MI MASCOTA (Imagina con Park Jimin -BTS)

Capítulo 2

— ¿Y eso que tiene que ver? — Preguntó sin entender mucho a lo que se refería, ganándose la cara sorprendida de Jimin.—

— ¿Cómo que tiene que ver? ¿Al menos sabes lo que significa tener "novia"? — Noté como bajo la mirada y se mordió el labio inferior.—

— No lo sé. —Respondió con total sinceridad, mientras jugueteaba con sus dedos debido al nerviosismo que le provocaba la mirada intensa de Jimin, era algo extraño para ella aquel sentimiento.—

— Es estar con la persona que te gusta, en tu caso sería tener "novio". — Le informé y ella movió la cabeza como si realmente no sabría lo que significa.—

— ¿Persona que te gusta? —Se agarró de la nuca al no entender aquella palabra, eran nuevas palabras que nunca había escuchado.—

— Es como un... Espera, estamos cambiando de tema ¿Quién eres realmente? —Pregunté al recordar que aquella chica acaba de aparecer en mi casa, diciendo ser mi gata.—

— Ya te lo dije, soy tu gata. —Alzó la mirada y le sonrió.— Soy Minny, tu gata.

— ¿Cómo creerte? —Bajé la mirada, mientras en mi cabeza ideaba un plan por si aparecían otros chicos y quisieran robarme o secuestrarme, uno nunca sabe lo que realmente quiere hacerme esta chica.—

— ¡Tengo una idea! —Exclamó orgullosa, logrando que Jimin diera un salto de sorpresa. Para luego dirigirse hacia la cocina, de donde cogió un pedazo de lana color rosado y volvió hacia Jimin.— ¿Cómo alguien desconocida sabría que este es el juguete preferido de Minny?

— Cualquiera podría decir que un pedazo de lana es el juguete favorito de los gatos, eso no prueba mucho. —Susurré un poco dudoso de mis palabras, cómo sabía que era el juguete preferido de Minny, esto me estaba dando miedo.—

— ¿Quieres que te hable como nos conocimos? Digo para que me creas. —Se quedó mirando a Jimin y este asintió.—

— Hazlo... —Respondí confiado, obviamente eso no podría saber alguien que solo esta loca.—

— Te llamas Park Jimin, tienes veinticuatro años y naciste el 13 de octubre de 1995. Hace cuatro años nos conocimos en una tienda de albóndigas, yo caminaba con hambre y estaba sucia, cuando me miraste me diste una albóndiga y de allí me llevaste a tu casa... ¿Eso te convence?

— Esto no puede ser, debo estar en un sueño. —Me di una bofetada y sentí dolor, definitivamente no era un sueño.— Pero cómo... Oh dios mío.

— ¿Te siente bien? —Preguntó preocupada al verlo agarrando del cabello.—

— ¡Para nada! ¡¿Cómo crees que me siento luego de mi mascota es un humano?! ¡Encima estoy hablándote! —Grité al sentirme demasiado confundido de la realidad y la ficción, pero ella estaba allí.—

— No es para que te exaltes... —Susurró un poco temerosa de la fuerte voz de Jimin, que le estaba dando miedo, así que solo retrocedió.—

— ¡Y me respondes! —Noté que había retrocedido, creo que la estaba asustando.— ¿Cómo no quiere que me exalte? ¿Crees que es fácil pensar que eres un humano cuando en la mañana eras un gato?

— No debí convertirme, pensé que me querías... por eso yo...decidí mostrar mi...mi verdadera verdadera cara, pero... —Su respiración comenzó a agitarse y las lagrimas comenzaron a caer.—

— No es para que llores. —Me acerqué a ella y pude acariciarle el cabello, cuando era mi gata siempre lo hacía pero ahora resultaba diferente.— Lo siento, no debí hablarte de esa forma.