Jᴏᴇsᴛᴀʀ'ˢ☆ [κιиκτοϐєя] 2020

ᵈᵃʸ ³•ᴏʀɢᴀsᴍ ᴅᴇɴɪᴀʟ• [Josuke]

orgasm denial:
Consiste en llevar al punto exacto la sensación del orgasmo y justo en ese momento detenerte y volver a empezar

Josuke x Okuyasu
(Top!Okuyasu x Bottom!Josuke)

Era la primera vez que Okuyasu visitaba la casa Higashikata. Josuke con una sonrisa le había dicho a su madre que iban a estudiar al cuarto.

Obviamente no era así. Tan solo no quería que su madre los interrumpiera, ni siquiera había un examen cercano.

Con una sonrisa nerviosa, Josuke cerró la puerta del cuarto, quedó apoyado contra esta, su espalda recostada. Él tenía sus ojos cerrados. Era la primera vez que lo hacían en su casa. Siempre había sido en algún local, como un hotel.

Okuyasu caminó hacia su novio, con calma. Él también tenía nervios, quería tan solo hacer que se sintiera cómodo. La palma de su mano acarició uno de esos mofletes sonrojados de Josuke. Resaltaban su pálida piel.

-Hey, Josuke, ¿todo bien?-

-Sí. Son los nervios.- Intentó relajar sus hombros, estaba algo nervioso, aunque no tenso.

-Ven. Conmigo.-

Tomó su mano de forma tan caballerosa, como si tratara a una dama. Josuke rió un poco por ello, fueron ambos hacia la cama del anfitrión.

Ninguno comenzó a quitarse sus ropas, en cambio, ellos comenzaron a entrelazar sus labios de gentil forma. Lentamente, transmitiéndose ese calor con sus belfos. Josuke ladeó un poco su cabeza, quería apresurarse un poco.

Okuyasu le comprendía, llevaban algún tiempo sin hacerlo, y este era un momento especial. Iban a hacer el amor en casa de Josuke. En la mayor intimidad de su casa.

Ambos habían acordado no quitarse toda la ropa, podrían haber puesto el seguro a la puerta, pero sería sospechoso para Tomoko, Josuke jamás cerraba su puerta.

Tenían una hora y media para hacerlo, puesto que ella siempre le iba a buscar para la cena.

Ambos estaban llenos de adrenalina, Okuyasu perdía la paciencia y sin cuidados le toquetea por encima de la ropa, aprieta una mano en su delgada cintura, hunde su cara en el pecho de Josuke. Él se las arregla para bajar esa camisa a tal punto que puede ver un hermoso escote desnudo de Josuke.

En otra ocasión le haría una foto con su celular.

-Wah...tienes unos pechos hermosos.- Comenta entre risas.

Josuke le acompaña, tiene una sonrisa hermosa y apenada, Okuyasu levanta la vista mientras la admira.

Algo que ha tomado por sorpresa es que Josuke se venga de esa pequeña broma. Y de qué forma. Con su mano aprieta el miembro de su compañero. Okuyasu jadea con su voz ronca.

-Dime, Okuyasu. ¿quieres una paja?-

-¿Por qué no me la chupas?- No tenían un lenguaje tan...limpio. Típico de aquellos estudiantes.

-Genial. ¿Crees que puedas aguantar?- Ya estaba lanzando el reto. Se preguntaba, luego de todas aquellas veces que habían hecho algo, cuánto era capaz de aguantar Okuyasu. Él presumía siempre de que tenía muy buena resistencia, Josuke presumía de que tenia muy buena técnica.

En fin, Josuke se apresura en sacar el miembro de su escondite. Tenía un fuerte olor característico y en sus manos estaba cálido, un poco suave pero firme.

Empapó sus labios con su lengua, trató de empapar también primero el miembro, pues era mejor tenerlo húmedo para el uso de su boca.

Desde su punto de vista, Okuyasu siempre disfrutaba ver a quien fuera también su mejor amigo jugar con su pene. Tenía buenos trucos para ellos.

Como lo que hace justo ahora: pasar su lengua por debajo de esa piel que resguarda lo rosado de su hombría. Entre sus lengüetazos esbozó una sonrisa: sabía que lo estaba haciendo de maravilla, cuando observó ese rostro agitado de Okuyasu lo supo todo.

-¿Ya vas a...terminar?- Cuestionó ahora, mientras metía de una vez, para luego sacarlo de su boca. Nuevamente, estaba siendo desafiante, su novio gruñe.

-No...continúa.-

Era tanta la presión en su pene que ya lo podía sentir palpitar, la sangre fluía furiosamente por su órgano reproductor. Distraía su mente con cualquier tipo de pensamientos que no fueran ver a Josuke engullir su miembro, su querido compañero de clases, su novio.

Pero sentía que iba a terminar, vaya que iba a hacerlo ahora que Josuke movía sus labios más rápido por la extensión de su miembro.

Y él lo sabía.

Porque se detuvo en ese preciso momento en el que casi gritaba:

-¡Josuke...!-

Oh...¡él se aprovechaba de eso! Se detuvo en seco pero no quería decir que no tenía nada más que hacer.

-Oye, ya que lo dijiste hace un momento...- Por debajo de su uniforme consiguió bajar su camiseta color amarillo. -Te gustaban mis...- Desabotona un botón de su gakuran. Expone sus pectorales. -...pechos, ¿no es así?-

-Ooh...- Okuyasu está impresionado, cuando Josuke junta un poco sus pectorales, es capaz de formar un escote...bastante provocador a decir verdad.

-¡Con permiso~!- Dice Okuyasu animado, colocando su propio miembro entre ellos. Ya estando lubricado, pudo moverlo con mayor facilidad. ¡Jamás pensó en esta posibilidad con un chico! Pero se estaba emocionando demasiado.

Y su pene también. Ahora es Josuke quien domina el ritmo, se mueve junto a él, sonriendo ante el esfuerzo que hace, que está teniendo sus frutos.

Y ya no tarda Okuyasu en querer terminar de nuevo, su miembro palpitando entre esas dos masas firmes que simulan de forma graciosa los senos de una fémina.

-¡Josuke...!¡Voy a-!-

-Venga...-

Cesó el movimiento. Ahora el pene de su compañero reposa en su boca, o al menos la punta del mismo. Él presiona sus labios, sus ojos color púrpura observan a detalle a Okuyasu, vigoroso, su voz algo potente como para que lo estén haciendo en su casa con su madre aún allí. Venía un orgasmo más intenso, debido a lo sobrecargado que estaba.

Pronto está recibiendo en su boca su esperma. No es la primera vez que lo han hecho, así que no está muy sorprendido. Pero sí gustoso de hacerlo, la ingiere como con un cierto orgullo.

-¡Josuke, la cena ya está lista!-

Irónico. No podían pensar en otro calificativo.

Josuke responde casi de inmediato, aún con el miembro de su novio reposando donde mismo, qué escena. Su compañero puede ver su cambio de actitud al instante, está realmente apenado, aunque no insatisfecho; arreglando su ropa pero sin dar la cara.

-Fue bueno.-

Josuke asintió, no dijo nada más.

Estaba sonriendo. Okuyasu no pudo notarlo, mas lo presintió. Conocía bastante bien que colocarse de espaldas era una forma favorita de Josuke para guardar una sonrisa o un sonrojo.

Le pareció tierno.