Enamorada de mi mejor Amiga (CAMREN)

Capítulo 34 (Sueño)

POV CAMILA:

Desperté pegando un gran brinco y grito de la cama, ¿qué es lo que había sucedido? ¿Dónde estaba? 

- Camz, ¿estas bien? - Era Lauren mirándome preocupada, había dormido con ella, ¿había sido solo un sueño? ¿nunca nos habíamos separado? 

- Lauren, ¿seguimos juntas? 

- Claro que sí tonta, ¿soñaste feo? 

- Lauren, soñé que terminaba contigo solo por algo que no te he querido decir...

- Oh Camz, no importa, seguramente tendrás algo bueno que decirme por el cuál no me lo pudiste decir antes. 

- Estoy enferma Lauren... - tenía miedo, ¿y si sucedía como en mi sueño? Me sentía con un vacío dentro de mí, no entendía porque me sentía así si no había sido real.

- Camila, ya lo sabía, llamaron a mi celular los doctores, imaginé que necesitabas tiempo para procesarlo y que algún día me lo dirías. 

- ¿¡Es en serio Jauregui!? - grité, me sentía emocionada, gracias a Dios no me iba a terminar o yo a ella porque las cosas no salían como la teníamos planeada. 

- Claro, odio las mentiras, lo sabes, pero imaginé eso, que debías pensar como ibas a decírmelo. 

- Lauren, no quería arrastrarte conmigo, no quería meterte a un problema sin salida, porque en ese entonces lo era. 

- No importa, ven aquí.

Lauren me tomó de la cadera y me dio un suave beso, no quería separarme de ella nunca, ¿qué haría yo sin esta mujer? 

Comenzamos a besarnos cada vez más intenso, me separé de ella y me quedé mirando sus ojos, tenían un brillo especial, ni siquiera era su color el que me agradaba tanto, tenían algo especial que hacían que me perdiera en su mirada, su nariz, tan perfecta como sus cejas pronunciadas, su boca, que a cada segundo me llama para besarla, su cabello, ondulado, negro y largo, sus suaves manos, parecidas hechas por los mismos Dioses, delgadas y largas.

Lauren pudo comprender que la estaba observando mientras estaba perdida en mis pensamientos, comenzó a trazar garabatos en mi espalda, por debajo de la ropa que traía puesta, me hizo estremecerme al primer tacto pues sus manos estaban heladas y mi cuerpo estaba caliente, me sentía nerviosa, se me podía notar, si alguien nos viera de la manera en la que estábamos en ese momento, podría morirse de amor, no era necesario que nos dijeramos algo, sabíamos que con nuestras miradas bastaría, sería suficiente. 

- Lauren, te amo, amo cuándo puedo decir que eres mía, lo nuestro se siente tan bien, haría todo lo que me pidas porque estoy enamorada de ti, cuándo estoy sola sólo puedo pensar en nosotras dos, amo como se ve tu cabello cuándo lo sueltas después de que lo traes amarrado, podríamos agarrar el auto e irnos lejos de aquí, a donde sea, si es contigo yo sería feliz en donde quiera que pudiésemos estar, no quiero decirte adiós nunca, estaré aquí hasta el final Laur, y entonces fue ahí Jauregui, tus dedos rozaron los míos y no pude decir nada, aunque a veces no estás conmigo, puedo oír tu dulce voz, siempre serás tú.
Cuándo veas la luna, quiero que sepas que es casi tan hermosa como tú.

Lauren me apretó contra ella, podía escuchar el latido de su corazón, palpitaba muy rápido, si no la conociera diría que es miedo, pero estaba emocionada, sentí una lágrima cayendo del rostro de Lauren, no era tristeza, era nada más felicidad, me hacía sentir, bien, no tendría que mentirle nunca más al amor de mi vida...

POV LAUREN:

Las palabras de Camila, me habían dejado sin decir nada, no sabía que decirle, pero yo sentía algo que no podría describir en ese preciso momento, sólo quería estar con ella para siempre y no soltarla nunca, no importaba si me mintió, era por una buena causa, no me había mentido con otra cosa, así que eso no me molestaba, la necesitaba sentir más cerca, la amaba, de eso estaba segura, la amaría por siempre, aún si no estuviésemos juntas yo la seguiría amando, aún si ella estuviera con alguien más, aún si fingiéramos que nunca nos conocimos, le sería fiel, hasta la eternidad, mis sentimientos serían fieles a ella, no la estorbaría, pero mi amor por ella sería eterno. 

- Camz, me detengo a observarte, cada detalle tuyo, por más mínimo que sea, entonces es ahí, puedo darme cuenta, tus ojos son especiales, a veces conoces a alguien y aunque pensaste que nunca antes te gustaron los ojos cafés, son tu nuevo color favorito.

- Te amo Lauren.

- Te amo Camila.

Pasó así el tiempo, los doctores pudieron remediar la enfermedad de Camila, nuestros planes dieron un cambio inesperado, Camila estaba embarazada, yo le había propuesto matrimonio, éramos felices, sabíamos como arreglar nuestros problemas ahora, ya no había la necesidad de estarnos gritando, yo había estado sobria, y aquí estábamos, siendo la pareja que siempre soñamos ser, ella es tan hermosa, creía en nosotras, nos tenía fe y esperanza.

La amaba, de verdad lo hacía, no quería estar con nadie más, íbamos a tener una hija, aún no decidíamos el nombre, vivíamos bien, Camila se veía saludable, yo me estaba poniendo en forma porque me preocupaba mi salud al estar comiendo tanta chatarra.

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Bueno, al menos prometí que mi amor por Camila sería eterno...