llamé a la puerta indicada.

—¡Voy! —gritaron desde dentro.

Esperé hasta que por fin abrieron.

—Uy, es usted, ¿qué quería? —su amiga me abrió.
—¿Está Natalia?
—Se está duchando, ¿querías algo?
—Dila luego que se pase por la recepción.
—Vale...

Bajé de nuevo y fui con Sebas.

—¿A dónde has ido?
—Tengo una idea. Aquí se aloja un grupo de músicos, "Los SinMiedo", ¿te suena?
—Ehm... No mucho.
—Búscalo en YouTube.

Cogió su móvil e hizo lo que le dije. Eligió el primer vídeo "La Playa - La Oreja de Van Gogh by Los SinMiedo".

No sé si aún me recuerdas
Nos conocimos al tiempo
Tú, el mar y el cielo
Y quién me trajo a ti... —empezó Natalia a cantar en el vídeo.

Sebas me miró pero que yo estaba absorta en la canción.

—Cantan muy bien —finalizó la canción y guardó su móvil.
—Por eso, quizá se puede hacer un anuncio y que la gente pague una entrada de 5€.
—¿Tienes consentimiento del grupo?
—No, pero ahora va a bajar una componente y se lo voy a preguntar.
—Los que están alojados no tienen que pagar, ¿no?
—Pues claro que no.
—Ya veremos lo que te dicen, igualmente hay que pensar un plan B.
—¿Has pensado en alguno?
—No, y por eso me tienes que ayudar.
—Yo poco para eso, a ti se te dan bien las mates no a mí.
—¿Y qué harás cuando yo no esté?
—Eso va a pasar dentro de mucho así que no hay de qué preocuparse —sonreí y cogí una cerveza de la nevera que había allí.
—Bueno, no te creas.
—¿Por qué?
—Quizá en Semana Santa no podré estar.
—¿¡Qué!?
—Hay un curso de economía en Madrid en una universidad, creo que es un buen recurso para aumentar mis conocimientos.
—¿Y el hotel? Ya sabes que en esa época todo el mundo viene aquí.
—Lo siento Alba, pero ya lo tengo pagado.
—Joder...
—Pero es en vacaciones.
—¿Y cuándo estudio para los exámenes que hay a la vuelta?
—No sé Alba, eso ya te tienes que apañar tú. Tu hermana a lo mejor.
—Ya veré lo que hago, ahora usted —le señalé— tiene que pensar un plan.
—¿Y tú qué vas a hacer?
—Tomarme la cerveza en el sofá de fuera para esperar a la componente de "Los SinMiedo" —salí y me senté en el sofá.

La Posada | ALBALIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora