Élite

Capítulo XXI

Tras la visita inesperada de Declan, TaeHyung y JungKook subieron a la habitación de TaeHyung.

- No debo preocuparme, ¿verdad?

- Claro que no- dijo, abrazándole.

- ¿Realmente... conmigo estás así de bien?- preguntó, sin dejar de abrazarle- quiero decir... ¿te ayudo tanto?

- Muchísimo.

JungKook le desnudó y le llevó a la bañera de hidromasaje.

- Mi amor, no te sientas mal, pero...

- Shhh... sólo quiero cuidarte, siéntate, cierra los ojos y deja que te abrace.

TaeHyung se sentó en la bañera y el agua le llegó al cuello, JungKook se sentó a su lado, le abrazó y, al instante, TaeHyung cerró los ojos, realmente se sentía tranquilo.

- Gracias, mi amor- dijo TaeHyung, mientras una lágrima solitaria surcaba su mejilla.

Los días sucesivos a la improvisada llegada de Declan, dejaron un frío insólito en la casa. De pronto, un día se hallaron en la puerta mirando a MiHyung.

- Bueno, ha sido un placer quedarme, pero debo volver a Holanda- los miró- ¿Por qué no venís conmigo? Allí está toda nuestra familia- dijo la joven feliz- se van a alegrar mucho de conocerte, JungKook, y seguro que te alegrarás de conocer a un tío nuestro abogado.

El chico rio y miró a TaeHyung.

- No me importa hacer el traslado ya- confesó JungKook- hay gente que empieza la Universidad un mes tarde y no pasa nada. De hecho, hay gente que nunca va a clase y aprueba. En Holanda estaremos con tu familia, mi amor, estaremos los dos como antes...

- Como antes...

Tras aquello, TaeHyung y JungKook subieron a hacer las maletas con cuatro cosas necesarias y, al poco, estaban rumbo al aeropuerto junto con MiHyung.

Cuando llegaron a Holanda, fue una sorpresa para los señores Kim ver a su hija en compañía de su hermano y un desconocido.

- ¡TaeHyung!

- Tenemos que hablar...- dijo TaeHyung, de mal humor.

En completo silencio, se metieron en el monovolumen de los Kim y llegaron a una mansión mucho más grande que aquella que TaeHyung tenía en Irlanda.

- Bien, ¿se puede saber qué ocurre?- preguntó la señora Kim, mirando a sus hijos y a JungKook.

- Esto... tengo que contaros algo- dijo TaeHyung- algo que no os va a gustar. Sentaros- pidió y los señores Kim obedecieron y miraron a su hijo.

- ¿Os acordáis de Declan Berit?

- Oh, por favor, otra vez Declan...- se obstinó su padre.

- Hijo, eso fue hace años...

- El padre de Declan es un mafioso, cosa que yo no supe hasta que me instalé en Irlanda, ese hombre dirige casinos, se dedica a la prostitución y mata gente- dijo, sin más- los señores Kim se quedaron boquiabiertos ante aquella revelación- cuando llegué a Irlanda, yo estaba muy afectado por lo de Declan y... bueno... contrataba a gente...

- ¿Qué clase de gente?- preguntó la señora Kim.

- Hombres jóvenes que necesitaban dinero. Me limpiaban la casa y se acostaban conmigo a cambio de dinero- los señores Kim se quedaron boquiabiertos- digamos que, en cierto modo, empecé a permitir la prostitución en mi casa. Tuve a nueve chicos con problemas económicos, JungKook fue el décimo- dijo, señalándole. Los padres de TaeHyung miraron a JungKook- pero... él nunca me trató como los demás, siempre fue diferente y... es igual, rompimos el contrato y empezamos a salir juntos- dijo TaeHyung, que no quería entrar en detalles- lo que ocurre es que JungKook también fue un chico necesitado, sin blanca y lo fue por culpa del señor Berit y semanas después de que saldara su deuda, aparece Declan en mi casa, diciéndome que jamás quiso engañarme, que todo fue cosa de su padre...

- En cierto modo, creemos que el señor Berit sabe que TaeHyung y JungKook están en una relación y, por ello, ha enviado a Declan- dijo MiHyung- por otro lado, es el mandamás de la prostitución. Si se entera que TaeHyung ha tenido nueve prostitutos en su casa y no le ha pasado una suma por cada chico, le matará. A menos, claro, que uno de los nueve chicos decida hablar, entonces TaeHyung irá a la cárcel.

- Pero... no es ilegal lo que hacías- dijo JungKook, recordando las palabras de Nina Adams- asqueroso, pero no ilegal.

- Si alguno de esos chicos quiere demandar a TaeHyung por prostitución, puede hacerlo y ganará- dijo MiHyung.

- ¿Qué hacías con los contratos?

- Quemarlos...

- ¿EN QUÉ PENSABAS?- estalló su padre.

- En que soy joven, rico y guapo- dijo, sin más- no pensé las consecuencias.

- Llamaremos a tu tío- dijo su madre- hablaré con los vigilantes para que extremen la guardia. No salgáis de esta casa.

- MiHyung, acompaña a JungKook a la que será su habitación a partir de ahora- dijo el señor Kim.

- Claro, ven JungKook, te daré una bonita cerca de mi hermano...

- La habitación de invitados tres- dijo la señora Kim- no es la que está más cerca de TaeHyung, pero es que todas las habitaciones que están cerca de TaeHyung son pequeñas, esa tiene buen acceso al resto de la casa, es amplia, soleada y está muy bien arreglada. Estarás cómodo.

- Prefiero una pequeña y estar cerca de TaeHyung- dijo JungKook- si puede ser...

Los señores Kim miraron a JungKook, visiblemente sorprendidos, a Declan le encantaba quedarse en la habitación que le habían ofrecido a JungKook. Sin embargo, JungKook prefería estar cerca de TaeHyung.

- Bien, pues que te lleve TaeHyung, entonces...

Salieron de allí y TaeHyung parecía abatido.

- Gracias- dijo TaeHyung.

- ¿Por qué?

- Por demostrar amor hacia mi aun cuando no lo merezco...

- Deja de atormentarte- dijo JungKook.

TaeHyung abrió la puerta de la nueva habitación de JungKook y entró en aquella inhóspita oscuridad, subió la persiana y un chorro de luz iluminó la estancia. Era una habitación mucho más pequeña a la que JungKook tenía en casa de TaeHyung, el baño era pequeño y la cama era individual, no matrimonial.

- Esta habitación es un asco- dijo TaeHyung, mirando en derredor- no sé porque no te quedaste con la otra...

- Porque así estoy más cerca de ti- dijo abrazándole- no he venido aquí por tu casa, por tu dinero o por convencer a tus padres de algo. He venido por ti, por nosotros. Para estar mejor- suspiró- lo que no entiendo es como voy a continuar la Universidad.

- Mi tío, el abogado, va a llegar ahora, hablaremos con él a ver qué es lo mejor que podemos hacer, no te preocupes- le abrazó- lamento haberte metido en toda esta mierda.

Se escucharon unos pasos y se separaron. Era MiHyung.

- Tío TaeChul ya está aquí- dijo la chica.