ONLY US || JJ MAYBANK

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    La luz del sol me llega a los ojos y me remuevo entre las sábanas con cuidado. Abro lentamente mis ojos y giro sobre mi lado izquierdo veo que no hay nadie ahí tumbado me incorporo y rápidamente me recore todo el miedo por el cuerpo.

¿Se ha ido?

    Me levanto de la cama decidida y busco alguna camiseta que pueda cubrirme la mayor parte del cuerpo, encuentro una de él y sin pensármelo dos veces me la hecho encima y bajo hacia bajo. Miro hacia el salón y no hay nadie: completamente vacío; bajo completamente las escaleras y voy a hacia la cocina ando de puntillas con el corazón sonando a mil, pero rápidamente se calma cuando veo su figura ahí en la cocina. Lee un libro mientras echa cosas en un bowl, me acerco a él con cuidado mientras sonrío.

—¿Qué haces? —Le pregunto apoyando mis brazos en la barra.

     El chico se vuelve hacia mi rápido con una mano en el pecho y entonces habla -: ¿Podrías dejar de hacer eso? —Me pregunta, mirándome a los ojos.

—No —sonrió como tonta y beso sus labios castamente.

—Intento cocinar —responde mi pregunta —. Pero, realmente —me mira a los ojos —. No sé lo que estoy haciendo —confiesa y me hecho a reír —. No te rías —murmura pero paso de su comentario.

—¿Quieres que te ayude? —propongo pero el niega rápidamente.

—No -vuelve a negar una vez más —. Tú deberías estar en la cama y yo debería estar acabando el desayuno para despertarte a besos y ver como comes en la cama.

Suena tonto pero desearía hacer eso ahora mismo, aunque la idea de ayudar a JJ cocinar sigue en mi mente. Doy dos pasos más hacia él y rodeo su cuello con mis brazos cortos y lo acerco hacia mi; y, poco a poco, quedamos a unos centímetros de cada uno.

—Desearía subir a dormir un poco más —confieso —. Pero prefiero ayudarte —beso su mejilla —. Ya me harás el desayuno mañana.

—¿Podrás arreglar lo que he hecho? —pregunto divertido.

—No sé, vamos a ver ...

Y me separo de él después de que me de un pequeño beso en la comisura de mis labios, amo sus pequeños gesto que hace día tras día. Jamás me imaginaria que pudiera levantarse pronto e intentar preparar algo de comida para su novia. Jamás lo había pensado. Jamás había pensado que disfrutaría mi última semana en Outer Banks con él.

Estoy tumbada en la cama aún con su camiseta, él esta dentro de la ducha. No me molestado en cambiarme ni en levantarme hace más de cinco horas que hemos acabado de comer una pizza que hemos encargado, sin duda esta semana voy a añadir a mi cuerpo todo lo que he perdido, pero no me importa. Sigo hablando con Kiara y los chicos que me preguntan cómo están yendo estos días, aunque realmente, solo llevamos un día aquí; les digo que JJ es una persona totalmente diferente esta cariñoso e incluso ha intentado hacerme el desayuno, sus amigos se extrañan y yo me río mientras leo la conversación.

—¿De que te ríes? —pregunta su voz grave.

Rápidamente dejo el móvil apagado en la mesita y levanto mis ojos para mirarle. Su pelo esta mojado y solo lleva una maldita toalla blanca al rededor de su cintura, sus abdominales están llenos de agua y demasiado marcados con su color bronceado. Muerdo mi labio sin darme cuenta y el se ríe. Me levanto de la cama para irme yo ahora a pegarme una ducha pero se interpone en mi camino.

—¿Dónde vas? —pregunta, mirándome fijamente a los ojos.

—A la ducha —le contesto después de soltar mis labios de entre mis dientes.