Capítulo 11: ❛❛Atracción❜❜.
Aquel que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los ''cómos''.
—Friedrich Nietzsche.
Muchas veces el "por qué" de las cosas nos puede llenar de completa angustia e incertidumbre, no comprendemos la razón de que las cosas sucedan o dejen de suceder, como si en realidad todo formara parte de una extraña casualidad, las leyes del destino o simple manía. Desde el principio de los tiempos siempre fue así, y enamorarse claramente es una de ellas. Amar a alguien no es nada más y nada menos que una grandiosa apuesta a ciegas, el valioso resultado de una ilimitada inversión por la cual lo damos todo, más sin embargo, somos completamente ingenuos sobre lo que obtendremos. "En la guerra y el amor todo se vale". Las personas dicen eso, y mostrar debilidad hacia alguien no nos vuelve otra cosa más que unos miserables y rotundos estúpidos.
No controlamos el momento, la persona y mucho menos, no podemos, deliberadamente, alterar lo que sentimos. El instante en el que nos volvemos dependientes emocionalmente de otra persona, presenciamos en un solo solo intervalo de tiempo lo agobiante, frustrante y confuso del suceso.
JeongIn lo sentía, por supuesto que era consciente de los nervios y la adrenalina que lo abordaban, ciertamente era extraño sentirse de esa manera, y también era la primera vez que le sucedía con alguien, mejor dicho, por alguien.
¿Un Yang JeongIn con la guardia baja? ¡Por favor, eso era imaginable!
Poco creíble, pero ahí estaba.
Su nombre, aquél que consideraba tan normal y monótono, sonaba tan bonito y etéreo en los labios ajenos, que por un momento solo deseo contemplarlo. Además de la buena apariencia, inteligencia y todo lo demás, su odioso profesor tenía una voz hermosa.
¿Espera? ¿Realmente era eso lo que estaba pensando?
Considerándolo mejor, no era una voz hermosa, simplemente se mostraba muy agradable al oído humano.
Sí, eso era.
HyunJin dió un par de pasos en su dirección, y eventualmente, el chico pudo sentir cómo todo su cuerpo se ponía alerta. Demonios, estar tan sumido en todo eso del matrimonio arreglado comenzaba a alterarlo.
—Como docente, mi principal trabajo consiste en velar y mantenerme al tanto de todo aquello que pueda afectar minuciosamente en el rendimiento académico de mis alumnos —HyunJin hizo una pausa, sus ojos de un marrón profundo al mismo tiempo contemplando con intensidad el rostro del más bajo. JeongIn mantenía su mirada perdida, luciendo confuso y algo ansioso por la situación en que se encontraban. «ciertamente debería haber huido antes»—. La verdad es que nunca esperé tener que hacer algo como esto, sin embargo, dadas las circunstancias, no tendré más opción que hacerlo. Yang JeongIn, ¿lo sabes? últimamente tu promedio ha estado bajando demasiado.
Surgió otra pausa, aunque las miradas de ambos estaban conectadas, quizás los pensamientos que tenían variaban demasiado, mientras HyunJin se preguntaba en cómo un simple uniforme estudiantil podía verse tan bien en alguien, JeongIn pensaba en la mejor excusa para salir huyendo.
Si, puede que estuviera un poco incómodo, o lo siguiente a eso.
—No me agrada la idea de forzar a alguien, cuando soy completamente consciente de sus capacidades. Cada quien se desenvuelve a su manera, ¿No lo crees, petit?
Y ahí estaba, ese apodo que aunque anteriormente quiso pasar por alto, generaba una sensación de costillas en su sistema; comenzaba a pensarlo y aquello no le agradaba para nada, no le gustaba la sensación de estar así por alguien, su estómago se revolvía y su corazón se aceleraba. ¿Podría encontrarse enfermo? Aunque era extraño, el mismo sentimiento solo surgía cuando su fastidioso maestro se encontraba cerca, de ser ese el caso, no podía ser una enfermedad muy común dentro del área.
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❛❛Vᴇʀʀᴜ̈ᴄᴋᴛ❜❜ •• HʏᴜɴIɴ
Fiksi Penggemar❛❛¿Qué pasa cuando el viejo profesor de historia decide que es tiempo de jubilarse? Fácil: ¡le damos la bienvenida a un excelente, atento y excesivamente guapo profesor de intercambio! No, ese no debería ser el orden de las cosas, por lo menos, no...