C R U S H (Yeongyu)

32.

Era mi primer día de clases en la facultad de arquitectura, me desperté sintiéndome una asquerosa mierda como era costumbre desde que había dañado a Beomgyu y nuevamente me sentía horrible sin embargo estaba listo para continuar con mi vida queriendo ser una mejor persona y ya no causarle daño a nadie.

Me preparaba para ir a la universidad y quería verme bien como antes, queriendo cambiar realmente mi manera de ser y pensando que lo mejor sería verme guapo, sin ojeras ni los ojos hinchados aunque me sintiera horrible por dentro.

No había vuelto a ver a Beomgyu desde la vez que intente disculparme y obviamente lo hacía de todo corazón, no sé ni qué estaba pensando en el momento en el que le hice tanto daño. Quería verlo solo una vez más, ver su preciosa cara feliz y atenta sabiendo que está bien y que superó el horrible acontecimiento.

Caminaba y pensaba en el patio del campus, deseaba poder dar el ancho en arquitectura, pensaba que era lo mío desde que descubrí que me encantaba dibujar, no obstante me encontraba demasiado deprimido como para hacerlo y ya sé que lo he recalcado demasiado pero me es muy doloroso el hecho.

Veía hacia abajo y pateaba una piedra cuando vi unas botas peculiares que se me hacían muy conocidas, subí la mirada y ahí se encontraba.

Un chico de piel lechosa y tersa, con ojos color miel y unos labios rosados, cargando un libro y viéndome con una sonrisa preciosa. Lo recordaba de mi clase de Economía pero ¿Quien era? Yeo....¿yeosung? ¿Sungyeon? ¿Yeosang?

-Hola Seonghwa- Hablo siendo amable.

-Hola... Yeosang- dije un nombre al asar. -¿Qué haces en arquitectura? ¿No deberías estar con los demás en Economía? Estas a dos semestres de graduarte.

-Si, pero creí que era más importante mi amigo-

-¿Tienes un amigo en la facultad?-

-Si, tu eres mi amigo-

-Regresa a Economía entonces, la arquitectura no es tu verdadera pasión-

-Economía tampoco lo era ¿Sabes?-

-Tampoco deberías estar aqui por mi...-

-Quiero hacerlo... Escuche lo del incidente, se que realmente estás arrepentido. Quiero como tu amigo ayudarte a superarlo, si me dejas claro- se ofreció, si claro me hacían falta amigos y Yeosang, no parecía ser un chico tan malo, es más parecía ser el único preocupado por mi. Me agradaba.

-Ya eras mi amigo desde antes... Puedes hacer lo que quieras- me limité a responder aunque el era muy agradable realmente.

El sonrió y me siguió hacia ahora nuestra aula nueva.

Debo admitir que Yeosang es más agradable de lo que pensaba.

Incluso siendo la única persona que se interesó por mi cuando yo estaba en lo más bajo habla muy bien de él.

Estaba listo para regresar a la universidad, si bien no había superado tan bien el hecho anterior... (Que si, lo recuerdo perfectamente, pero es preferible que no se hable más del asunto) sentía que era hora de dejar de sentirme mal y empezar a ser libre de nuevo, salir con Yeonjun también venía dentro de mis planes aparte de que me encantaría que algún día adoptamos una mascota o bien un niño... Lo que veamos primero.

Me emocionaba la idea de regresar al siguiente semestre, era el último año de universidad por lo que tenía que esforzarme el doble y emprender ya fuera para trabajar en una empresa o crear la mía. No iba a quedarme toda la vida con un salario mínimo manejando redes sociales de gente importante.

Es más... Que yo haya visto no hay ninguna empresa que se dedique al manejo de redes sociales a cualquier persona. Podría emprender con eso.

El punto era que entre a la clase y me di cuenta que varios habían abandonado el grupo... Personas que yo quería mucho como Yeosang o Jeongin, me daba cierto sentimiento el no escuchar la risa tan característica de... El chico, de cierta manera me reconfortaba el poco tiempo que fuimos amigos.

En fin la vida seguía y yo me quedaba atrás por pensar siempre en el pasado.

Yeonjun tomo mi mano en la clase y le sonreí, sabía que él se preocupaba por si yo me sentía cómodo, era exactamente así, jamás me había sentido tan bien en la universidad, más que el cambio de estación estaba cerca y con ello venía el sol que calentaba menos entre la ventana de el aula, era el mejor del año, calentaba poco pero lo suficiente como para que pudiera dormir plácidamente en las clases aburridas.

-Beommie..- Me susurro a la mitad de la clase.

-Uhm?-

-Te dibuje, mira- hablo entregándome un dibujo muy deforme y gracioso.

-¿Que mierda es esto?-

-Asi te vez...-

-¿Cómo así me veo? ¿Tan feo soy?- pregunté asustado.

-Asi te vez... Pero cuando estamos en la cama- El dibujo cobraba sentido sin embargo aún era grotesco y ofensivo así que inmediatamente le di un zape en la frente y guarde el dibujo.

Era muy gracioso tener a Yeonjun a mí par de vez en cuando.

Deseaba de verdad quedarme con el por mucho tiempo... Lo suficiente para que nuestras pieles caídas y arrugadas aún se toquen mientras nos damos un tierno beso en una camilla de hospital despidiendonos uno del otro y esperando reencontrarnos en nuestra siguiente vida.

Así era yo... Imagine una larga vida con el, llena de hijos y nietos los cuales me encantaría cuidar cuando mis hijos tengan trabajo.

Que se puede pedir de alguien como yo, siempre nadando en fantasías y esperando llegar a mi felicidad. Incluso podría estar ya en ella, solo que aún no lo sé.

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Un capítulo un poco de relleno pero necesario para que su corazoncito se derritiera por lo tierno que es Beomgyu.

Si les gusto el capitulo no olviden dejar su estrellita y comentar que les pareció.

Sin más que decir... Feliz día, tarde, noche o madrugada.